— lo que acabas de escuchar— la voz de mi amiga se hizo presente.
— ¿De que hablas?! ni siquiera me acuerdo de ti!
Ni siquiera sé por qué aquellas palabras rompieron por completo mi corazón, él había sido especial y único mientras que yo posiblemente había sido una más, ni siquiera sabía porque esto me estaba sorprendiendo o por qué me estaba decepcionando tanto si era algo que supe es el primer momento.
Un hombre tan atractivo como este seguramente tenía opciones hasta para rechazar y ahora enterándome que posiblemente es adinerado.
—eso no quita que ella esté embarazada y este esperando a tu bebé!— dije muy molesta Por el simple hecho de pensar que nosotros no fuésemos especiales para él.
Definitivamente no tenía derecho de sentir esto que estaba sintiendo.
— No tienes lengua ahora o tu amiga siempre tiene que hablar por ti?— Preguntó
— Si puedo hablar por mí misma y si estoy embarazada, quizás no me recuerdes porque pasó un mes pero estuvimos en una fiesta juntos y bueno lo hicimos
— Y cómo que es mío?— preguntó y sin poder evitarlo simplemente llevé mi mano a su rostro fúrica aunque ni siquiera sabía por qué me sentía tan ofendida.
Supongo que era normal que el preguntara.
— Claro que es tuyo!!— Respondí — Puedes hacer todas las pruebas que quieras no temo a nada!! Pero no vine a pedirte nada solo que supieras que estaba esperando a tu hijo pero te aseguro que no te necesitamos para nada— Dicho eso solo me giré y comencé a caminar directamente al carro en qué habíamos llegado, segundos después Susana también entro.
Una risa escapó de sus labios cuando comenzó a manejar.
— Jamás pensé que mi amiga la más tranquila y la que no le gusta el conflicto reaccionaria de esa forma
No dije nada en todo el camino, solo quería llorar por el remolino de emociones que tenía en el momento y el hecho de saber que esa era su reacción me hacía ponerme más pensativa sobre nuestro futuro.
— Me podrías dejar en mi casa por favor Susi?— Pregunté la ví asentir.
El camino a casa ninguna de las dos dijo nada y al llegar me baje para luego despedirme con la mano, agradecia que ella no intentará presionarme para hablar.
Tenía muchas cosas que pensar.
Espere que si auto arranca antes de abrir la puerta en el lugar en el que vivía.
Entré con todo el cuidado que pude y en silencio, ví a mi padre en el sofá tirado seguramente muy borracho, habían muchas botellas a su alrededor y las cenizas de cigarros esparcidas por todo el suelo y el sofá.
Mire la hora en el reloj de mi muñeca eras las 7:30pm seguro en cualquier momento llegaría mi madre, debía subir lo más rápido que pudiera y mantenerme encerrada en mi habitación.
Me quité los zapatos para no hacer ruido alguno, tampoco quería que mi padre se despertara.
— Amara eres tu— La voz de mi padre llegó a mis oído lo que me hizo caminar más rápido a mi habitación con algo de miedo.
Debía llegar y encerrarme.
Me tranquilicé un poco al llegar y no escuchar pasos detrás de mí.
Estaba hablando dormido seguramente.
Mire mi cartera y saque de ella mi cuota diaria que en este lugar me exigían, ahora más que nunca tenía que hablar el dinero para evitar un golpiza.
Me daba pánico pensar que me hicieran perder a mi bebé.
Mi bebé.
Dios!
Cómo voy a traer a este mundo una alma tan inocente?!
Cómo traerlo a este infierno?!
No puedo...
No puedo hacerle esto...
Cerré todo con llave y me quite la ropa para ir directamente a la ducha una vez ahí traté de quedarme el mayor tiempo posible y no pude evitar pensar en el, en esos hermosos ojos ¿Nuestro bebé tendrá sus ojos?
Basta!!
Basta Lara!!
Salí de la ducha y me coloqué una pijama, hoy dormiría temprano, lo necesitaba.
Por hoy ya no iba a pensar en nada más, por hoy necesitaba despejar la mente.
...Desperté sobresaltada cuando los golpes en mi puerta se hicieron muy fuertes.
Me levanté apresurada pensando que era una emergencia hasta que mi cerebro hizo Click, era mi padre y no era por ninguna emergencia
— Abre ahora Lara!!— Grito mientras seguía golpeando la puerta
— Déjala en paz!— Oi a mi madre — Porque la estás buscando a ella?! que diablos te sucede!!— Un golpe en seco me hizo llegar las manos a mi boca, esto era nuevo, normalmente si no había gritos ni golpes
— Ella va a pagar tus malditos errores, ella es una m*****a golfa como tú!— Otros grito y un golpe más se escucho luego los quejidos de mi madre.
Quería salir pero me sentía aterrada.
Busqué mi teléfono para llamar a la policía pero cuando estaba a punto de marcar me detuve.
¿Que voy a decirles?
Mi mamá hará lo de siempre desmentirme.
Grité cuando los golpes volvieron a hacer en la puerta de mi habitación.
— Abre m*****a golfa!! Que abras
— Papá por favor detente — Le pedí en llantos
— Deja de llamarme papá estoy m*****amente harto de esta m*****a falsa!!— Grito y golpeó la puerta, está estaba apunto de ceder.— Tu m*****a madre y tú me conderon a esta vida, arruinaron mi vida y yo arruinare la tuya
Cómo si ya no lo hubiese hecho.
Le marqué a Susi.
— Estás bien?— Fue lo primero que oí cuando atendió al segundo timbre — Que sucede
— Mi papá intenta entrar a mi cuarto, llama a la policía, he llamado tantas veces que ya no vienen, por favor Susi.
— Abre ahora m*****a zorra!!— Grito fuerte.
— Esconderte, ya mando ayuda
Colgó
Y fue ahí que un golpe más hizo que la puerta cediera, corrí lo más rápido que pude al baño pero mi padre aún estando borracho logro ser más rápido que yo y me tomó del cabello haciéndome caer de espaldas.
—A dónde vas pequeña golfa?!— Preguntó cuando me tuvo en el suelo, su mano cerrada impacto contra mi rostro, chille del dolor y comencé a llorar.
Él se colocó encima de mi, tomando mis brazos y colocándolas a cada lado de mi cuerpo, comencé a moverme de forma desesperada
— Por favor para papá — rogué cuando llevo sus labios a mi cuello, el asco que estaba sintiendo era impresionante.
Todo el olía alcohol lo que me generaba náuseas y el hecho de que el estuviera tratando de abusar de mí
— Deja de decirme papá — Soltó una de mis manos y golpeó mi rostro haciendo que lo girara pero con esa mano que él había soltado trate de rasguñar su cara y al lograrlo comencé a patearlo buscando que se quitará encima de mi, pero el era mucho más fuerte que yo — Entiende golfa yo no soy tu padre y si lo soy de verdad no me interesa, voy a ruinarte la m*****a vida!!— Levanté mi rodilla y golpe su parte baja lo que lo hizo moverse un poco.
Cuando estaba apunto de sacarlo de encima de mi el se acomodo y comenzó a tratar de quitarme la ropa.
Comencé a llorar de forma desconsolada
Iba abusar de mí y probablemente no podía evitarlo.
Un disparo hizo que toda mi sangre se helara
— Aléjate de ella maldito hijo de perra!!!
Unos hombres levantaron a mi padre, sentí un alivio impresionante al sentir que la policía al fin había venido.Dios mío gracias!!Comencé a llorar, sentí como alguien me ayudaba a levantarme pero yo solo no podía abrir los ojos, me sentía débil, me dolía mucho el rostro.— Estás bien?— Una dulce voz me hizo abrir los ojos.Era el...Que hacía aquí? — Tu... Tu me salvaste?— Pregunté casi en un susurro.— Susana me llamo, me dijo que necesitabas ayuda — Con ese te revuelcas maldita golfa?!— El grito de mi padre me hizo mirarlo.Ahí estaban dos hombres tomándolo por los brazos mientras el me miraba con asco¿Ahora resulta que era yo quien le daba asco?No tuve ni tiempo reaccionar solo ví como Maximiliano se acercaba a él y lo golpeaba en el rostro — Desgraciado hijo de puta!!— Se acercó a él y le dijo algo que solo el pudo escuchar.El rostro de mi padre cambio de forma radical.Que significaba eso?Que le había dicho?No me interesa!Ojalá vaya preso.Salí de la habitación sintiend
" —No por favor detente — gritaba tan fuerte que sentía como comenzaba a arder mi garganta.— Papa por favor detente no le hagas daño, por favor...— corrí a buscar algo para intentar separarlo de mi madre, tenía miedo que fuese a matarla.Sus manos estaban aferradas a su cuello, la iba ahorcar y yo no podía quedarme ahí mirando como sucedía todo.— Vete Lara vete — ordenó mi madre de forma dura mientras me miraba.— Que te largues a tu cuarto!!— Trato de gritar pero se escuchó más como un susurró.Él iba a matarla si no la ayudaba.Mi padre se giró soltando a mi madre cuando me coloque detrás de él y golpee un poco su espalda para que la soltara.Cuando sus ojos conectaron conmigo podía ver la ira en ellos, y sentí aún más miedo, abrió su mano y golpeó mi rostro con tanta fuerza que me hizo caer al suelo.— que te vayas maldita zorra si no quieres que te pase lo mismo a ti o te vaya peor.Miré a mi madre quién se levantaba del suelo, quitaba la sangre de su rostro y se guindaba en el cu
— Felicidades Lara y maximiliano están esperando un bebé sano y fuerteDios!!No sé porque estaba sintiendo ese alivio tan impresionante, tenía una mezcla de emociones tan fuerte que comencé a llorar.— ¿Estás bien?— Oí la voz de Max, asentí con la cabeza, la doctora tenía una sonrisa en su rostro mientras me limpiaba la barriga y me pasaba un pañuelo, limpié mis lágrimas y una vez estuve limpia me bajé de la camilla— ¿Está segura de que estoy embarazada?— Pregunté mientras todos caminábamos hacia el escritorio de Maximiliano, ahí tomamos asiento los tres.— Tu bebé aún está muy pequeño pero se ve sano, tiene las medidas adecuadas para las 4 semanas que tienes— 4 semanas dan justo el tiempo de la fiesta, miré a maximiliano quería meterme en su mente y saber que pensaba, me daba al de miedo preguntarle directamente.— Te enviaré algunas cosas que debes tomar, este primer trimestre es muy importante Lara, por favor alimentate bien, se puntual con lo que voy a recetarte y en unas semanas
Maximiliano Petrova Entré a mi despacho y ahí estaba Santiago.¿Que mierda hacía aquí?!No puede ver a Lara, no todavía, no sin que sepa algo de lo que está sucediendo.— ¡¿Crees que es prudente que estés aquí?!!— Pregunté cerrando la puerta fuertemente haciéndole notar mi malestar— Dijiste que no querías que tus padres lo supieran!— Eres un hijo de perra me engañaste! — Se levantó hacerme frente — Te pedí un favor Maximiliano, solo un maldito favor y haces estás mierdas!! ¿Cómo te atreves?! Pensaste que había colocado a personas que vigilarán a Lara?!Un golpe en mi mejilla me hizo reaccionar y devolverselo haciendo que este comenzara a sangrar en la comisura de los labiosEntendia su molestia, claro que lo hacía pero no podía aceptarlo, tenía que seguir con la misma actitud.— Crees que lo hice a propósito?! Claro que no!— Que diablos paso entonces?! Explícamelo!!Quería mandarlo a la mierda pero no podía permitir que hiciera un escándalo y que Lara se enterará, era muy pronto p
Maximiliano petrovaAcompañé a Santiago hasta la puerta no porque quisiera ser un buen anfitrión ni mucho menos, solo no lo quería dejar solo con Lara.Sabía que en este momento ahí tenía muchos sentimientos encontrados yo la acabo de decir que había embarazada su hermana lo mejor era estar siempre entre ellos.—él es tu amigo?— preguntó Lara apenas Santiago se fue.— sí lo es, somos amigos desde hace 10 años más o menos estuvimos juntos en un internado nuestros padres eran socios— ella asintió con la cabeza pero no dijo nada más— manda a llamar a tu amiga para que sepa que estás bien, te mandé también a comprar un teléfono te lo traerán en breve me gustaría que fueses a comprar algo de ropa para ti ahora que vivirás aquí—puedo ir a buscar mi ropa en casa de mis padres— habló interrumpiándomeIr a buscar ropa en casa de sus padres?!Quería que se olvidara completamente de esa gente tenía ganas de matarlos con mis manos pero había sido una buena decisión dejarle eso a los Montenegro,
No sé cuánto tiempo estuve en la recámara con Susana hablando de todo lo que había pasado anoche, la verdad es que el día de hoy no había pensado lo suficiente en mis padres quería dejarlos de lado al fin quería superarlos, ellos no merecían nada de mi.Después de tanto hablar al fin decidimos que era momento de salir Maximiliano había dejado para mí un teléfono de última generación al igual que una tarjeta de crédito al parecer era ilimitada Y me sorprendió al ver mi nombre en dicha tarjeta de crédito, creo que nunca había tenido una en mis manos. El chofer de Maximiliano se ofreció a llevarnos al centro comercial ambas aceptamos una vez que llegamos entramos a la primera tienda que vimos. No tenía mucha ropa solo lo que las chicas de servicio me habían dado esta mañana. — Qué te parece este?— Pregunto mi amiga mientras me mostraba un hermoso vestido. Siento que yo no era ese tipo de personas que solía usar vestido pero me encantaba usarlo eran muy cómodos. — podemos llevar dos
Apenas aquellas palabras salieron de mis labios, estos Se juntaron, a diferencia de aquella noche esta vez me besaba con pasión con furia sus manos se aferraron a mi cintura para luego bajar poco a poco hasta mis glúteos, no pude evitar gemir solo un poco cuando los apretó. Basta Lara!Esto no va a terminar bien, solo aléjate! Llevé mis manos a su cuello aferrándome a él, con mis dedos acaricia su nuca él me hizo dar un brinquito y enredar mis piernas en su cintura para luego seguir besándonos, puedes sentir cómo comenzaba a caminar escuché la puerta abrirse y luego cerrarse y luego reboté en un colchón. Cuando vi que estaba a punto de colocarse encima de mí me alejé sentándome en la cama colocando distancia entre nosotros. — no podemos hacer esto— Susurré— Por qué no? Está claro que me deseas, está muy claro que no deseamos — su voz sonaba llena de frustración no puedo evitar llevar mi mirada hasta su entrepierna Basta!!Cuando estaba a punto de hablar la puerta de mi habitació
Había pasado casi toda la tarde noche colocando el clóset a mi gusto, me sentía ansiosa por pensar cuando me tocara arreglar el cuarto de nuestro bebé, preguntaba si era niña o niño La puerta de mi recámara sonó esperaba escuchar a Mari preguntándome que si cenaría — puedo entrar?— preguntó Maximiliano — Si, claro ¿Sucede algo?La puerta se abrió y él entró pude ver cómo se acercaba poco a poco y se sentaba junto a mí en la cama — Ya te vas a dormir?— Pregunto negué con la cabeza — Quería pedirte que si podía cenar conmigo hoy— Juntos? Asentí sonriendo — te acuerdas que temprano te presenté a Santiago?— Asentí — el viene a cenar con su familia mañana no?— sus padres tienen un pequeño viaje el día de mañana y estarán ocupados todo el día así que cambiamos la cena para hoy si no te molesta— Oh así que era por eso era quería que cenará con él — no, para nada ¿Que debo colocarme?— Un vestido, cenaremos aquí Mary ya está preparando todo — Asentí de nuevo, vi cómo se levantó, sostuv