Capítulo 51

Marco Marone.

Al cabo de un rato abajo, los rumores ya se habían extendido por la mansión, no rumores, sino la noticia y Leya estaba flipando al fondo del jardín, al igual que Iolanda atónita por el descubrimiento, pero... sinceramente no voy a pensar en ello ahora, al fin y al cabo tengo un heredero en camino.

Todavía tenía que ir a la habitación de mi hermano, así que mientras tuviera esta sábana, podría esconderme de esa asquerosa mujer.

En cuanto llego frente a la puerta de mi hermano... presiento que se avecina algo malo, llamo a la puerta esperando a que me haga una señal para entrar, pero no oigo nada, así que llamo una vez más.

- ¿Por qué tan formal? ¿Tienes miedo de algo? Ahora estamos en problemas -escucho su voz gruesa y reconozco de inmediato que está en su forma espectral, entro y me encuentro con unos grandes ojos rojos que me miran fijamente, nuestro tamaño como lobos es aún mayor que el de un humano normal, mi hermano puede mirarme fijamente a la cara s