Que me perdone Kanji, pero no puedo permitir que siga haciendo esto. ¡Esta atrocidad, es imperdonable!
Llegamos a la casa y James le avisó a sus subordinados sobre la vuelta que darían por el centro. Hoy mismo tengo que viajar a buscar a mis hijos. Akira no puede saber nada de este viaje. Si ve a Kaori y Lin juntos, esto sería otra desgracia más para esta familia. Nada más de imaginarlo se me eriza la piel.—Quiero que evacuen a todas las personas y derrumben ese lugar cuanto antes.—¿Está hablando de explosivos, mi señora?—Sí, no quiero que quede nada de ese lugar. Sé que a Kanji le dolerá, pero es todo lo que puedo hacer. Fueron muchos años para poder construir ese lugar y será un golpe fuerte para él verlo destruído.—Deberá irse de esta casa, señora. No sabemos si KanEstaba tan ansiosa, que estaba dando vueltas en el lugar, no encontraba nada más que hacer. La ansiedad me estaba consumiendo, estaban tardando demasiado. Quise salir a tomar algo de aire fresco mientras terminaban.—¿A dónde vas con tanta prisa, corderito? — me crucé con Akira en la entrada y casi me da un infarto, lo menos que pensaba era que me estaba siguiendo. ¿Qué se supone que le diga?—¿Qué haces aquí?— le pregunté molesta.—Buscando a mi princesa perdida.—No tengo tiempo para juegos, Akira.—Me avisaron de lo que hiciste. Que niña tan mala resultaste ser. ¿Sabes cómo debe estar Kanji en este momento?—No me importa como está, por nada de este mundo iba a permitir que ese sucio negocio continuara.—Lo sé, pero debiste avisarme.
—El viaje será largo y pasarlo atada sin posibilidad de soltarte sería terrible, ¿No crees, corderito?—Deja de jugar, Akira. Maldito sean tus impulsos. ¿Así juras amarme?—Una cosa el amor que siento por ti, otra muy diferente es el amor que siento por Kaori. Estoy seguro que me estás ocultando algo de mi hija y no te lo puedo perdonar, lisa. Te haré hablar, así me toque torturarte.—Hablemos como dos personas civilizadas, no tienes que llegar a estos extremos, Akira.—Por mi hija llegaría a este extremo y mucho más, ponme a prueba para que veas. Te amo mucho, pero amo mucho más a nuestra hija, y saber que hay algo que no me quieres decir, me hace enojar mucho.—No hay nada que te esté ocultando.—¿Por qué los enviaste a tan lejos y solos?—Ya te di
—No tengo nada que decir—Akira me soltó y se levantó de la cama, se veía muy molesto, pero no encontraba qué decirle para calmarlo.—Definitivamente esto no va a funcionar. No importa lo que haga, está relación está completamente jodida— caminó hasta las cortinas que dividían el pequeño espacio de la cama.—¿A dónde vas?—¿Tengo algún otro lado para ir?— no me sentía bien dejándolo ir así, y menos luego de lo que dijo. Sentía miedo de que lo que decía fuera cierto. A pesar de saber que cada día que pasa nuestra relación se deteriora más; escucharlo de él, muy en el fondo me dolió.Nuestra relación no da para más, pero aún guardaba esperanzas de que se pudiera recuperar el tiempo perdido. Ahora con esto de
Desperté en una especie de taller, atada de piernas y manos. Un olor a putrefacción invadía todo el lugar. Mi cuerpo dolía; en especial mi parte baja. Me sentía asqueada al estar tirada en el suelo e indefensa.—¿Cuánto tiempo creíste que ibas a seguir engañándome, lisa? — escuché la voz de Akira y fijé mi mirada en su dirección.Estaba sentado en una silla, en medio de dos hombres más. Sentí escalofríos al escucharlo pronunciar esas palabras.—Akira, ¿Dónde estoy? — pregunté asustada, tratando de sentarme.—Este será tu nuevo hogar, ¿No te gusta? — su expresión lucía diferente, no era el mismo Akira de siempre. Su mirada fria y seria, me erizó la piel.—¿Por qué me haces esto, Akira?— pregunt
—¿Qué me estás ocultando?— acercó su boca a mi oído.—Suéltame, no quiero estar aquí.—No me importa lo que quieras. De aquí no te vas, hasta que hables.—Me estás lastimando, Akira— me soltó según lo dije. Miré alrededor al ver que los hombres de Akira estaban acercándose—. Yo tengo que encontrarlos — dije temblorosa, y corrí hacia el auto, sabía que si corría a otro lado podían dispararme.—¿Qué tonterías estás haciendo, lisa? — me mostró las llaves del auto y las sacudió —. ¿Dejarás de jugar ya? Tu comportamiento me demuestra que algo está ocurriendo.—Si no eres tú quien tiene a nuestros hijos, ¿Será Kanji?—Me dijeron que sal
—¿Por qué la pregunta, Akira?—Curiosidad, ¿Por qué no continuamos?—¿No estás satisfecho todavía?—No, ha sido mucho tiempo desde la última vez que estuve contigo. ¿Cómo podría cansarme de esto? ¿Dirás que no tienes ganas de más? — se subió encima de mí y bajó su mano a mi entrepierna.—No es eso, Akira — subió su mano acariciando todo a su paso, hasta mi cintura.—Quitemos el teléfono a un lado y hagámoslo por un rato más— sacó el teléfono de mi ropa interior y lo tiró a un lado. Fue cuando me di cuenta que él sabía lo que estaba haciendo en el baño y su sonrisa me dio un escalofrío por todo mi cuerpo—. ¿Me amas, corderito?—Sí, Akir
Se veía furioso y apretó su mano con todas sus fuerzas.—Llévate a Kaori de aquí, lisa— me ordenó. Mi cuerpo estaba temblando, no quería que Kaori presenciara nada, pero no podía dejar a Lin solo con Akira.—Vámonos de aquí, Kaori.—No voy a dejar que le hagas nada a Lin, fue algo que deseábamos los dos— Kaori interfirió.—¡Sal de aquí, antes que olvide que eres mi hija!— le dijo Akira lleno de ira. Su expresión lucía como la de un mismo demonio. Le agarré la mano a Kaori y traté de llevarla a la fuerza a otra parte.—Kaori, perdóname. Debes quedarte aquí, dejemos que arreglen sus diferencias.—Lo va a matar, tienes que impedirlo, por favor—Kaori estaba llorando y me sujetó la ropa fuertemente, no sabía
KaoriCaminé hacia papá y traté de sujetar el cuerpo de mi mamá, pero Lin lo evitó.—No te acerques a este asesino, Kaori — me pidió, secando sus lágrimas.Papá aún estaba en Shock, se veía muy mal.AkiraEres un chico bueno, no seas como tú padre.¿Por qué mamá está tan fría?¿Por qué mamá no despierta?¿Por qué mamá no se mueve?No veo una vida lejos de ti. Quiero estar siempre contigo, Akira.Juro permanecer al lado de nuestros hijos y de ti, aún después de la muerte, lisa. Desde este día estaremos juntos para siempre, y ya no podrás escapar de mi, corderito.¡Vas a ser papá!No importa lo que hayas soñado, solo fue