Aaron se cruzó de brazos, divertido con la escena frente a él, había decidido ir a la estación a ver como se manejaban sus hombres sin él, y tal como había sospechado, era un desastre, entre sus nuevos reclutas habían un par de diamantes en bruto, pero su diversión personal era ver a Remi entrenar con los nuevos.

Aaron sabía que el fuego era algo a lo que había que temer y respetar por igual, y también sabía perfectamente que la mayoría de los novatos eran temerarios, mientras observaba a Remi bajar por las escaleras de prácticas con el muñeco a cuestas (del lado equivocado) mientras se saltaba un par de escalones, no pudo evitar recordar a Matías, el chico había querido llegar a ser capitán,y mierda, seguía a Aarón a todas partes, así que tal vez en algún punto lo habría logrado, sacudió la cabeza intentando mantenerse en el presente, Remi estaba haciendo un desastre, y cuando llegó finalmente abajo, Gregory, que había vuelto a trabajar a tan solo una semana de haber salido del hospi