Erin vio a su hijo correr contento con su nueva mascota, un perro de poco más de un año que habían rescatado los chicos hace poco más de un mes y que por supuesto, habían intnetado convencerla interminablemente de traer el animal como regalo de cumpleaños para Caleb.

Pero incluso ella tenía que admitir que el animal era adorable, y su hijo lo había llamado "manchas" debido aque por supuesto, era un dalmata, y desde el momento en que llegó, fue la sensación, Remi y Aaron se acercaron al niño, ambos probablemente tan emocionados como él, por finalmente tener un perro en casa, Remit enía en brazos a Aaron Jr, que repetía contento "Guau Guau" incluso cunado Erin se había asegurado de utilizar las tarjetas y enseñarle que la apabra correcta era "perro"

- Dios, ver a un hombre ser buen padre hace que mis ovarios griten por un tercer hijo - se quejó una de las madres de los compañeros de Caleb, su nombre era Mia, una mujer en sus treinta, con cabello cobrizo y mirada perspicaz, Erin hizo un