15 de Enero de 2019
Mi nombre es Paige Jackson. Y estoy muerta. O al menos, eso creo. Mi cuerpo yace tumbado en una carretera, rodeado de altos árboles y niebla, desangrándome por el estómago. Siento un hilo de sangre deslizarse poco a poco hasta alcanzar los dedos de mis manos, apoyados en el suelo. Aún puedo moverlos un poco, pero muy inútilmente. ¿O no puedo y es todo cosa de mi cabeza? La verdad es que no me extrañaría. Siempre lo supe. Nunca fui una persona corriente. Siempre supe que algo estaba mal dentro de mí pero no sabía cómo decirlo ni expresarlo. Quizá eso cambió cuando conocí a Jasper. Aunque también tengo que decir que no precisamente mejoró mi vida, porque claro está como he terminado. Lo único bueno que puedo destacar es que me sentí más viva que nunca, durante cuatro largos meses. Y aunque sienta que me quedaban muchas cosas por hacer, nunca pensé que estar agonizando me traería tanta paz. He acabado con mi sufrimiento y con él, el de las personas que me amaban, que al estar cerca de mí, hacía de su vida una insufrible pesadilla. He jodido más de una vida. Y ahora supongo que me toca pagar el precio. Bastante caro, por cierto. Tan sólo tengo diecinueve años casi veinte. En fin, esto solo es producto de la poca coherencia que me queda restante. Empiezo a ver una luz,
¿Iré al cielo o al infierno?
No lo tengo muy claro. Supongo que os dejaré con la duda porque desde allí no creo que pueda comunicarme con vosotros.
Estos meses han sido muy intensos, ahora solo me apetece relajarme y descansar en paz, finalmente. Dejar de atormentarme a mí misma y a los que me rodean.
He escrito un diario durante todo este tiempo, desde el primer día de mi primer año de universidad, casualmente cuando conocí a Jasper. Sí, ya sé que lo menciono mucho, pero es una pieza fundamental en mi historia, para bien o para mal. Me apetece recordarlo por una última vez, es decisión vuestra si queréis escuchar mis palabras durante un rato más, pero os aviso de que no es una historia dulce. Más bien amarga. Difícil de digerir. Pero he de reconocer, que amé vivir de una manera tan intensa, hasta agotar mi último aliento de vida.
Firmado: Paige Jackson.
CAPÍTULO UNO 18 de Septiembre de 2018Un día más en el que soy una incomprendida. Por lo menos estas hojas me comprenden y puedo plasmar todos mis pensamientos sobre ellas. Qué placer. Es como un orgasmo infinito para mí deslizar mi bolígrafo sobre el papel y no sentirme cuestionada por las ideas que pasan a través de mi mente. Y es que yo pienso, ¿tan raro es que una adolescente, se sienta atraída por la muerte, la sangre, los cementerios, los gatos negros...y una gran lista de cosas que a la mayoría de personas les produce incomodidad?Hace muchos años, tendría yo unos once, maté a un gato negro.Fue sin querer. Lo encontré abandonado en un contenedor de basura y me lo llevé conmigo. Le di de comer, le mimé, incluso le puse nombre: Shado
CAPÍTULO DOSGenial, mi clase está en el último piso, lo que significa que llegaré sudada todos los días de subir las escaleras.Voy a tener tan sólo seis asignaturas, laboratorio de fotografía, laboratorio de escritura, laboratorio de pintura, proyecto de creación artística y teoría e historia del arte. Porque sí. He decidido estudiar bellas artes. Porque me gusta pintar. Lo amo. También escribir. Me relaja mucho.Me dirijo a entrar en el aula que ya está llena, todo el mundo está sentado menos el profesor. No sé cómo lo hago que llego tarde aun llegando temprano.Todos fijan sus miradas en mí mientras me disculpo incómodamente con el profesor y esquivo mesas y sillas hasta llegar a la única que est&aa
CAPÍTULO TRESEscucho un claxon proveniente de la calle, rápidamente bajo las escaleras que dan al “hall” interior y me miro al espejo, una última vez. Me he decantado por el negro, nunca falla. Atrevido y sensual.Vuelvo a escuchar el claxon. ¡Qué pesado! ¡Se morirá de ganas de que vea su coche nuevo!Abro la puerta, avanzo segura de mí misma y me quedo en el “hall” exterior mirando a Elliott fijamente, que me mira mientras está apoyado en el coche.— ¡Guapa! ¡Tengo la novia más guapa del mundo, señores vecinos! — Exclama gritando.— ¡Shhh! — Me acelero para intentar callarlo mientras corro hacia él. — &iq
CAPÍTULO CUATROLlegué de nuevo a la fiesta y me encontré a una patrulla de policías, entre ellos el padre de Elliott, Michael, que era el sheriff del pueblo, tomando datos a todas las almas allí presentes. Me quedé fuera de la propiedad. No entendía nada. ¿Todo en cuestión de media hora?Elliott salió de allí, me vio desde lejos, yo estaba esperando en la acera, no quería acercarme más para evitar que me preguntasen algo, qué pereza.Elliott habló con su padre durante varios segundos y el Sheriff Ronson le dejó marchar. Se dirigía hacia mí.— ¿Dónde estabas Paige? — Me preguntó preocupado. La verdad es que no se me ocurrió nada que decir. Me quedé callada. — ¿Qué d&
CAPÍTULO CINCOCon toda la tontería no me detuve a pensar ni un momento lo que quería de mí. Está claro que me ha chantajeado para que me fuera con él. ¿Y si lo sigue haciendo? Bueno, tampoco es que a mí me importe ser su compañera sexual. No. En serio. Céntrate. Tengo que hablar con Elliott antes de tomar una decisión y poner las cartas sobre la mesa. Con ambos.— ¿Sí? — Contesté a Tessa por teléfono parada en el hall interior.— ¿Por qué te has sido a media clase con ese chico tan raro? — Mi respiración se paraliza por unos segundos. — Elliott te ha visto por la ventana y está muy mosqueado.— Yo... — Suspiré.— Estás actuando muy raro, también me que desaparecis
CAPÍTULO SEIS 25 de Septiembre de 2018Abro los ojos. Está noche he dormido fatal. No paro de pensar en Elliott. Quiero que todo sea como antes. Antes de que mis ojos se clavasen profundamente en Jasper. Que tampoco sale de mi mente ni un puto segundo.Las cosas con mi madre parecen mejorar, estos días han sido bastante buenos dentro de lo que cabe. Y mi interior me pide a gritos preguntarle sobre mi padre, después de tantos años.Me meto en la ducha e intento despejar mi mente. En menos de una hora me cruzaré tanto con Elliott como con Jasper y no sé cómo voy a reaccionar. Tras unos días sin cruzar palabras con ambos, la intriga y la espera es matadora. Podría decir que me siento atraída por ambos. Bueno, eso es obvio. No quiero que Elliott desaparezca de mi
CAPÍTULO SIETEEncontré a Marc tirado en el suelo del salón, apuñalado, con los ojos abiertos. ¡Joder!Eso olía fatal. Me puse nerviosa. Que lo haya encontrado no quiere decir que yo lo haya matado. Espero que nadie piense eso. Tan solo estaba preocupada por un colega. Y menos mal que alguien pensó en él.Decidí no llamar a la policía, por lo menos por el momento, salí de su casa, y me fui caminando de vuelta a la universidad.Por el camino decidí mandarle un mensaje a Jasper. Sinceramente, era la única persona con la que me apetecía hablar.{Paige: He cambiado de idea. ¿Me puedes recoger en la puerta de la universidad?}Mi móvil vibró a los siete minutos, concretamente.{Jasper: Ya estoy en camino.}La caminata se me hizo larga, necesito v
CAPÍTULO OCHO27 de Septiembre de 2018Tengo un grave problema.Tan solo quiero ver a Jasper. Cuando estoy con él siempre me acabo olvidando de todas las preguntas que le quiero hacer. Decido mandarle un mensaje.{Paige: ¿Puedes verme esta tarde?}{Jasper: Sí.}{Paige: Te veo en la puerta de la universidad a las cinco.}Teniendo en cuenta que ya son las tres y media, decido ir a encargar los libros para clase y así quitármelo de en medio.Cuando bajo las escaleras, veo a mi madre hablando por teléfono, bastante tensa. Aunque decido ignorarlo, mi cabeza se queda pensando con quién podría estar hablando. Creo que va a ser hora de hacer una visita al sótano de casa. Seguro que me encuentro más d