Capítulo 73 – si algo te pasara moriríaNarrador:Brenda e Izan continuaban recostados y abrazados en una de las reposeras que había en la piscina, de pronto Alicia llegó corriendo a interrumpirlos– ¡Izan debes esconderte!– Alicia, ¿qué sucede, esconderme por qué?– Ha llegado Mateo a buscar a Brenda – ambos saltaron de la reposera – Luka lo está entreteniendo en la recepción, pero debes darte prisa y desaparecer antes de que te vea– ¡Oh, por Dios! – exclamó Brenda, quien quedó blanca como un papel y comenzó a respirar con dificultad, síntomas inequívocos de una ataque de ansiedad– Brenda – le dijo Izan, tomándola de los hombros – Brenda – repitió – mi amor, trata de calmarte y respirar lentamenteSin embargo Brenda no dejaba de temblar y no reaccionaba. Entonces Alicia le propinó una bofetada, lo que sí logro traerla de vuelta– Perdona, pero no reaccionabas – se disculpó mientras Brenda se frotaba la mejilla abofeteada– Brenda – volvió a decirle Izan – necesito que reacciones–
Capítulo 74 – Muy IzanNarrador:Brenda volvió con Mateo a la mansión al día siguiente.– No me has dirigido la palabra desde anoche – le reclamó Mateo – creí que querías que nos conociéramos mejor– ¿Y besándome a la fuerza es una buena manera de conocernos mejor?– Yo no te besé a la fuerza, bueno – sonrió – tal vez un poco sí– ¿Entonces…?– Entonces, nada, pues tú no te resististe mucho– ¿A caso me diste alguna otra opción?– No, no te la di – y se acercó a Brenda, quien dio un par de pasos hacia atrás– Si quieres que confíe en ti y quiera conocerte, deja de comportarte como un cretino– O sea que deje de comportarme como Izan, ¿querrás decir?– Exacto – respondió con altanería – reniegas de él y hasta lo insultas, pero a la primera oportunidad te comportas como él– Yo no soy Izan– Pero te pareces más de lo que yo quisiera, tanto en la forma física, como en la de comportarte– Bien, tienes razón – sonrió – lo que sucede es que tiene muy buen gusto para las mujeres– ¿Y eso? –
Capítulo 75 – tu esclavaNarrador:– ¿Qué es eso tan urgente que no puede esperar hasta mañana Mateo? – le inquirió Yuli al abrirle la puerta de su apartamento– Izan – respondió Mateo al entrar– ¡Izan, Izan, Izan!, ¡siempre es Izan! – rezongó la mujer un poco enfadada– Es que no deja de generarme fuertes jaquecas– ¿Y se puede saber qué demonios es lo que ha hecho esta vez?– No lo sé– ¿No lo sabes?– No, no lo sé– ¿Te volviste loco Mateo?, creo que te has obsesionado demasiado con tu hermano – dijo redondeando los ojos– Estoy seguro que algo trama y creo que Brenda está involucrada– ¿Por qué no le preguntas a esa delgaducha que se traen?– ¿Tú eres estúpida o te haces Yuli? ¿acaso crees, remotamente, que si le pregunto me lo diría?– Supongo que no Mateo, es que a ti nadie te dice nada– ¿Qué mier*da se supone que significa eso? – la tomó de un brazo y la trajo hacia sí– ¡Suéltame, me lastimas!– Creí que te gustaba jugar rudo en el se*xo– Bueno, un poco sí – respondió de fo
Capítulo 76 – Las paredes oyenNarrador:Mateo y Yuli se encontraban aún en la cama– ¿Qué es lo que quieres que haga exactamente para ayudarte a separar a esos dos?– En la noche quiero que lleves a cenar a Izan a restaurante italiano que siempre vamos– ¿Y si no quiere ir?– Vamos Yuli, ingéniatelas. Seguro se te ocurre algo, además se supone que te propuso matrimonio, así que debe dejarse ver contigo– Sí, pero ya sabes que a veces es difícil lograr que Izan haga algo que no quiera– Seguro tu puedes hacerlo – le dijo poniendo su mano en la pelvis de la joven– Bien lo haré – le respondió en un jadeo– Genial – y quitó la mano– ¿Y que se supone que suceda?– Yo llevaré a Brenda y haré que los vea juntos, con eso empezaré a sembrar la semilla de la duda en ella, comenzará a pensar que Izan le miente y que siempre le ha mentido – dicho eso Mateo se puso de pie y comenzó a vestirse– ¿Ya te vas?– ¿Acaso quieres más?– La verdad es que sí, me ha gustado– Pues entonces prepárate para
Capítulo 77 – ve por élNarrador:– ¡Por fin te encuentro! – Brenda quedó paralizada al escuchar semejante exclamación saliendo de la boca de Mateo – hace rato que te estoy buscando. Al final tuve que valerme del GPS de tu móvil para poder hallarte – Brenda y Ema se miraron, pues confirmaban lo que estaban hablando hace solo unos instantes, Mateo rastreaba la ubicación de Brenda mediante el GPS de su teléfono móvil– ¿Podrías haberme llamado?– No creas que no lo hice, me aburrí, tu línea siempre me daba ocupada – eso causó un escalofrío en la joven – por cierto, ¿se puede saber con quién tenías una conversación tan larga?– No estaba hablando con nadie– Me daba ocupado– No tengo idea de porque lo haría, yo estoy aquí hace rato– Sí, sí, señor Amery, hace rato estamos aquí– Bueno, eso ya no importa, será alguna interferencia o algo– Sí debe ser eso, ¿para qué me buscabas Mateo?– Hoy vamos a ir a cenar fuera, me he encontrado con un amigo de la universidad y nos ha invitado a cena
Capítulo 78 – NoviosNarrador:Cuando Brenda llegó al edificio de apartamentos, que le había indicado Izan en la ubicación que le había enviado al móvil de Ema, se acercó a la botonera del portero y tímidamente timbró. Esperaba que Izan le respondiera del otro lado del intercomunicador, pero para su sorpresa no fue así, la puerta solo se abrió, por lo que ella ingresó para luego coger el ascensor y dirigirse al apartamento indicado. Al llegar a la puerta, ésta se abrió sin necesidad de tocarla. Y allí estaba él, Izan, quien la esperaba esbozando una enorme sonrisa. El corazón de Brenda se agitó de una manera descontrolada, era la primera vez que se encontrarían de mutuo acuerdo luego de haberse confesado estar enamorados el uno del otro– Izan… – murmuró Brenda– Brenda… – hizo lo suyo Izan, pero acotó – mi amorLa joven no se movía, había quedado paralizada parada en la puerta. Él se acercó lentamente hasta que la abrazó. Fue un abrazo dulce, cálido, sin ninguna connotación se*xual y
Capítulo 79 – Marfil, su preferidoIzan:Volver a tener a Brenda en mis brazos y de esa manera, había colmado todas mis expectativas, era maravilloso, había oído hablar mucho del amor a lo largo de mi vida, pero creía que eran solo escusas de las personas para atarse unas a otras, jamás lo había experimentado y no creí poder hacerlo, hasta que ella irrumpió en mi vida como un torbellino y puso mi mundo de cabeza. La amaba realmente y con todo mi ser, nunca creí ser capaz de eso, pero ella lo logró. Quería ser una buena persona, un buen hombre, quería serlo por ella, pues Brenda se merecía la mejor versión de mí, y justo eso es lo que trataría de darle.–¿Confías en mí? – le pregunté, mientras la tenía abrazada con su cabeza descansando sobre mi pecho– Sí, sí confío – esa afirmación me puso la piel de gallina, pues luego de todo lo que le había hecho y el mal que le había causado, que ella confiara en mi era maravilloso e increíble– Te amo – y la estrujé contra mí – realmente te amo
Capítulo 80 – Siempre me mentisteNarrador:Brenda y Mateo ingresaron al fin en el restaurante, ella aún estaba nerviosa por la tarde pasada con Izan. Luego de ser presentada a los amigos de Mateo, un murmullo distante captó su atención, y cuando giró la cabeza, su corazón se detuvo. En unas mesas más allá, entre risas, vio a Izan, el hombre con el cual planeaba, hacía solo unas horas, escapar, junto a Yuli, su eterna novia. Dejó de escuchar el griterío cuando sus miradas se encontraron. En ese instante, el tiempo pareció congelarse. Brenda lo miraba con una mezcla de incredulidad y dolor, mientras él, atrapado en su propia mentira, reflejó un gesto de culpabilidad. Mateo vio la escena y esbozó una mueca de sonrisa, complacido por el éxito de su plan. La tensión del aire casi no los dejaba respirar, Brenda, quien permanecía paralizada aún, trataba de asimilar la verdad que se revelaba ante sus ojos. Hasta que, con los ojos nublados por las lágrimas se volvió hacia Mateo y la pareja am