Los pasos de Jackson al igual que su voz cada vez estaban más cerca de Liam y Olivia.—Una semana, una maldita semana y ya pasaron tres. ¿Acaso pensaste que estaba jugando? —dijo Jackson tomó el arma en sus manos moviéndola de lado a lado.—¿Qué demonios quiere?, ¿Por qué interrumpe mi boda de esa manera —exclamó Liam, estaba furioso y más al ver en lo que se había convertido su boda.—¡Vaya que hace falta ser estúpido! ¡Primito! —Bufó Jackson, llevó sus manos, su rostro y quitó la máscara de metal que tenía en su rostro.Los ojos de Olivia se llenaron de terror, Jackson parecía un monstruo, su lado izquierdo estaba casi que en carne viva, mientras su lado derecho tenía una enorme cicatriz de lado a lado.Liam se echó hacia atrás, realmente estaba conmovido, su primo estaba hecho un desastre, aún así no entendía por qué estaba así, y mucho menos cómo era que estaba vivo.—¿Te asombras de verme primito?, deberías estar agradecido, vine a salvarte de las garras de esta arpía —bufó Jacks
Olivia dió dos pasos e intentó tomar las manos de Liam, las cuales retiró de inmediato.—Liam, te lo ruego, déjame explicarte —dijo ella nuevamente.—¿Acaso crees que esto tiene alguna explicación? —dijo realmente ofendido —Primito, tienes toda la razón, lo que hizo está zorra no tiene excusa —habló Jackson. Liam se giró y pudo ver el gusto en su mirada, lo estaba disfrutando, vaya que si —Liam, por favor, Jackson me obligó, ¡Por favor! —dijo una vez más.—Sueltame, nunca te atrevas a colocar un solo dedo sobre mí, para mí estás muerta, lamento haberme casado contigo —dijo Liam con tanto desprecio que Olivia se dejó caer de rodillas ante él, su corazón dolía tanto que le quemaba hasta el alma —¡Liam! —dijo Olivia casi en un sollozo.—Jackson, me imagino que tú y ella —dijo Liam mirando con desprecio a Olivia quien apenas podía contener su llanto.—Efectivamente primito, ella y yo estamos juntos, ¿Sabes que hacíamos cuando ella salía de tu oficina?, si, eso mismo que estás pensando,
Arrepentimiento Liam frenó en seco, mientras sus manos golpeaban con fuerza el volante, le dolía el corazón, el alma, la mujer que amaba lo acaba de traicionar, ahora todo tenía sentido, las palabras de Paula, absolutamente todo.Darwin abrió sus ojos, y miró a todos lados en busca de Olivia, se acomodo rápidamente a notar que ella no estaba con ellos en el auto, todo había llegado a su mente como un ráfaga de aire.—¿Dónde está Olivia? —dijo Darwin llamando la atención de su nieto, Liam levantó su rostro del volante y miró a Darwin y dejó salir una pequeña sonrisa de emoción, al ver que su abuelo estaba bien.—Ella está donde tiene que estar —respondió, mientras colocaba de nuevo el pie en el acelerador.Darwin llevó sus manos a la cabeza, su nieto en verdad era un completo idiota.—¡Detente!, tenemos que volver por ella —exclamó, se quitó el cinturón. Darwin estaba angustiado por lo que le pudiera pasar a Olivia, ella le había dicho miles de veces de decirle todo a Liam, y él no l
Liam se colocó rápidamente de pie, tiró casi todo lo que había sobre el escritorio al piso y maldijo varias veces.—Señor Paterson, no creo que sea hora de arrepentimiento, creo que es mejor que usted vaya ahora mismo por su esposa e impida que su primo la toque, créame, él siempre estuvo detrás de ella, acechandola, si usted en este momento no hace nada, se arrepentirá toda la vida —exclamó George.Liam suspiro profundo, mientras una lágrima resbalaba por sus mejillas, era un completo idiota, solo esperaba poder recuperarla y que ella lo perdonará.—! George!, no podemos ir sin nada, Jackson tiene varios hombres a su servicio y yo en cambio no —dijo Liam.—No se preocupe señor, yo me encargue de avisarle al comandante de la policía tal y como me lo pidió su abuelo.Jackson, iba en uno de los autos, no iba a dejar que Leonardo se quedará con Olivia, ella era de él, y por supuesto que haría lo que fuera por tenerla en sus brazos.Leonardo, aceleró a un más, debía ir rápido a la casa qu
Héctor trago saliva, mientras miraba a Paula como se desnudaba ante sus ojos, era hermosa no lo podía negar, aunque también tenía presente que no podía caer de nuevo en sus brazos.—¿Qué haces Paula? —dijo con su voz carrasposa.—Solo quiero demostrarte que lo que hubo entre nosotros significó mucho para mí, aunque no estemos juntos —exclamó Paula .Con sus manos empujó el pecho de Héctor hacia atrás mientras se colocaba encima sobre el Su boca viajó a la de Héctor, quien apenas podía comprender lo que ella estaba haciendo. Paula empezó a restregar su sexo sobre la entrepierna de Héctor, “Dios”, se sentó tan maravillosp que seguramente se correría ahí mismo.Héctor trató de contenerse, vaya que si, tenerla de nuevo completamente expuesta para él, hizo que toda la cordura que le quedaba se fuera al infierno.Llevo una de sus manos al cabello de Paula lo tomó con fuerza y lo echó hacia atrás y haciendo que ella arqueara su cuerpo hacia atrás —¡Ahhh!. —Un gemido agudo desgarró la gar
Leonardo estaba que estallaba, Héctor era un inconsciente, ni siquiera era capaz de contestar su propio celular.Leonardo subió rápidamente las escaleras, sus pasos eran rápidos, no tenía tiempo para pensar, y mucho menos para ser delicado con su hermano menor.Sin dudarlo un segundo, Leonardo abrió la puerta de par en par, sin ni siquiera avisar. El grito de Paula acompañado de un insulto de Héctor hizo que Leonardo cerrará la puerta rápidamente.—¡Joder Leonardo!, ¿acaso no te enseñaron a tocar antes de entrar? —vociferó Héctor, se bajó de encima de Paula, y le pasó una sábana para que ella cubriera su cuerpo desnudo.—Ahora no tengo tiempo para disculpas, vístete, te espero en la biblioteca en dos minutos, y es mejor que lo muevas o de lo contrario seremos hombres muertos —dijo Leonardo, se rasco la cabeza.Acaba de ver a su hermano, y lo peor con otra mujer completamente desnuda, nunca le había gustado meterse en las relaciones de su hermano, solo esperaba que la mujer que estaba
Olivia se miró al espejo, y no pudo evitar llorar, se sentía miserable, el hombre que ella amaba ni siquiera la había querido escuchar.«Juro que nadie, nunca nadie va a volver a lastimarme» dijo mirándose al espejo, limpio sus lágrimas y se quitó el vestido de novia que aún llevaba puesto.Caminó hasta el baño abrió el grifo y se metió bajo la ducha, le dolía el corazón, el alma, solo que no se dejaría derribar por un hombre que la había dejado sin ni siquiera escuchar.Tan pronto salió del baño Olivia tomó una de las toallas que había sobre una mesa, enredó su cuerpo en ella, lo secó y caminó de nuevo hasta la habitación tomó unos jeans que estaban sobre la cama se los colocó junto con una blusa no podía negar que estaba destrozada, aún así estaba asombrada los jeans y la blusa encajaba perfectamente en su cuerpo.Tan pronto estuvo lista Olivia salió de la habitación recogió su cabello y caminó de nuevo hacia la biblioteca donde estaban los dos hermanos Mancini organizando todo pa
Leonardo se rasco la cabeza, él no podía poner en peligro a Olivia, miró a Héctor, y asintió. Leonardo dió dos zancadas se acercó a Olivia, se inclinó y tomó a Olivia de la cintura y la colocó sobre sus hombros.—¡Leonardo, no!, ¡Bájame! —gritó Olivia, aunque sus gritos eran en vano, Leonardo se encargaría de protegerla, así que la llevaría hasta la segunda plata, y pondría a sus dos mejores hombres a cuidarla.Paula apenas podía respirar tranquila, la enorme explosión había hecho que su corazón por poco y se saliera de su pecho. Ella terminó de ponerse sus zapatos y salió de la habitación, solo para encontrarse con Leonardo cargando a una mujer sobre sus hombros.Héctor, venía detrás de Leonardo, el también debía colocar a Paula a salvó, por nada en el mundo permitiría que algo malo le sucediera.—¿Héctor qué está sucediendo? —dijo Paula al ver que él venía detrás del hombre que cargaba a una mujer en sus hombros.—Hermosa, ahora no tengo tiempo de hablar contigo, por favor ven conmi