Capítulo 81 – Un acuerdo nefastoNarrador:La reacción de Izan se hace notar en todo el restaurante, pues luego de golpear la mesa con furia todos lo quedan mirando. Intenta ponerse de pie, pero Yuli se lo impide tomándolo del brazo y jalando de él, pero la tensión aumenta cuando Mateo acaricia el rostro de Brenda, y en ese momento, Izan ya no puede soportarlo. Se levanta, tira la servilleta en la mesa, emite un fuerte bufido de frustración y se retira del lugar sin mirar atrás. La partida de Izan no pasa desapercibida para Brenda, quien lo observa de reojo mientras se marcha. Al cerrar los ojos una lágrima escapa, pero Mateo la nota de inmediato, se acerca a ella para pasar su dedo, secarla, y al oído le murmura– Cariño, que no se note que te dueleA pesar de la frustración que la invade, Brenda, trata de mantener las apariencias. Fuerza una sonrisa, aunque con los labios temblorosos, dirigiéndosela tanto a Mateo como a la pareja amiga. La farsa debe continuar, pero la tensión en la
Capítulo 82 – todo es falsoNarrador:Izan ansioso por aclarar la situación con Brenda, toma su teléfono y elije cuidadosamente sus palabras antes de marcar su número, pues sabe que un paso en falso y perderá todo el terreno ganado con ella. Cuando comienza a escuchar el tono de la llamada, siente la opresión en su pecho. Pero no le responde el teléfono. Deja pasar unos minutos e insiste, pero obtiene el mismo resultado, luego de unos diez intentos a lo largo de una hora, hora que le pareció eterna, logra que finalmente, Brenda responda la llamada– Hola Brenda – es lo primero que se le ocurre decir– Izan, ¿por qué estas llamándome, creí que había quedado todo claro entre nosotros?– ¿pero qué dices Brenda?, nada ha quedado claro entre nosotros – hizo una pausa – lo que viste en el restaurante…– Tu compromiso con Yuli – le interrumpió – Mateo me lo dijo hace unos instantes– Necesito que me escuches Brenda. Lo que Mateo te haya dicho sobre mi compromiso con Yuli, es falso– ¿Falso?
Capítulo 83 – la fugaNarrador:El día tan esperado finalmente llega. Brenda e Izan se preparan para su fuga, sintiendo la adrenalina que les ocasiona la esperanza de una nueva vida. Brenda solo está esperando la llamada de Izan para que le confirme día y hora exacta para su encuentro en el aeropuerto. El corazón de Brenda está latente de emociones encontradas y el joven decidido de llevar a su amada lejos de la opresión de Mateo. La tan esperada llamada llega al móvil al fin– Brenda, todo está listo. Nos encontraremos en el aeropuerto mañana a las 2 de la tarde. Prepárate para nuestra nueva vidaLa emoción invade a Brenda, y sin poder contenerse, comparte la noticia con Ema– Ema, necesito contarte algo – le dice Brenda al encontrarla en el jardín – Izan se comunicó conmigo, y todo está listo para que nos vayamos al fin. Mañana a las 2 de la tarde nos encontraremos en el aeropuerto para comenzar una nueva vida– ¿En serio, ya? – la abrazó – me pone muy feliz que al fin puedan estar
Capítulo 84 – La traiciónNarrador:Mateo irrumpió en la habitación de Brenda y cerró la puerta con fuerza. Sus ojos destilaban furia mientras enfrentaba a la mujer que desafiaba su control.–Brenda, esto se ha acabado. Si no haces exactamente lo que digo, Izan pagará las consecuencias.– ¿De qué estás hablando Mateo?, ¿hacer que cosa?, ¿qué tiene que ver Izan? – preguntó sorprendidaMateo esbozó una sonrisa siniestra.– Tengo a Izan justo donde quiero. ¿Quieres que siga con vida? Entonces, escucha con atención.– ¿De qué carajos estás hablando? Pareces un mafioso salido de una mala película– Tú me obligaste a eso– Sigo sin entender– Sé que hoy a las 2 se quedaron de encontrar en el aeropuerto para fugarse juntos– ¿Pero qué locura estás diciendo?– Ninguna locura y lo sabesSe acercó a la mesa de noche y tomó el móvil de Brenda, pues ella no esperaba que el fuera y no le dio tiempo a esconderlo. Brenda comenzó a temblar. Entonces Mateo lo abrió y localizó el mensaje de Izan– No t
Capítulo 85 – Tu palabra no valeNarrador:El regreso a la mansión fue en total silencio. Brenda estaba cabizbaja, así como destruida por dentro, un trozo de su corazón se había quedado en el aeropuerto junto con Izan, el otro dentro de su pecho pero en mil pedazos. Mateo saboreaba su retorcida victoria. Al llegar lo primero que hizo fue despojar a Brenda de su móvil y conducirla a su habitación, la cual se convertiría en su prisión de ahora en más. En el angosto pasillo que llevaba a dicha habitación, se cruzaron brevemente con Ema, testigo involuntario de la tragedia y responsable de que Mateo supiera sus planes. Se encontró con los ojos de Brenda y la vergüenza se apoderó de ella, mientras las miradas se entrelazaban.– Lo siento mucho Brenda – dijo bajando la cabeza y tratando de esquivar la mirada– No es tu culpa, es solo mía por haber confiado en ti – le respondió con una mezcla de rencor, desesperación y humillación, lamentando lo que una vez fue su amistadEl silencio volvió
Capítulo 86 – todo es mi culpaNarrador:La noche llegó y con ella toda la incertidumbre de un futuro no muy prometedor para la joven que ahora era cautiva de su esposo. La cena debe serle llevada a lo que Mateo, con su autoridad intimidante le ordena de Ema que lo haga, quien se resiste– Ema tienes que llevarle la comida a Brenda– No, señor Amery no puedo hacer eso, no me lo pida, no es justo– ¿Justo?, ¿acaso tú crees que es justo lo que está viviendo Brenda por tu culpa?, porque es tu culpa y lo sabes, así que ve y hazlo, es parte de tu castigo, no tienes opciónA pesar de la negativa inicial de Ema, Mateo la obliga a enfrentarse a la difícil situación de obedecer sus órdenes o perder su futuro universitario. Finalmente decide llevarle la cena a Brenda. La habitación se encuentra en un tenso silencio cuando Ema cruza la puerta, llevando la bandeja con el plato. Brenda la observa desafiante y rompe el silencio– ¿vienes a disfrutar del espectáculo?– No es así Brenda, lo siento mu
Capítulo 87 – Las llavesNarrador:Ema, con el corazón latiéndole a un millón de pulsaciones por segundo y a punto de salírsele del pecho, se mete sigilosamente en la habitación de Mateo mientras él se encuentra durmiendo. Logra al fin acercarse a la mesa de noche que tiene las llaves para liberar a Brenda de su prisión. Cuando casi las alcanza, Mateo resopla profundamente, Ema queda paralizada por el pánico de que se despierte y la descubra, pero la suerte está de su lado y Mateo vuelve a sumirse en un profundo sueño. Así que se hace de las llaves, sintiendo la fría textura en sus manos temblorosas. Con en preciado tesoro entre sus manos, se retira de la habitación, cerrando con suavidad la puerta para no despertar al monstruo que duerme dentro. Ahora, ya con las llaves en su poder, corre hacia la habitación donde se encuentra la joven cautiva. Brenda escucha la llave entrar en la cerradura y el cerrojo destrancarse, el pánico se apodera de ella y salta de la cama para dirigirse al r
Capítulo 88 – el ginecólogoNarrador:El hecho de que Mateo encontrara las llaves en el suelo fuera de la puerta de su habitación, hizo que empezara a ser más precavido y no las dejara tan descuidadamente en cualquier sitio, a lo que siempre las llevaba con él, atadas con una cadena a su cinturón y en la noche, cuando dormía, no solamente pasaba el cerrojo en su habitación, sino que las guardaba en una pequeña caja fuerte que tenía oculta detrás de un cuadro. Así que Ema ya no pudo llevarle el móvil a Brenda para que se comunicara con Izan, ya que la paranoia de Mateo hacía que Ema no pudiera tener el móvil consigo cuando iba a llevar comida para Brenda, pero como no sospechaba que ella la estaba ayudando no lo revisaba, con que ella lo dejara en la mesa que estaba en el pasillo junto a la puerta del dormitorio de su esposa, le era más que suficiente.– Brenda – respondió Izan la llamada entrante con mucha expectación– No, señor Amery, soy Ema – dijo en tono bajo – lamento decepciona