Desconocido

“¿Ya terminaste? Porque ahora estás actuando como un niño, no como el hombre que conocí. ¿Qué importa que te hayan visto?”. Me sirvo otra copa de vino mientras veo al inquieto Jenson. Si iba a ser siempre así, podía ver por qué su hermano se había cansado de él.

Podría soportarlo por lo bueno que es en la cama. Sin duda sabe cómo satisfacer mis necesidades, a diferencia de tantos otros hombres.

Se acerca al balcón y se asoma entre las cortinas.

“Créeme, lo sabría si alguien nos estuviera siguiendo. Pienso que es más probable que haya corrido de regreso a la manada para contarle a tu hermano mayor que te vio”.

“¿Y si te vio? ¿No te molesta?”.

“Oh, sí lo hizo”. Me encojo de hombros sin inmutarme. Él en serio estaba haciendo una tormenta en un vaso de agua por esto.

Él gira la cabeza para ver hacia atrás de nuevo, con esos ojos oscuros bien abiertos en mi dirección. “¿De qué estás hablando?”.

“Él te estaba viendo decirme que te habían visto. Momentos antes de que te