Claro que debe ser una broma! Mi pobre hombre se lo creyó y terminó desmayado, Boris lo levanta entre sus brazos como si fuera un costal de papas.— Boris! ¡Más te vale que no lo lastimes!— Ahora que tienes conocimiento de tu estado, debes de evitar ponerte nervioso o realizar algún esfuerzo.— Mire doctor, muy sexy y todo pero no eres bueno con las bromas.— No es broma señor, usted está en cinta. Acaso no sabía que podía estarlo?— Claro que no! Mis padres dijeron que yo estaba bien!— Es casi imposible que un análisis general tenga errores, usted se hizo alguna vez?— Mis padres se encargaban de ello, no permitían que lo supiera.— No tiene usted los resultados de su prueba?— Que acaso no entiende! No tengo esos documentos! Esto debe ser un error! — Disculpe, pero esto no es un error. — Dice para luego hacer girar uno de los comandos en la máquina, el sonido era desesperante, parecían un grupo de tambores sonando.— Que carajo es eso!?— Son los latidos...— Dios, esto no puede
Todo parecía un sueño, Eric se ha vuelto más tierno y posesivo a la vez, sus demostraciones de cuidado y afecto ha pasado al extremo al punto que incluso va conmigo a la universidad, para cerciorarse de que nada me haría daño.Si me molestara que hiciera eso lo regañaría, pero me encanta que me cuide a su manera.— Hasta cuándo vendrá tu hombre a la universidad? — Reclama Eliot.— No lo sé, me gusta que cuide de mí.— Pero ni siquiera podemos disfrutar de las horas de descanso! — Marc como siempre con su drama.— Y hablando de tu hombre dónde está? — Pregunta Bhon.— Dijo que se encargaría de algunas cosas.— Por qué no le dices que vaya a su casa! Los demás nos ven raro!— Claro que verán raro si dos gigantes están frente a la puerta! Esto es el colmo! ¡Si mandara a sus atalayas porque mierda viene contigo!— Eliot cálmate, él solo quiere cuidar de mí.— Ya hagan silencio, la maestra Gessenie entrara en un momento.— Por qué se demora? Luego se pone exigente cuando somos nosotros...
— Bebé despierta... — Susurraba cerca de mi oído. No tengo ganas de despertar! Tan pronto pasaron las horas?— Mmmm no quiero ir! — Balbuceo aún con los ojos cerrados.— Dónde no quieres ir? — Se oye su voz melosa.— A la universidad, déjame quedar hoy...— Amor, son las 4 de la tarde. Me encantaría complacerte en no levantarte. Pero sé que estarás molesto si no vas a ver a tus padres.— Mis padres, claro! — Abro mis ojos sentándome en la cama bruscamente.— Amor, te lastimarás de esa manera. Cómo te sientes.— Bien, debemos ir a verlos.— Sigo pensando que no es buena idea bebé, no quiero que te alteres por lo que puedan decir.— No lo harán, estaré tranquilo.— Ok, te traje algunos bocaditos para que los comas antes.— Gracias gatito? Eres el mejor!— Lo sé... — Sonríe tiernamente, en verdad lo amo. Amo su lado tierno conmigo, el otro extremo de su personalidad que solo me pertenece a mí.Los minutos pasaban mientras disfrutaba de los bocados, luego me di una ducha para salir junto
Sabía que ir a esa casa no era buena idea, pero Edie no quería cambiar de pensar, cuando se le mete algo en la cabeza no hay nada que lo detenga.Oír todo lo que salía de esas asquerosas personas me enfurecía, quería matarlos con mis propias manos, pero a pesar de todo el dolor que ocasionaban a mi bebé, no dejaban de ser sus padres, sé que me odiaría si llegara a hacer todo lo que tenía en mi mente.Verlo llorar, estrujaba mi pecho, sus lágrimas no dejaban de brotar de sus ojos, haciendo que mi furia siguiera latente.Al subir al auto lo seguía llevando en mis brazos, no podía apartarlo de mi pecho mientras acariciaba su suave cabellera, deseando con todas mis fuerzas consolarlo. Poco a poco su llanto fue menguando mientras el peso de su cuerpo se hacía más pesado. Levantando su rostro podía notar que se había quedado dormido en medio del llanto.Oír sus sollozos mientras dormía me entristecía, regañándome por haber permitido que le hicieran daño de nuevo. El auto se detenía frente a
En estos días no tengo ganas de ir a la universidad, aunque mis amigos vinieran a visitarme, no podían levantarme el ánimo. Seguía triste por lo que había sucedido.Incluso decir que les haría pagar por el dolor que me causaron, no lo había esperado, pero ya no quería tener nada con esas personas.Eric ha estado preocupado y pegado a mi todo el día, llenándome de atenciones y cariño. Pero el día de hoy desperté sin encontrarlo en la cama, le había dicho que odio despertar y no verlo.Estar embarazado me hace más sensible, berrinchudo y malcriado, me siento como un niño consentido. Pero Eric es el culpable!Al no verlo a mi lado me pone triste y mis lágrimas salen de mis ojos sin permiso, aunque su aroma esté en la almohada no es lo mismo, abrazar el saco de plumas no me calma.La puerta de mi habitación en golpeada dos veces llamando mi atención.— Qué!?— Edie, puedo pasar? — Se oye la voz de Gavin, no lo había visto desde la última vez que fui a la universidad, claro si me mantuvo e
Un nuevo día iniciaba, lamentaba tener que encargarme yo mismo de recuperar las mercancías. Ese nuevo fiscal se está volviendo un verdadero dolor de cabeza.Clem no ha logrado comprar su apoyo, y se estaba volviendo en una piedra bastante molesta.Mi bebé dormía plácidamente en mis brazos, lentamente bajo de la cama para no despertarlo, estos días han sido muy tristes para él y solo podía acompañarlo para que no se dejará de cuidar.Dándome una ducha, luego bajo encontrándome con Clem ya en la sala esperándome.— Tienes todo listo?— Sí, conseguimos la orden del juez para que la mercancía fuera trasladada a otra jurisdicción.— Ese fiscal. Debemos de descubrir un método para tenerlo de nuestro lado.— Es alguien difícil, pero todos tienen un precio. Ahora logramos quitar de sus garras la carga y conociéndolo no se quedará tranquilo.— Bueno, ya nos encargaremos de resolverlo.— Y Edie? ¿Ya está mejor?— No ha querido salir de la habitación, en las noches lo escucho llorar incluso al d
Estaba tan a gusto durmiendo que unos gritos comenzaron a molestarme. Que acaso no pueden dejar dormir al que está triste!Dios! Esto me molesta en gran manera, abriendo mis ojos, noto que Gavin ya no estaba a mi lado. Me imagino que al darse cuenta que me quedé dormido decidió ir a su habitación.— Eric no lo hagas!La voz de Leo gritando varias veces llama mi atención.— Que sucede? Acaso Eric trajo de nuevo trabajo aquí! ¡Voy a matarlo!Juro que si ha traído gente a la mansión para liquidarlos, voy a castigarlo!Saliendo de mi habitación con desgano, no encontraba a nadie fuera, es algo raro ya que Boris es quien siempre se encuentra al abrir la puerta.Caminando en dirección a los gritos poco a poco voy dándome cuenta que me dirigía hacia esa habitación prohibida.Leo se encontraba golpeando la puerta con fuerzas gritando.— Eric por favor! No lo hagas!Que está haciendo Eric? Como para que Leo se pusiera de esa manera? A quien tendrá en esa habitación, y porqué está cerrada? No..
Disfrutar del delicioso helado cremoso es como estar en el paraíso, el suave y dulce sabor del dulce de leche contra lo ácido del limón, en verdad el que no lo haya probado se pierde de un manjar.Mi hombre solo me observaba desde el otro lado de la cama.— Bebé, por qué no quieres salir de la habitación? — Me pregunta cruzado de brazos.— No quiero, me gusta estar aquí...— Pero no te gustaría disfrutar de tu helado, en el jardín o en la sala.— Lo hago aquí contigo, o es que acaso quieres dejarme de nuevo! No tienes sentimientos!— Amor, tenía que encargarme de cosas importante...— Más importantes que yo?— No bebé, jamás habría algo más importante que cuidar de ti y de nuestros bebés.— En verdad ibas a matar a Gavin?— Amor, perdón. Pero compréndeme, te amo tanto que cualquiera que se acerque a ti me enfurece.— Pero Gavin, es indefenso. Yo solo quería darle cariño, ha sufrido mucho, además también es como yo.— Como tú? En qué sentido?— Él también puede concebir. Su madre lo ha