196

—¿Qué? Se me dan bien los bolos—. Me encogí de hombros. Mi sonrisa se hizo más profunda al pasar junto a Noah.

—Nunca has dicho que se te dieran bien los bolos—. dijo Alex, llegando a mi lado.

—Todavía hay muchas cosas que no sabes de mí—. Me encontré guiñándole un ojo.

—Eso parece—. Habló tan bajo que casi no le oí por encima de la música. Sus ojos estaban pegados a mi cara con una expresión que no podía leer. Mi atención se desvió de Alex hacia Noah, que se estaba preparando para jugar a los bolos.

Observé en silencio cómo Noah lanzaba la bola por la pista y golpeaba los bolos con un chasquido. Apreté la mandíbula ante el golpe. Cuando se dio la vuelta, sus ojos se encontraron con los míos con una mirada de

Sigue leyendo en Buenovela
Escanea el código para descargar la APP

Capítulos relacionados

Último capítulo

Escanea el código para leer en la APP