Leslie sonríe ampliamente hacia otra mujer rubia que la evalúa de pies a cabeza.—¿Puedes comenzar mañana? —pregunta la mujer.—¡Sí!Leslie asiente llena de felicidad. ¡Por fin! Esta mañana al despertar recibió una llamada para una entrevista de trabajo. Ella solo tiene experiencia con atención al cliente, pero está dispuesta a hacer lo que sea; así que cuando la mujer le dijo que necesitaba personal para el área de limpieza, ella simplemente aceptó.—De acuerdo. Ven mañana a primera hora. Cabello recogido. Sin maquillaje. Ropa cubierta. Te daremos tu uniforme pronto.La rubia sale del Spa, sonriendo. Feliz de que se le haya dado una oportunidad laboral. No puede esperar para decirle a Lila la buena noticia, sabe que esto le calmara un poco.Se encamina de regreso, con su mente vagando ante diferentes pensamientos, pero la imagen del rostro seductor de Dorian aparece, haciéndola sacudir la cabeza.Debe alejarse de él en todos los aspectos. Es su obligación...Unos minutos después está
"Necesitaba hacerle saber que si vuelve a acercarse, voy a demandarlo por acoso."Leslie aún no cree en las palabras que le dijo su amiga hace cuatro días. Sobretodo, porque conoce a la morena como si fuera su propia madre, y la forma en que no pudo verla a los ojos mientras hablaba, dejó mucho que decir.Sin embargo, la creencia de que Lila mintió porque tuvo otro encuentro sexual con Dorian, han mantenido a Leslie alejada de sus pensamientos acerca de la atracción por el hombre.Además, solo lleva tres día trabajando, pero esto demanda tanto tiempo y cansancio, que solo llega a casa, comparte con Lila y descansa hasta el día siguiente.Su tarea es mantener limpia la planta baja del Spa, donde se encuentra la recepción, y además, hay espacios para manicure, pedicure y limpieza de cutis; mientras que arriba en el área de masajes, se encarga una mujer mayor.Leslie se desplaza rápidamente a uno de los espacios cuando una pintura cae al suelo, derramándose.—¡Ups! —exclama Thina, la man
La rubia se aferra a la cintura del hombre grande incluso cuando este estaciona la motocicleta frente a su apartamento. —Ya me puedes soltar. Llegamos —avisa, mirando sus manos aferradas a él, sintiendo cómo el calor se hace insoportable. Tiene manos tan finas y pequeñas. Podría arroparlas con una sola mano suya. —Q-Quiero a ir a mi ca-sa —tartamudea ella, sin moverse. Dorian gira la cabeza para verla y niega lentamente. —No. —P-Pero, Dorian... El pelinegro coloca sus manos en los puños de la moto, apretándolas, intentando controlar el escalofrío que le ha recorrido al escuchar su nombre en esos labios temblorosos. —No voy a hacer nada que no quieras, Leslie —le promete. Pero eso no la hace sentir bien. Ella podría gritarle, bajarse de esa moto y correr a la estación de tren que tiene al frente para huir. Pero no puede. Todos sus pensamientos le gritan que debe huir, pero cuando se da cuenta, Dorian ha tomado su mano y la ha llevado como una niña hasta el ascensor. Ninguno
Los pasos lentos pero pesados de Dorian resuenan en el ambiente. Con la mirada fija en la mujer que no se ha movido de dónde está, confundida por lo que quiere o debería de hacer.El pelinegro ladea un poco la cabeza, estirando la mano para rozar su mejilla, y luego, rompe la distancia y roza sus narices.Ver y sentir que Leslie se estremece por él. Saber que seguramente su coño virgen palpita por él, lo excita de una manera arrolladora.—¿Por qué no lo admites...? —murmura, mirando su rostro enrojecido—. ¿Por qué te rehúsas a estar conmigo, pequeña? Sus ojos bajan a su boca, relamiéndose al desearla como hace días. —T-Tú... —Ella lo mira, mareada por el deseo y nerviosa—. S-Solo quieres... que sea... una más...La confesión choca en el pecho de Dorian, haciéndolo sentir cruel, malvado. Pero al mismo tiempo, su deseo por ella le nubla la mente, alejando la verdadera razón del por qué todo esto empezó.—¿Quién te dijo eso, Leslie? —Coloca las manos en su cintura, pegándola a él, cho
Leslie abre la puerta de su hogar, aún con la respiración agitada. Se da cuenta que Lila está dormida porque ve la luz apagada debajo de la puerta de su habitación, así que toma una toalla y va al baño.Necesita refrescar su cuerpo y entender qué fue lo que pasó hace unos minutos.¿Acaba de perder su virginidad?Ella no lo sabe. Nunca recibió clases de educación sexual en el orfanato. Y lo único que Lila le explicó sobre perder la virginidad era que, se sentía cómo una explosión caliente que te deja temblando, exhausta o llena de más adrenalina.Y eso fue lo que ella sintió gracias a Dorian.Deja que el agua caiga sobre ella, y cada gota la eriza al recordar las manos grandes del pelinegro sobre ella, haciéndola sentir tan... caliente.Recuerda haber sentido su pene duro detrás de ella, y cuando cierra los ojos, recuerda haberlo visto el día en que él grababa con Lila. Y recuerda cómo él habló sobre introducirlo en ella.¿Qué se sentirá?, ¿le causará la misma explosión que sus dedos?
Dorian estaciona la motocicleta frente a Midnight Rider con una extraña sensación en el pecho. Anoche no pudo dormir nada de nuevo. Su cuerpo le jugó mal, recordando la sensación de la rubia moviéndose sobre él, sus gemidos, su mirada encendida y el ambiente pesado entre los dos. Cuando folla para los videos porno, él no necesita jugar. No necesita calentar a una mujer antes. Todas siempre están listas para él. Pero esto de haber sido tan paciente con Leslie, cuidando que ella estuviera bien y sintiera cada toque, calentándola tanto, es algo nuevo para él. ¿Se supone que solo lo hizo para que sea más fácil follarsela, verdad? Él no sabe la respuesta, tampoco quiere pensarla. —¡Uuuy! ¿Y esta bestia? —Kris baja de su auto, viendo la moto—. ¿Cuándo la compraste? —Ayer —responde, dándose cuenta que la nariz de su amigo ha sanado. —¿Y por qué la compraste? —pregunta el castaño mientras caminan juntos hasta entrar a la empresa. —¿Tengo que responder? —dice un poco frío—. ¿No es lógic
Leslie se queda helada por la pregunta de la manicurista. —¿P-Perdón...? —tartamudea, nerviosa, aterrada de sentirse expuesta. Se siente así porque, aunque no tiene una relación con Dorian, sabe que si lo relacionan con él sabiendo quién es, la hace ver muy mal. —Eres una zorra —murmura otra manicurista. —¿Te has hecho pruebas de transmisión sexual? La rubia ve a todos lados, recibiendo miradas llenas de asco y desaprobación mientras su cuerpo entra en pánico. —Qué asco, cariño. Por favor mantente alejada de nosotras. Podrías contagiarnos de alguna enfermedad venérea. —Qué desdichada... —Risas—. Tener que conformarse con un hombre que se folla a cientos de mujeres mientras le promete amor solo a ella... —Ilusa. —Sabía que algo andaba mal en ella... Todos los comentarios le caen encima, abatiéndola, haciéndola arder de vergüenza. Se siente humillada, y en el fondo, se disgusta con Dorian por entrar a su vida siendo quién es. ¡Ella no es una zorra! Sus lágrimas salen sin para
Leslie es arrastrada por el cabello por la esposa del moreno. Y por más que quiere luchar y defenderse, el shock reciente más el dolor de sus costillas la debilita.Cuando reacciona, está sentada frente a Bibian, la cual empieza a gritarle.—¡Sabía que esto pasaría! ¿Qué se puede esperar de una mujer como tú? ¡La novia de un actor porno! ¡Tan descarada como él! ¡Una zorra vil!La rubia alza la vista con lágrimas pesadas cayendo por sus mejillas, con el dolor físico y emocional afectándola hasta pensar que quiere desaparecer.—S-Señorita... —balbucea hipeando—. ¡Le juro que ese hombre quiso violarme!—¡Cállate zorra! —Bibian grita en su cara, enardecida—. ¿Quién te crees que eres para hacer una acusación como esa? ¡No eres nada más que una zorra! ¡Estás despida! ¡Largo de aquí buena para nada! ¡Largo!En crisis porque no le creen, y por saber que se ha quedado sin el empleo que tanto necesita, intenta levantarse para rogarle a Bibian que le dé una oportunidad, pero la mujer la toma del