Cuando ambos consiguen apartarse y volver al auto, todo se siente más… ¿cómo explicarlo?
Los dos están en una nube y el camino de regreso a la mansión se hace demasiado corto, porque así es el tiempo, cuando mejor te sientes, más rápido se pasa.
Entran a la mansión en silencio, pero con sonrisas enormes que los ayudan a olvidar.
Nada más entrar, Charlize sale corriendo de alguna parte y se lanza sobre Luz, lo que le provoca a Gerard un puchero juguetón.
-¿Ya no me quieres?
-¡Sí te quiero, papi! Pero a ti ya te he abrazado muchas veces.
-Ok, me siento oficialmente celoso – Luz deja a la niña en el suelo y la toma de la mano -. Pero no importa, de todas maneras te llevaré a una sorpresa.
-¡Me gustan las sorpresas!
-Bueno, Luz te llevará a cambiarte y a preparar el resto de la sorpresa. Yo ir&eac
En el preciso momento en que Luz cierra la puerta del auto, siente que se está dejando miles de cosas en aquella mansión. Agita su manos al tiempo que se cruza el cinturón de seguridad y deja salir un suspiro resignado, solo le quedan dos días para volver a ver a la pequeña princesa.“Y a su padre, no lo niegues.”-¿Todo bien? – Rafael la saca de sus pensamientos y ella lo mira con una sonrisa que no llega a los ojos -.-Disculpa… - se acerca a él y le deja un beso en la mejilla -. Gracias por venir por mí, la verdad es que no tenía muchas ganas de irme.-¿Ah sí? – le pregunta él sorprendido y comienza a mover el auto -.-Es que esa niña… Rafael, si tan solo estuvieras con ella diez minutos, menos… la amarías tanto como yo.-Luz, me encanta verte así de animada, que te enfoques en algo diferent
El fin de semana en casa con sus padres fue una locura. Al menos a su madre se le pasó el enojo y Luz se quedó mucho más tranquila cuando hace uno hora Rafael pasó por ella y su madre le dio un abrazo de despedida y le dijo lo orgullosa que estaba de ella. Ahora, entrando otra vez por aquella puerta, despidiéndose de Rafael hasta el próximo viernes, se sentía mucho mejor. Aunque nada tiene que ver con haber arreglado las cosas con su madre. En cuanto cruza el umbral, nota la mirada severa de Darcy, pero a esa no le tiene miedo, en realidad le tiene más ganas que a la profesora y la directora juntas, así que en algún momento le dará una dosis de su carácter. Pero debe hacerlo con cuidado, porque no es lo mismo defender a la princesa fuera de la casa que dentro de ella. Cualquier mal ambiente puede afectar a la niña, más de lo que ya lo ha hecho. Así que debe ser muy meticulosa. -Gerard y la niña no ha llegado de su paseo – le dice Darcy a Luz c
Tras dejar a Charlize profundamente dormida en su cama, Luz sale de la habitación sin dejar de mirar a la pequeña con amor.Se va a su habitación, busca un pijama simple de playera manga larga y un pantalón, se recoge el cabello en un moño alto, se mete a la ducha y deja que el agua caliente le abrigue el cuerpo, además de buscar ese relajo que necesita para dormir.Cuando sale de allí, se viste rápidamente y se acuesta, con la luz de la mesita de noche encendida, mira el techo un rato y luego se voltea para abrazar la almohada, cierra los ojos esperando que el sueño llegue a ella.Pero cada vez que eso pasa, las imágenes de aquella máscara en la nubla de sus sentidos la atacan y se despierta con un sobresalto.Suspira con frustración, se sienta en la cama y ve la hora.-La una de la mañana… otra vez se viene larga la noche.Decide que tal vez u
Luz abre los ojos, una sonrisa se dibuja y por primera vez en casi una semana pudo dormir tranquila. No sabe si por la leche o por las palabras tan lindas que le dijo Gerard.Luego de eso, cada uno se terminó su taza en silencio y subieron a sus habitaciones, con solo una mirada se dijeron buenas noches y desearon un lindo sueño. (Solo las parejas más conectadas han conseguido comunicarse solo con la mirada y suele llevarles mucho tiempo)Unas habitaciones más allá, Gerard se despierta contento, lleno de energía y con las ganas de sonreír todo el día.-Este no parece un lunes normal – se mete al baño y se ve al espejo -. ¡Es que con ella ya nada es normal!Por supuesto que se mete dando saltitos de adolescente, cantando y silbando, pensando que ha encontrado un punto en común con Luz, que podrá ayudarla a estudiar.-Seré su tutor – dice saliendo de
Los días han pasado con normalidad, Luz de dedica por completo a Charlize, le ha enseñado a leer y la pequeña está aprendiendo muy rápido. Lo mejor para ella es que no siente la presión de una profesora, sino que sobre ella está el aliento constante de Luz.Por otra parte, Gerard cada día solo trabaja lo que necesita y siempre ruega que se termine rápido, si antes su motivación era trabajar hasta olvidar, ahora es terminar para ir a casa y ver a sus chicas jugando por el jardín o esperando por él con algún postre delicioso.En este momento, Gerard va saliendo de una audiencia, a la que fue con Dan, ve la hora en su reloj y sonríe feliz. Su amigo no puede estar más feliz por él, a pesar de lo ocurrido hace algunas semanas, Gerard ha mostrado esa alegría que irradiaba hace años. Sólo espera que no se termine, porque su amigo ya ha sufrido b
La sopa de pollo de Gerard ayudó bastante a Luz, al igual que los mimos de Charlize y el poder levantarse tarde al día siguiente, pero lo que no se le iban eran las náuseas matutinas.Ya tenía una semana con ese malestar y estaba aburrida de sentirse así.Es viernes y hoy le toca irse a casa, más tarde llamará a Rafael para que vaya por ella, por ahora le toca bajar a desayunar con su pequeña princesa.Va por ella a su habitación, como cada día, le hace el peinado que le pide y bajan juntas sonrientes. Abajo está Gerard hablando por teléfono, con una taza de café, ve a las chicas casi llegando al final y sonríe. Pero quien no sonríe para nada es Luz, que al sentir el olor del café, debe salir corriendo al baño de visitas.-¡Luz! Evangeline, quédese con mi hija, por favor.Corre tras ella y le golpea la puerta para que
Poco a poco Luz comienza a abrir los ojos, su mirada está perdida en un punto en donde no se encuentre con los ojos decepcionados de Gerard.Justo cuando estaba comenzando a ceder un poquito nada más, le llega esto como un balde de agua fría. Pero sin duda no es lo peor, porque se llegará el día en que le pregunte quién es el padre y ella no podrá decir nada más que la verdad…No tiene la menor idea.-Ya está mejor, solo es la impresión de la noticia – la enfermera sale y vuelven a quedar solos -.-¿No quieres a tu hijo, Luz? – ella no responde, solo cierra los ojos y deja que las lágrimas caigan -. ¿Sientes que es un impedimento para cumplir tus metas? – ella asiente, porque en parte es por eso -. No, preciosa, no es así… - se acerca a ella y le toma las manos, sin dejar de mirar su expresión de profundo dolor -. Luz, l
En cuanto Rafael entra a la habitación, Luz se pone a llorar y le extiende los brazos, él no se lo piensa dos veces.-Mi niña, ¿qué pasa? – le dice pegando su mejilla a la cabeza de la chica -.-Rafael… lo único que me faltaba… - le dice sollozando -, estoy embarazada.Todo el cuerpo de Rafael se tensa, pero no porque ella esté embarazada, sino por el recuerdo de cómo eso sucedió.-Ya, ya… no llores, eso no le hace bien a tu bebé, porque supongo que lo tendrás, no me imagino a Luz Méndez…-Sí, pero estoy pensando en darlo en adopción. No lo sé, tengo que pensarlo muy bien.-Bueno, tienes varios meses para pensarlo – él se aparta de ella y con sus pulgares le limpia las lágrimas.-Creo que sí.-¿Podrás irte a casa?-Sí, en cuanto se termi