~~~Alison.―Tu casa no es el problema y lo sabes―le respondo, aunque estoy segura de que eso no lo va a calmar―es esto―le indico y muevo mis manos señalándonos a ambos―mira cómo me has traído a tu habitación, para reclamarme o la manera en que me tienes contra el colchón―le digo con rabia y miedo recorriendo mis venas―te crees mi dueño, James y piensas que puedes reclamarme cuando y como te da la gana y eso no está bien―le hago ver, pero parece que ha sido peor lo que le he dicho.― ¿Y te parece poco, Alison? ―me dice y respira profundo―cada vez que te encuentro lejos de mí, estás en peligro―me dice y yo lo miro detenidamente―en aquel bar, con los tipos que te embriagaron o la vez que te rescaté del idiota del hijo de tu jefe, sin contar con la vez que te bajaste de la limosina, ¿para qué, Alison? ―me señala ofuscado―para que luego tenga que ir como un desesperado hasta la casa de tu amiga y encontrarte con que ese tipo intentaba tomarte a la fuerza―me dice y ahora caigo en cuenta en
~~~Alison.El beso de James se siente cálido en mis labios, apasionado y salvaje, igual que él, bajando mis defensas a tal punto que no sé ni qué hacer, si seguir disfrutando de él o separarme violentamente, como debería de ser, después de todo, a cada minuto que paso perdiéndome en sus deliciosos labios, es como si perdiera algo de mí o peor aún, le diera la razón cuando dice que yo también estoy enamorada de él.Pero eso no puede ser verdad de ninguna manera, no puedo estar enamorada de una persona tan prepotente como él, quien quiere que haga su voluntad, esté o no de acuerdo con eso.Entonces, su cuerpo se vuelve posesivo con el mío, moviendo su pelvis hacia arriba y hacia abajo, mientras su beso se vuelve más dominante, haciendo que tiemble de pie a cabeza, pero no estoy muy segura si es por miedo a que haga lo que pretende o, peor aún, que de repente ya no lo quiera hacer."No, no puedo permitir esto", me digo y trato de deshacerme de sus manos y su cuerpo, luchando conmigo mis
~~~Punto de vista neutro.James se ha quedado perplejo, sin saber qué hacer ante lo que había pasado con Alison hace tan solo unos instantes.Se suponía que ese era el momento en que la haría reflexionar, que se debía dar cuenta de que estar fuera de su casa no era seguro y que debía volver con él y su hijo, quienes la amaban, y no a ese barrio peligroso, en donde ya sus enemigos sabían que vivía su mejor amiga y en donde ya la habían atacado dos veces.Un secreto que no podía declararle y cómo hacerlo, si no le explicaba todo lo que estaba enamorado de ella, o la manera en que perdió a sus padres y de cómo este mundo, el bajo mundo, no iba a desaparecer de su vida, aunque fuera ahora una humilde chica que se buscaba la vida honradamente.No, el peligro está sobre Alison en cada cosa que hiciera y James estaba muy claro en eso.No la espiaba porque quisiera acosarla, no, esa no era su intención. Lo hacía por su propia seguridad.Y sí, todo lo que ella había dicho y de lo cual lo acus
~~~Alison.En cuanto entro a la casa de Georgy, esta me mira y me abraza, al notar lo descompuesta que me encuentro.―Oh, cariño, pero qué te ha pasado―me dice, al tiempo que coloca mi cabeza en su hombro y yo estoy sollozando―ya, ya―me consuela, pasando su mano sobre mi cabeza.―Que he peleado con James, pero qué más iba a ser―le indico entre molesta y triste―él es un acosador y hoy me lo ha confesado, así que le he dicho que me deje en paz―le comento con el llanto en mi garganta.―Pero, quien mira a ese portento de hombre, no se puede imaginar una cosa como esa―me dice algo anonadada, así que la miro seriamente, así que respira profundo.―Y eso no es lo peor, porque he renunciado a su trabajo, le he dicho que no quiero que me siga, porque eso está muy mal, ¿sabes? ―le señalo hecha un mar de lágrimas―lo he llamado acosador, porque, ¿dime si no lo es? ―la cuestiono y ella me mira extrañada― ¿sabes en dónde vive ese ricachón? ―le indico toda consternada―al otro lado de la ciudad, en u
~~~Alison.Luego de que termino el día toda agotada, tomo el autobús que me lleva directamente a casa, en donde Georgy me espera con una sonrisa.― ¿Y cómo te ha...? ―me intenta decir, pero su voz se va apocando en cuanto me mira detenidamente― ¿tan mal te ha ido? ―me señala y yo respiro profundo.―Es un poco difícil, sin embargo, puedo con todo esto―le respondo y trato de sonreírle―pero ya aprenderé, ya lo verás―trato de decirle con mi mejor sonrisa, sin embargo, me parece que no la estoy convenciendo.―Oh, cariño, cuéntamelo todo―me pide y me solicita que me siente y yo con gusto lo hago, ya que me siento muerta.―Pues, nunca me habían regañado tanto y esos clientes son unos tacaños con las propinas, además de que tu tío Billy me ha pedido que limpie el contenedor de basura, de lo cual no estoy muy acostumbrada, ya sabes―le señalo y ella ahora me mira fijamente.―Pues, siempre puedes volver con James, ya sabes―me responde con una sonrisa cómplice―era el trabajo ideal, digo, solo te
~~~Punto de vista neutro.Desde la última visita que James le hizo a Alison en aquel restaurante, él estaba de muy mal humor.Él pensó que le había dado tiempo suficiente para que reflexionara, después de todo, ese pequeño cuchitril en el que trabajaba últimamente no era ni la sombra de su casa, es más, era mucho peor que el restaurante de comida italiana en donde la conoció.Pero, tal parece que el orgullo de ella era más grande que todas las necesidades que pudiera estar pasando y, mucho peor, era tal, que ni la trampa que le había montado en conjunto con Mark, para que tuviera lástima del chico y se devolviera a casa con ellos funcionó.Ya Mark, ese pequeño bribón con carita de ángel, le fue de lo más bien, porque no solo se ganó el helado que le dio Alison, Porque James también le compró otro juego, además del que le había pedido con anticipación.Pero él se sentía frustrado, también, ya que se la pasaba en las pocas noches en que había dormido a su lado y de la última vez, cuand
~~~James.En cuanto noto al lugar que me han traído los muchachos, los miro todo molesto.―Pero ¿a cuál de ustedes, idiotas, se le ha ocurrido la brillante idea de traerme hasta aquí? ―les digo ofuscado―y espero que ninguno me venga con el cuento de que es pura casualidad―les espeto cabreado.―No sé de qué está hablando, señor―se atreve a decirme Carlisle, luego de intercambiar miradas con Coleman―este es el restaurante de mi prima y ella nos da descuento si vengo con muchos clientes―me indica el muy descarado y yo miro ahora a Coleman.― ¿Qué, tú también tienes un familiar ahí o qué? ―le indico con sorna y él se encoje de hombros.―En absoluto, jefe―me dice de lo más tranquilo―ya he venido varias veces con Carlisle y la comida es buena y está dentro de mi presupuesto―me señala y yo pongo los ojos en blanco.Lo cierto es que yo también quiero entrar al sitio, sin embargo, ahí está ella y de seguro se enojará en cuanto me vea.Pero ya estoy harto de todo esto.Ella me rechazó y ahora
~~~Alison.Así que cuento hasta diez, pero como eso no es suficiente para tranquilizarme, respiro profundo varias veces, a ver si se me baja un poco la rabia, luego de lo cual, me encamino hasta la mesa de James.―Muy buenos días, señores―les digo toda risueña a James y a sus dos acompañantes, los cuales me brindan lo que supongo son sus mejores sonrisas.En cambio que James me mira con ojos divertidos, pero con las cejas fruncidas, pero no pierdo mi tiempo en observarlos, más bien les paso los menús, a ver si ya puedo pasar a la cocina con sus órdenes, para poder repartirle la comida.Porque, entre más rápido los despache, más pronto me libraré de su presencia.―Si gustan tenemos el especial del día o pueden pedir del menú ejecutivo, el cual viene con café y postre―les señalo con mi mejor sonrisa falsa―tómense su tiempo para escoger―les señalo, pero antes de que vayan a pedir algo, me retiro, tratando de mantener la compostura, al tiempo que estoy repitiendo mi mantra del día, ese q