La cena exclusiva era en unas horas, debía terminar mi jornada laboral a las cinco de la tarde, lo cual era casi imposible, regresar a casa y buscar un vestido, peinarme y maquillarme para asistir lo mejor posible a ese evento. Justo cuando salí de la oficina todos me vieron extraño hasta que Sam llegó con una fila de carpetas en sus manos. –Señorita Lowe, que bueno verla –comentó como si no nos hubiéramos encontramos antes –. Necesito que verifique estos documentos y las ubicaciones que hay para su proyecto. Me extendió las carpetas y como un reflejo las tomé, él se dio la vuelta y se fue, todos continuaron su trabajo como si yo nunca hubiera estado ahí. Fui a mi escritorio y Hunter llegó con Sally, yo ya me había mareado de ver tantos números y letras la ver la primera carpeta. –¿Qué te dijo? –murmuró Hunter. –Si, dinos ¿para qué te llamó? –siguió Sally. –Ah, quería darme ánimos. – Ay no, eso se escuchó espantoso. –Quiero decir, hablarme para que no tenga miedo al hablar fren
Hablamos con varias personas, aparte de los candidatos, también se encontraban personas adineradas que apoyaban al partido político, Jacob me pidió acompañarlo en todo momento, ambos hablamos y me presentó como Rebecca Lowe, no era su acompañante o pareja, solo era una mujer que también había llegado a la cena para conversar sobre los temas políticos. –No me vas a presentar a está hermosa señorita. Reconocí esa melena rubia de Benjamín Baker, sentí algo de angustia, pero él no me reconoció en ningún momento, además, sentí el brazo de Jacob sujetando el mío con más firmeza y eso hizo que me tuviera que acercar más a él. –Rebecca Lowe, él es Benjamín Baker –lo presentó. –Es un gusto bella dama –intentó tomar mi mano, pero Jacob lo detuvo.–No tienes que hacer eso con ella –comentó –. Trabaja para nosotros en la campaña, tiene ideas bastante buenas y pensé que sería bueno involucrarla en el partido. –Entiendo –me sonrió Benjamín –. Me disculpó por no haberla notado antes en el traba
–Oye, Rebecca… –¿Y ahora qué quieres, Hunter? –Nada… –tartamudeo –. Te iba a pedir revisar el programa de la conferencia de mañana, pero yo lo haré, tú estás ocupada, eres una mujer ocupada, yo lo haré. Se dio la vuelta huyendo de mí, no lo culpo le dí la mirada que le hago a Alice y Angelo cuando están en problemas y es que había estado de mal humor toda la mal.dita semana por culpa de ese imbécil que ahora me ignora. Sí hablo de Jacob Hoffman, el muy cretino me ha ignorado desde la cena a la qué él mismo me llevó, no me mira y cuando se da cuenta que estamos en el mismo lugar se larga como si yo tuviera algún tipo de enfermedad incurable. Lo detesto. Bueno, no lo detesto, pero su actitud sí la detesto, mañana iremos al instituto de los chicos, la directora junto con Regina se encargaron de organizar una reunión de padres de familia y sus hijos donde Jacob llegará a dejar un corto y conciso discurso para los chicos y su familia, también tenemos que visitar otros lugares y realiz
Esa noche pude dormir tranquila, desahogarme había sido lo mejor, a pesar de que había una alta posibilidad de quedarme sin empleo, decirle todo eso a Jacob me había hecho sentir bien desde lo de Brendan había tomado la decisión de que no volvería a dejar que ningún hombre me tratará mal; ya vería la forma de salir adelante con mi madre recuperada y los niños ya grandes podría buscar algo más simple, esperaba que ellos pudieran comprender la situación. Cuando llegué al edificio Sally me dijo que Sam me estaba esperando en su oficina, no perdí más tiempo y entré para recibir la noticia que me tenía. –Buenos días Sam. –Hola Rebecca, quiero felicitarte por la actividad de ayer –sonrió –. Todo salió fantástico, espero que podamos seguir así con las demás conferencias. –Por supuesto, le daré el tiempo que necesite. –Me parece perfecto –Lo vi tomar una serie de carpetas –. Porque ahora necesito que tomes esto y comiences a trabajar. –¿Qué es esto? –le pregunté. –Jacob quiere que co
Te veo en la oficina, significaba eso. Jacob y yo nos veíamos en la oficina, yo recordaba su apasionado beso afuera de mi casa y él apenas si me prestaba atención, para mi suerte el trabajo se puso peor cada vez, sí digo para mi suerte porque eso hacía que estuviera ocupada la mayor parte del tiempo y no pensará en Jacob. Entre tantos eventos y actividades que organizar, Hunter estaba tan ocupado que no sabía ni donde se encontraba parado la mayor parte del tiempo, creo que Sam comenzaba a perder la cabeza, especialmente cuando Jacob tenía su actitud tranquila de todo va a salir bien cuando ni siquiera sabía el nombre de los alcaldes que iban de parte de su partido político. Continuamos con las pláticas en los diferentes establecimientos y nos fue de maravilla, especialmente con las chicas jóvenes, se veía la foto de Jacob circular diciendo que querían a Jacob, incluyendo bromas como “Mentiroso, pero guapo” "Si está así de bueno, que me mienta lo que quiera"Obviamente a Jacob no l
Me coloqué el vestido, traía maquillaje en mi bolsa aunque no el que necesitaba, pero me las arregle muy bien para combinar perfectamente mi maquillaje, peinado y mi vestido, al terminar bajé al salón, todo estaba preparado para comenzar, los chicos se quedaron con la boca abierta al verme entrar, esperaba que fuera una expresión positiva, por raro que parezca sentía que el vestido era demasiado escotado y que no me había maquillado bien. –¿De dónde sacaste ese vestido? –preguntó Sally al verme. –¿Es mucho? –dude –. Traigo otro y puedo cambiarme. –No –respondió Hunter –. Se te ve perfecto –miró a Sally y continúo –, recuerda que se hará una mención a los organizadores del evento. –¿En serio? –Sí, será casi al final, el presentador nombrará a todos, así que te necesitamos espectacular –mencionó Sally. El evento comenzó, miré a Jacob desde la entrada con un traje gris que le quedaba magnífico, iba acompañado de Sam y Ben, al parecer Ben debía estar siempre cerca para cualquier as
La limusina de Jacob me dejó frente a la casa, al entrar mamá y Alice estaban en la sala, ví la hora en mi teléfono y pasaba treinta minutos la medianoche. –¿Qué haces despierta, jovencita? –pregunté a Alice –. Tienes clases mañana. –Te estábamos esperando –respondió mamá en su defensa. –Solo quería saber que llegarías bien –mencionó Alice. –Ya estoy en casa, ahora ve a dormir y sin el teléfono sobre la cama –le advertí cuando iba subiendo las escaleras. Tenía la mala costumbre de vagar por internet antes de dormir y luego se quedaba con el teléfono en la mano.Cuando desapareció por las escaleras, tomé lugar al lado de mi madre, estaba cansada por tanto trabajo y los pies me dolían. –¿Y ese vestido? Fue ahí cuando me percaté que no me había cambiado y aún sentía los labios hormigueando por los besos de Jacob, intenté ignorar las sensaciones en mi cuerpo. –Ah, no es nada –comenté –. Nos dieron vestimenta a todos para el evento. –Vestimenta para el evento sería como un uniforme
Terminé en un edificio color turquesa con ventanas color mostaza, pensé que me llevarían a la casa de Jacob o a un lugar más elegante, una zona privada, un lugar lujoso tal vez, bajé del auto y el chófer me indicó marcar el quinto piso, al llegar a la entrada eso hice, poco después de que la puerta se abrió y subí por el ascensor, volví a marcar el número cinco, al subir y abrirse las puertas me llevó a un pequeño pasillo con una única puerta blanca al frente, el piso era de madera, así que me quite los zapatos y toqué la puerta, fue abierta por Sam que solo me hizo una seña para que entrará por el angosto pasillo. Sin embargo, solo era una apariencia porque al terminar el pasillo había un enorme apartamento, una sala y comedor al menos para ocho personas, un televisor gigante, muebles de madera color café y blanco, otra pequeña sala al fondo con salida a un balcón y unas escaleras que van hacía arriba que supongo son los dormitorios, había dos puertas que no deduje que había detrás,