Riú siente que su mundo se derrumba y que el dolor en el alma es demasiado desgarrador para ser soportado.El pecho le sube y le baja con agitación y su humanidad va perdiendo el control de sí, por lo que es su lobo quien empieza a hablar en contra del consejo y a maldecirlos sin reparo.—Debes calmarte o vas a empeorar todo —le aconseja Arel cerca del oído.—¡Para ti es fácil decirlo porque tú vives tranquilo con tu mate y nadie va a arrebatártela! —Las lágrimas le mojan el rostro y, gracias a la presión que lo ahoga, él empieza a hiperventilar.—Alfa Riú, le ordenamos que se controle —lo increpa uno de los jefes del consejo—. Entendemos lo doloroso que es apartarse de su compañera, pero es un sacrificio que salvará a su gente. Todos los licántropos les estaremos sumamente agradecidos por su colaboración.La ira, que el argumento de aquel hombre le provoca a Riú, hace que la sangre se le caliente más de lo que ya está y que este empiece a golpear la mesa con tirria.—¡¿Mi colaboració
Sus cuerpos tiemblan debido al deseo que sienten el uno por el otro, al tiempo en que las ansias por unirse aumentan, a medida en que los besos se tornan más apasionados y demandantes.Alexa se le sube encima y lame la piel desnuda del mestizo, provocándole varios escalofríos.—Eres mío... —susurra ella mientras termina de desnudarlo—. Solo mío...Él le agarra parte del rostro con la mano derecha y la atrae hasta el suyo, luego une sus narices y cierra los ojos.—Siempre seré tuyo sin importar lo que suceda. —Riú la besa con hambre y se gira para quedar encima de ella.Su mano izquierda le apresa el brazo, mientras que la otra viaja con delicadeza por la piel del abdomen, subiendo el camisón en el acto hasta detenerse en los pechos que se encuentran sin sostén.Sus caricias la hacen gemir bajito, pero esos jadeos son apagados cuando su boca es invadida por la del mestizo, quien juguetea con su lengua en toda la cavidad bucal.La manera tan sensual de él besarla la excita de inmediato,
Alexa y Riú caminan en medio del bosque, con no más que una bolsa larga de tela, donde llevan algunas pertenencias útiles para que su escape pase desapercibido.Después de haber caminado por un largo rato, ellos se detienen en medio del bosque para descansar.—Iré a buscar leña antes de que caiga la noche —le informa el mestizo—. Cerca de aquí hay un río, puedes ir a refrescarte sin alejarte mucho. Por favor, si te sientes amenazada habla conmigo por medio del vínculo, ya que no estaré lejos.Alexa asiente con la cabeza y lo ve perderse entre los árboles, entonces ella agarra la bolsa que él coloca a su lado y la pone debajo de un árbol, luego camina en dirección al raudal.Después de desnudarse, ella nada en el agua con una sonrisa de satisfacción, puesto que siente que las corrientes del río la recargan. Es como si ella fuera una sola con este, como si cada uno se reconfortara con el contacto.Es una extraña sensación que nunca antes había tenido.—Qué rico baño... —balbucea fascina
El momento se torna desesperante para Vesti, quien empieza a sacudirse con todas sus fuerzas y, con un movimiento brusco y acompañado de un gruñido ronco, ella logra tumbar a Alexa, que todavía no tiene control de sus habilidades ni de cómo dominar el arte de la lucha.Sin embargo, la pelirroja no se rinde ni se deja intimidar, por el contrario, ella salta contra Vesti y la golpea con sus puños.Esos ataques son dolorosos en extremo y el malestar se queda impregnado en los músculos lobunos de forma insoportable.Aquellos puñetazos no son comunes y quizás sus efectos se deben a la energía con apariencia de agua que se encuentra alrededor de éstos.—¡Voy a acabar contigo! —grita Alexa eufórica—. Vas a pagar por todo el daño que has hecho.«¿Quién te crees que eres? No eres nadie, y la única que morirá hoy serás tú», le responde Vesti.Por su parte, Riú aprieta los puños y se pone alerta, en caso de que tenga que intervenir por su mate, aunque sospecha que no será necesario.Un aullido l
Al amanecer, Riú envía un mensaje a sus hombres acerca de dónde encontrar el cuerpo quemado de Vesti y las razones por la que ella fue ajusticiada.También miente diciendo que él y Alexa irán de viaje a un territorio privado para celebrar a solas su unión, ya que no tuvieron la oportunidad de hacerlo cuando él la marcó tiempo atrás.Después de enviar el mensaje con las instrucciones, Riú se convierte en lobo para avanzar con más rapidez, mientras que Alexa va encima de su lomo junto a la bolsa con sus pertenencias.Cuando ellos ya hubieron viajado por varios días, deciden instalarse en las afueras de una aldea. Con el dinero que Riú se llevó en la bolsa, son capaces de alquilar una casita de madera amueblada y de comprar provisiones.La idea es quedarse unos días allí, hasta que él encuentre un territorio virgen donde ellos puedan vivir sin temor a ser encontrados.Ya ellos tienen toda una semana viviendo en la casita cuando él le da la noticia de que encontró un territorio muy lejano
La sorpresa en el mestizo se muestra en todas sus facciones. Su cuerpo se encuentra paralizado y el corazón le empieza a latir muy rápido.Está perdido.«Lo peor de todo es que no podré proteger a mi mate», piensa aterrado."Déjame salir", exige su lobo, mas él no se lo permite, ya que eso empeoraría la situación.—Yo no me quiero ir al continente de los humanos; no pertenezco allí. —La voz desafiante de Alexa trae a Riú de vuelta a la realidad, quien se relame los labios y mira a los jefes con firmeza.—Yo la marqué, así que no queda humanidad completa en ella. Mi pareja es una más de nosotros.La carcajada de uno de los jefes resuena en el lugar, quien sonríe con sorna y mira al mestizo con ironía.—Nada que el acónito no pueda solucionar. Debemos devolver a la humana, aunque le reprimamos tu veneno —sentencia.—Eso es absurdo. ¿Para qué entregarla a un lugar a donde ella no pertenece? ¿Creen que haciendo eso van a calmar la ambición de las personas detrás de todo este conflicto? El
En el salón se forma una acalorada discusión acerca de si deberían exiliar a Alexa o no, mas no logran ponerse de acuerdo.Hastiado, Liah decide romper el silencio, puesto que él solo se ha limitado a escuchar el argumento de Riú, de Tron y de los jefes del consejo que allí se encuentran.—¡Ya basta! —profiere con autoridad—. Analicemos este asunto con más profundidad, por favor —suspira abrumado—. En primer lugar, dejen de llamarle humana porque no creo que ya lo sea. Ven aquí, chiquilla. —Extiende su mano en dirección a Alexa, quien se ha mantenido en silencio y aferrada al brazo de Riú en todo ese tiempo.El mestizo mira a Liah amenazante y luego a su mate, quien está esperando su aprobación para sentirse segura de ir junto al extraño.Con duda e incomodidad en el semblante, él asiente con movimientos lentos y le libera la mano, entonces Alexa se dirige hacia Liah con gran nerviosismo.Ese hombre la intimida demasiado y le provoca un sentimiento extraño en el pecho, que no logra de
Un silencio incómodo se instala en el lugar, donde el aire se ha tornado pesado, debido a los sentimientos encontrados que hay en cada uno de ellos.Parte del consejo está en desacuerdo con la decisión de Liah, mientras que Tron y Riú sienten alivio ante el veredicto del líder del territorio de los zollebs, quien además tiene la autoridad concedida por la naturaleza para imponer sus decisiones sobre los conflictos entre otros continentes.Los zollebs son los encargados de mantener el equilibrio en el mundo, asimismo, de darle vida al ecosistema y preservarlo sano y fértil.Ellos son los creadores de las semillas sagradas, las cuales esparcen cada cierto tiempo en lugares específicos y solo los alfas más habilidosos logran encontrarlas y usarlas, para beneficiar a los cultivos de sus manadas.Riú se acerca a Alexa y frota su cara de lobo contra la de ella, quien se siente reconfortada con su muestra de afecto y le corresponde al instante."¿Escuchaste, mi Amoyeca? Nadie nos va a separa