Capítulo 31
A pesar de su infancia difícil, Valentina nunca perdió el valor para amar, entregándose con sinceridad tanto a Catalina como a Mateo. Ella tenía muy claro que amar no significaba ser inferior ni daba razones para que otros la maltrataran, especialmente ahora que ya no sentía nada por Mateo.

—¿De verdad ya no sientes nada por mí? —preguntó Mateo con una mirada gélida y una sonrisa burlona en sus delgados labios.

—No, yo... ¡mmph! —antes de que Valentina pudiera terminar, él la silenció con un beso intenso.

Su mente estalló, quedando en blanco. Sus pupilas se dilataron por la sorpresa del beso inesperado. No era la primera vez que se besaban, pero la última vez en el baño había sido ella quien lo buscó, quien lo envolvió con sus brazos y lo besó primero.

—¡Mateo, suéltame! —forcejeó intentando apartarlo con sus manos.

Él la acorraló contra la pared con su imponente figura, sus labios fríos pero flexibles la besaban con fiereza, como queriendo dominarla y conquistarla. Aprovechó cuando el
Sigue leyendo en Buenovela
Escanea el código para descargar la APP

Capítulos relacionados

Último capítulo

Escanea el código para leer en la APP