La alarma suena y despierta a Luz, quien por primera vez en mucho tiempo se despierta con energía y alegría, a pesar de todo lo ocurrido en los últimos días, puede sentir una ligera esperanza en su futuro, algo que no puede explicar.
Son las seis de la mañana, se va a la ducha, se viste rápido y se seca un poco el cabello, al ver la hora en su reloj ya son las seis treinta, hora de despertar a la princesa.
Al salir de su habitación no se oye movimiento en ninguna de las otras habitaciones, aunque por el grosor de las paredes es difícil que se escuche algo. Al entrar al cuarto de la pequeña, Luz se acerca con mucho cuidado y comienza a darle suaves besos en la mejilla y en la frente. Charlize se remueve un poco en la cama, sonríe al sentir lo mimos de la chica y abre un poquito sus ojos.
-Buenos días, princesa Charlize, ya es hora de despertar – le dice Luz mientras abre las cortin
Darcy sale de la casa como siempre, sin despedirse de la niña y diciéndole a Gerard que no se tarde, porque tiene una reunión importante con unos clientes.-Lo sé, Darcy, por eso será Dan quien se haga cargo de atenderlos.-¡Pero pidieron la cita contigo, se van a ir con otro buffet!-Si eso pasa – le dice Gerard quitándole la mochila de las manos a Luz -, entonces no eran para nosotros.-Pero…-¿Crees que por uno o dos clientes que perdamos nos iremos a la bancarrota?-Es el prestigio, ese caso es muy importante.-Si no se quedan ellos, vendrá la contraparte, así que… – Gerard se encoge de hombros, toma la mano de su hija y abre la puerta para que la mujer salga de una vez -.Darcy sale echando chispas del enojo, Gerard lleva días comportándose de manera extraña. La apartó de Charlize, además de con
-Señor Finnick – dice la mujer en cuanto lo ve entrar -. Es un placer tenerlo aquí, ¿le ofrezco un café?-No, gracias – se gira a Luz -. ¿Tú quieres uno?-No, gracias.-Tome asiento, señor Finnick – pero Gerard le cede el asiento a Luz, porque la otra silla la ha ocupado la profesora de su hija -.-Señora Cunnings, en realidad quién necesita hablar con ustedes es Luz Méndez, la nueva tutora de mi hija – Gerard se abstiene de usar el título de niñera, porque hasta el de tutora le queda pequeño -.-Oh – por primera vez la directora repara en la chica y su gesto es como si oliera mal, algo a lo que Luz está acostumbrada, porque en los eventos la gente solía verla así -. La escucho.-Tengo ciertos reparos en la manera que tratan a Charlize en este establecimiento.-Me disculpará, señor
Si alguna vez Luz leyó que cuando un hombre y una mujer estaban destinados sentían que su mundo daba vueltas, el corrientazo, la electricidad, las ganas de jamás separarse y esas cosas, ahora mismo todo eso se quedó corto ante los sentimientos que la envolvieron, junto a ese abrazo.Por su parte, Gerard estaba tan feliz que no dudó en abrazar a Luz, porque ella era la responsable de lo que estaba haciendo, justicia por su hija.Pero se dio cuenta muy pronto que pensarlo y hacerlo, eran dos cosas distintas. Ese aroma lo tranquilizó y desestabilizó a partes iguales, el mismo de aquella chica inocente. Y, aunque no quería soltar a Luz por el resto de su vida, lo hizo con delicadeza.Se apartó de la muchacha, la vio a los ojos y pudo ver una mezcla de miedo y sorpresa a partes iguales.-Disculpe, yo… solo estoy feliz y muy agradecido con usted. Me abrió los ojos, esto es algo que sie
-¿A dónde le gustaría ir a comer? – Gerard se sienta frente al volante y mira a Luz esperando una respuesta -.-Solo llévenos a casa, allá puedo comer cualquier cosa.-Es que… usted no se merece cualquier cosa – la sinceridad de su actitud le abre a Luz una mínima esperanza que un hombre como él o como cualquiera, la puedan ver sin juzgarla por lo que le sucedió -.-No lo sé, no conozco muchos lugares.-Entonces iremos a mi lugar favorito – sale del estacionamiento y pone rumbo a un IHOP -.Sí, porque Gerard Finnick puede ser el mejor abogado de la ciudad, pero no ha olvidado sus tiempos de universitario, aunque ya pase de los treinta, le encanta la posibilidad de volver a ser una persona sin tantas responsabilidades y preocupaciones, así que International House of Pancakes es el mejor lugar para eso.Cuando se estacionan fuera del estableci
Gerard se separa solo lo justo para poder mirarla a la cara y sonreírle. Sentir su cuerpo es un privilegio, pero que ella le respondiera aquel abrazo tan necesitado, ha sido algo más poderoso que el mismo Big Bang… y todo eso ocurrió en su corazón en fracciones de segundos, así que es lógico que hasta Luz pueda sentir ese galope en su pecho.-Dis…-No se disculpe, por favor – le dice ella, que termina de romper la unión -. Todos necesitamos un abrazo de vez en cuando.-Si usted supiera cuántos se me han negado, seguro se quedaba así por el resto del día – Luz se sonroja y Gerard le ayuda a subir al auto, renegando de su reverenda estupidez -.-¡Rayos, parezco un adolescente! – se regaña cuando rodea el auto -.Respira profundo antes de abrir la puerta y subirse. Toma su teléfono, Luz lo ve mensajear y luego marcar un núme
-No me haga caso, es solo una expresión – le dice en cuanto ve la cara de sorpresa de Luz. Pero es claro que ama a mi hija y no veo a nadie más que pueda cuidarla.Lo cierto es que él necesita un apoyo para cuando toda su vida se caiga, desde hace dos días ha tomado varias previsiones, como una cuenta para Charlize con suficiente dinero para que viva tranquila hasta los treinta años.Y, si bien dejó a Dan como albacea para que administre ese dinero, también sabe que su hija debe quedar con alguien de confianza para que la cuide mientras Dan sigue adelante del buffet.Esa persona de confianza es Luz.La chica sonríe y le da unos golpecitos en las manos a Gerard.-Mire, vamos a hacer de cuenta que eso puede pasar. Mi respuesta es sí, le prometo cuidar de su hija, jamás apartarme de ella y protegerla con mi vida si es necesario, algo que ahora estoy dispuesta a comenzar a hace
Cuando ambos consiguen apartarse y volver al auto, todo se siente más… ¿cómo explicarlo?Los dos están en una nube y el camino de regreso a la mansión se hace demasiado corto, porque así es el tiempo, cuando mejor te sientes, más rápido se pasa.Entran a la mansión en silencio, pero con sonrisas enormes que los ayudan a olvidar.Nada más entrar, Charlize sale corriendo de alguna parte y se lanza sobre Luz, lo que le provoca a Gerard un puchero juguetón.-¿Ya no me quieres?-¡Sí te quiero, papi! Pero a ti ya te he abrazado muchas veces.-Ok, me siento oficialmente celoso – Luz deja a la niña en el suelo y la toma de la mano -. Pero no importa, de todas maneras te llevaré a una sorpresa.-¡Me gustan las sorpresas!-Bueno, Luz te llevará a cambiarte y a preparar el resto de la sorpresa. Yo ir&eac
En el preciso momento en que Luz cierra la puerta del auto, siente que se está dejando miles de cosas en aquella mansión. Agita su manos al tiempo que se cruza el cinturón de seguridad y deja salir un suspiro resignado, solo le quedan dos días para volver a ver a la pequeña princesa.“Y a su padre, no lo niegues.”-¿Todo bien? – Rafael la saca de sus pensamientos y ella lo mira con una sonrisa que no llega a los ojos -.-Disculpa… - se acerca a él y le deja un beso en la mejilla -. Gracias por venir por mí, la verdad es que no tenía muchas ganas de irme.-¿Ah sí? – le pregunta él sorprendido y comienza a mover el auto -.-Es que esa niña… Rafael, si tan solo estuvieras con ella diez minutos, menos… la amarías tanto como yo.-Luz, me encanta verte así de animada, que te enfoques en algo diferent