La mujer de camiseta celeste muy clara, tipo el caso estirando al gris, rebuscó en la bolsa mediana que llevaba colgada de la cadera y sacó un pequeño trozo de piedra de arcoíris.. Parecía más pequeña y de forma más irregular que las piedras de arcoíris utilizadas para todas las cosas en Urbn, también sacó un lanzador: una versión más pequeña y elegante de un cascanueces del tamaño de unas pincitas. Kary lo único que podía hacer era pensar ¿Para qué usarían esos recursos? Y pensando y pensando llegó a la teoría de que podrían romper una piedra de arcoíris tenebrosa para abrir un portal al destino inscrito en la piedra.Los dos machos -uno con ropa verde pálido y otro azul- se alejaron ligeramente de ella y adoptaron una postura bien preparada. Mientras tanto, la hembra colocó la extraña piedra en el lanzador y la rompió. El familiar sonido del trueno resonó, aunque amortiguado por la corta distancia entre la tríada y ellos. El sonido no se transmitía en dentro de las grietas, sean est
Otras de esas bestias salvajes acabaron con enormes heridas abiertas o miembros amputados como si no fueran más que mantequilla contra un filoso cuchillo del desayuno. Pero a medida que más de ellos se apretujaban en el pequeño espacio, Shys los agarraba a ellos y a los heridos con sus extremidades, partiéndolos por la mitad sin esfuerzo como se haría con un trozo de papel o con un pedazo de madera que se puso en agua demasiado tiempo y la madera hubiese absorbido todo el agua, haciéndolo inútil a la resistencia para que no se rompa. Se deshizo de esos bells como si fueran basura y le arrancó la cabeza a otro de un mordisco con su enorme boca llena de dientes como navajas.Apenas habían transcurrido treinta segundos y ya se acumulaban los cadáveres a un lado de la escena. Todo iba tan deprisa que a Kary le parecía estar moviéndose a cámara lenta mientras disparaba a las criaturas.Estaba dirigiendo su pistola eléctrica hacia un puñado de Bells que se precipitaban hacia un sendero cerc
La piel algo así como el color cobre del director adquirieron un tono más apagado mientras palidecía al escuchar relatar a Kary el incidente del que había sido testigo. Aunque cabizbajo, la ausencia de conmoción genuina y la preocupación en su rostro confirmaban que no era ninguna novedad para él.—Usted sabía lo que hacían sus alumnos—la veterinaria acusó, sin agresividad en la voz. Solo como exponiendo un hecho verídico.El director se levantó del taburete, rodeó su mesa y se colocó junto a la puerta de la terraza de su despacho, mirando a los aprendices que estaban entrenando. Nadie lo presionó para que contestara, sabiendo que lo haría en su momento y sería más efectivo para que cuente todo lo que podría contar de una sola vez.—La pobreza es algo difícil, señorita Kary—anunció por fin en tono de conversación, dándoles la espalda mientras seguía mirando al exterior—. Usted es bastante nueva aún en nuestro mundo. Aunque mi pueblo le parezca feliz y bien adaptado, tenemos nuestros r
En el mes que siguió a ese descubrimiento trascendental, los informes colectivos del Consejo crearon un gran revuelo, agravado por el descontento de la realeza. Resultó que un número mucho mayor de aprendices -y de maestros notarios- habían estado utilizando piedras defectuosas para invocar portales desde hace más tiempo de lo pensado. Los primeros lo habían hecho para acelerar su formación a un coste más asequible, y los segundos para ahorrarse el consumo de piedra para sus necesidades personales.Aunque Kary -con la confirmación de Shys- había identificado a los tres aprendices que había encontrado en el pasillo junto a la pseudo puerta invocada, no se presentaron cargos criminales contra ellos. ¿La razón principal? Demasiadas otras personas habían sido identificadas también o habían confesado que también lo hacían de forma habitual. La mitad de la cohorte actual de aprendices y maestros notarios habría sido encarcelada o expulsada de la profesión. El hecho de que varios de ellos f
Kary le contó absolutamente todo a Mar quien en un principio se desmayó al ver a su novio en forma de lobo para luego despertar y gritar a los cuatro vientos que ella también quería un tatuaje tan chulo como el de su jefa.También les contó todo lo que vio y supo de la corona real y todos los problemas que había tenido que pasar en poco tiempo junto a ellos y junto a ese idiota príncipe.Lo que a Emerson lo divertía hasta la médula es que Jareik desde el primer momento en que vio a Mar, su rostro se descompuso, se tapó la nariz y en ese mismo instante tomó su forma de batalla para ir a correr al bosque.¡Parecía que al fin ese beta narcisista e idiota había encontrado a su mate! Mar estaba encantadísima con tener a tal espécimen como pareja y poder probar un poco de la pasión de un hombre lobo, el problema era el mismo hombre lobo.Jareik por más sorprendente que parezca ha estado corriendo y huyendo de una humana que no mide más de metro con setenta centímetros y eso que él era tan
—Ajá, claro. Tiene más valor lo que dices sobre los lycans, tú. Un lycan—replicó Kary burlonamente, antes de besarle los labios—. Ya veo por qué tu gente viene aquí a intercambiar sus votos matrimoniales—continuó con nostalgia, mirando alrededor—. Es impresionante.El hombre lobo tragó saliva con dificultad, con la tensión y la rigidez creciendo en su espalda por el hecho de que ella conociera el propósito principal de ese lugar. Claro que las parejas solían ir allí simplemente por la experiencia mágica de pasar tiempo juntos y de manera romántica. Pero la mayoría venían para sellar su compromiso o intercambiar formalmente sus votos. Él tenía la intención de deslizarlo durante la velada para ver cómo respondía ella a esa posibilidad. Después de todo, hacía meses que no hablaban de nuevo de la posibilidad de convertirse ambos en una familia hecha y derecha. Para su alivio, Kary no parecía disgustada por haberla traído hasta esa cueva, sino más bien ansiosa por saber qué había planead
—Estoy deseando ver qué te parece—contestó a su creciente curiosidad y bajaron la escalera.La pared frente al rellano lo obligó a girar a la derecha, revelando una gran sala natural bajo la zona en la que acababan de estar sentados.—¿Qué chingados es esto?—Kary exclamó más que preguntó en un susurro asombrado.—La estancia de los lamentos y los suspiros—respondió el alfa con orgullo mientras contemplaba la sala—. El suelo es en realidad una membrana orgánica que crece de forma natural en este entorno. Requiere unas condiciones muy específicas para prosperar. Bajo ella hay rocas especiales, una especie de mezcla híbrida de rocas volcánicas y piedra energética de arcoíris. El calor de las rocas ilumina la membrana y el vapor atrapado bajo ella la hace ondular de esa forma. Y este suave silbido que oyes son los famosos lamentos y suspiros de parte del vapor que escapa por los bordes.—¡Vale, esto es demasiado increíble! No se mencionaba en las cosas que leí sobre la cueva de las energí
—¿Para esto es que me has traído aquí? ¿Para que nos unamos como un matrimonio bendecido por la energía natural?—preguntó Kary con la voz colgando de un hilo.Su espalda automáticamente se estiró y los músculos se le volvieron rígidos, con la mente en blanco y la lengua de piedra. Por primera vez, casi deseó que su luna no se hubiera sentido tan cómoda haciéndole cualquier pregunta que se le pasara por la cabeza, como él mismo la había estado animando a hacer. Había estado dando oraciones para tener exactamente ese tipo de apertura, y ahora que la Diosa luna se lo había dado, él estaba entrando en modo pánico poco a poco. O más rápido que lento.Emerson tragó saliva y negó con la cabeza.—Te he traído aquí para que conozcas el lugar más romántico y sagrado para los amantes lycans que existe en Urbn. ¿Deseo que esta noche sea nuestra noche de unión ante la Diosa luna incluída con su bendición? Sí, desde luego, es lo que más quería desde el momento en que me di cuenta de que estaba per