Anne y Aaron rieron con complicidad al escuchar los gemidos de Erin desde el baño, la mujer parecía no haber tomado demasiado bien las cosas, pero estaban seguros de que Remi se haría cargo mientras que Aaron estaba intentando no sentirse completamente dejado de lado, si bien estaba completamente de aceurdo con lo que sucedía, pues él mismo había enviado a Remi al baño, empezaba a detestar la m*****a herida de su pierna, porque se le ocurrían un par de formas de ahcer que la mujer cayera rendida a sus pies

- ¿Estás celoso? - preguntó Anne acurrucandose a su lado, la mujer tenía puesta una bata suave y estaba recostada sobre Aaron

- Bueno, no es divertido verlo llevarse toda la diversión - se quejó, abrazando a la mujer y besando su frente - ¿Estás bien?

- Excelente - aseguró ella suspirando con satisfacción, sus pechos y su culo ardían de forma exquisita con cada roce de la tela contra su cuerpo, y el dulce dolor de su entrepierna enviaba un escalofrío por su cuerpo, haicendola sen