No lo podía creer, se la había llevado justo enfrente de mis narices ¡Es un hijo de put@! —No hace mucho de eso, debemos ser rápidos, ¡Aún debe estar cerca! —le decía al Reséndiz con desesperación.—Ya la policía está al tanto de la situación —decía con desesperante calma —. Incluso, ya tienen una fotografía de ella, la que usted me proporcionó al principio de la investigación y ya la enviaron a los aeropuertos y centrales. La añadieron al reporte de Óscar, ahora debemos esperar, no tenemos algún lugar a donde buscarlos. A la casa que tenía, ya no regresó más, lo único que sabemos ahora, es el tipo de vehículo que trae, gracias a la declaración de la víctima, toda la policía está al tanto de ese dato —no puede ser, ¿esperar? ¡No quiero esperar!—Fabio, debemos esperar, no queda de otra. Ya escuchaste al investigador, salir a la calle sería ponerte en peligro tú también, por lo alterado que estas y por si él te pudiera hacer algo, es un maldit0 psicópata —los ojos de Emily eran suplic
POV FABIONos llevaron a una parte un poco más alejada de la entrada a la sala de abordaje. Los policías entraron como si nada, solo iban a la expectativa. Los nervios me estaban matando, de pronto se escucharon gritos de personas.En ese momento no hubo poder humano que me detuviera, corrí lo más rápido que pude, llegué a la puerta, empujándola con fuerza.Mis ojos inmediatamente escanearon aquel lugar. De inmediato, localicé a ese hijo de put@, ambos nos miramos. Avanzó directo hacia mí, bueno, no precisamente hacia mí, sino a la puerta de salida, quería escapar el muy pendej0, pero sobre mi cadáver.Trató de frenar su avance al ver que dos agentes de policía se acercaban a la puerta de salida. Debió arrepentirse antes de avanzar hacia mí, sin darles tiempo, ni a los policías, ni al idiot@, de dos zancadas llegué hasta él y le di un puñetazo en el rostro con todas mis fuerzas.Cayó hacia atrás, se llevó las manos a la nariz, limpiando la sangre que le salía. Yo estaba más que furios
POV ANDREAEsto no puede estar pasando, la pesadilla sigue. No entiendo, ¿Qué es lo que estoy pagando?Se llevaron a Fabio a quirófano hace más de una hora y aún no sabemos nada de él. Lo único que nos dijo una enfermera, fue que tenía una hemorragia interna y que por eso no nos dimos cuenta del estado grave en el que se encontraba.Mi hijo no se puede quedar sin su padre, era en lo único en lo que pensaba en esos momentos. Esos pensamientos me recordaron algo, la mamá de Fabio aún no sabe todo lo que está ocurriendo.<
POV EMILYYa Andrea está más relajada. Los medicamentos que le inyectaron están haciendo su trabajo y yo me siento agotada. Me urge relajarme también, necesito a mi subyugado para sentirme mejor.Lo sé, lo sé, no me juzguen. Estoy consciente de que soy una enferma, pero no lo puedo evitar. Hace mucho que no puedo. Además, él es mi mejor medicina y más en estos momentos. Lamentablemente, sé que no podrá ser, así que tendré que conformarme con un café, espero que la cafeína me levante.Así que sin más salgo a una cafetería justo frente al hospital, lo que sirven aquí es una reverenda m1erda.Avanzo y justo antes de cruzar la calle, veo que el auto de Alonso va llegando, pero eso no es lo que verdaderamente llama mi atención, sino la peliteñida que va de copiloto.En ese momento me olvidé de mi dosis de cafeína y regresé tras el coche. Aparcan y salen dirigiéndose dentro del nosocomio. No logro alcanzarlos, este estacionamiento es bastante amplio.Alonso se adelanta y se queda hablando c
POV ANDREA—Y bien... —insistí.—Pues sí, si es esa tipa. Me imagino que llegó con Alonso porque él la conoce, él le recomendó. No he mirado ya nada extraño entre Fabio y ella en todo este tiempo, tal vez lo aluciné —me dijo, pero no le creo ni la mitad, no sabe mentir.—Ah, y ¿es por eso que no la soportas? —la cara que hizo es un poema. ¡Bingo! Es totalmente transparente, esta mujer no sabe esconder nada frente a mí.Pude notar que se la quería tragar en el instante que llegaron y se plantaron frente a nosotros. También vi que quería sacarla de los pelos, sin importarle quién la viera o las consecuencias que tuviera.Y en este momento no puede ni tomar aire normalmente, no me está diciendo toda la verdad, la pregunta es… ¿Por qué?—¡Ya pues… no me hostigues! Es cierto que aborrezco a esa put@ de mierd@. La detesto, ¡ggrrrrr! —y ahí estaba, la Emily que conozco, explosiva y mal hablada.—Te escucho…—Esa idiot@ trata de humillarme todo el tiempo. Siempre está diciendo cosas en doble
POV FABIOComencé a escuchar voces, unas voces muy lejanas, apenas audibles. Las reconocía perfectamente, las dos mujeres de mi vida.Me removía, pero no podía abrir los ojos y hablar mucho menos. Sentía un dolor punzante y con mucho ardor en mi costado, justo donde recibí la herida.Después de unos minutos, escuche más voces, al parecer del médico. El dolor fue cesando hasta que ya no dolió más, todo se volvió tranquilidad y oscuridad nuevamente.No sé cuánto tiempo pasó, no tengo noción de él en esta situación, ahora comenzaba a estar más lúcido. Podía sentir una pequeña mano sosteniendo la mía y otra acariciando mi cabeza, era la sensación más agradable que pudiera existir.—Si sigues haciendo eso, me vas a dejar pelón —reconocería esas manitos en donde fuera.—¡Despertaste! Se acercó y me dio un beso —extrañaba tanto sus labios —¡Despertó!No sabía a quién le estaba avisando, hasta que, del otro lado de la habitación, pude ver como mi madre se incorporaba de un sillón y se acercab
POV ANDREALas palabras de Fabio me habían dejado pensando, Sé muy bien que necesito esa ayuda y no de ahora, desde hace mucho debí tomar terapia para mejorar muchos aspectos de mi vida.—Dame tiempo, no será mucho, solo quiero estar tranquila y sin tener que salir por lo menos esta semana —me daba miedo que al salir pudiera encontrarme a Óscar, aunque sé que está tras las rejas, es inevitable sentir ese miedo.—Todo el tiempo que necesites princesa —me dio un beso tierno y me apretó nuevamente con su brazo acercándome más a él.—Además, no podemos salir del país, hasta que pase el juicio de Óscar y no sabemos cuándo vaya a ser eso —no quería verlo, pero tendría que hacerlo.El solo hecho de pasar a ratificar la declaración y firmar me causó ansiedad, no sé qué vaya a sentir cuando lo vuelva a ver en el juicio.—Tienes razón, aunque si por mí fuera, mañana mismo te tomaría de la mano y te llevaría a donde tú quisieras ir —yo solo quiero estar aquí acurrucaditos.—Vamos paso a paso, ad
POV FABIOEntrar a mi segundo lugar favorito después de tantos días, era realmente gratificante, el primero es al lado de mi princesa. Me sentía tan, pero tan bien, aspirar el aroma a albahaca mezclado con tomate recién cocido, era de los mejores aromas que puedan existir en el mundo.Ver a los comensales disfrutar cada platillo con los gestos de satisfacción es de lo mejor. Los meseros, atendiendo con amabilidad y gusto, ver que, gracias al esfuerzo de todos, esto está de pie, al igual que yo.Entramos por la parte frontal como cualquier cliente, mi princesa me arrastró hasta su mesa favorita, yo quería ir directo a la cocina, pero no me lo permitió.—Ni lo sueñes, el médico dijo que aún no puedes estar en el calor, mucho menos cerca del fuego y conociéndote, no vas a poder contener las ganas de acercarte a la estufa —así, sin más me regañó y me sentó para luego hacer lo mismo frente a mí.—Yo solo…—¡Ssshhh! Ni siquiera intentes convencerme de que te deje ir — ¿acaso acaba de chitar