Luego de aquella confesión tormentosa, nuestras voces se apagaron, el silencio se hizo presente alargándose por unos segundos; me acerqué nuevamente a Lucy y con dificultad en mis palabras retomé la conversación.
—¿Eso fue todo?
—Sí, eso fue todo… Bueno, cuando ya me estaba preparando para defenderme por la forma en que me miraba, para mi sorpresa luego de que dijo lo que les acabo de contar ella se desplomó cayendo desmayada sobre mis pies, en ese momento aproveché y salí despavorida.
—Esto es demasiado tétrico para mi gusto —murmuro Emily por fin dejando fluir su temor.
—¡Tétrico va a ser regresar al cuarto! —se quejó Lucy.
—Por nosotras no hay problema de que te quedes esta noche, podemos unir las camas y dormir las tres.
Lucy se mostraba afectada, yo también me sentía igual, tanto que hasta se me había olvidado los moretones que lucían mis brazos.
—Amigas, gracias son muy amables, pero ustedes saben lo que sucedería si mi c
—Emily es una excelente maquilladora, te dejó increíble y el toque del camafeo le quedó de lujo —murmuro Lucy sacándome de mi conexión con Jenny.—Ah, sí, debo admitir que lo hizo muy bien.El tiempo pasó sin novedad, las chicas copiaban y hablaban con sus compañeras, entretanto mis ojos aún escudriñaban a Jenny, se veía tan tensa al igual que el aire que la arremolinaba, pobre, se le notaba que no había dormido nada; por más que yo quisiese acercarme, esa línea invisible que nos separaba me lo impedía.—¡Vicky, piensas quedarte ahí, sembrada como un árbol! —me sacudió Emily.—Ah… Qué…—Acaban de sonar el timbre ¿No lo oyes?Era cierto, pero me había concentrado tanto en mirar a Jenny que no lo oí,
—Exacto, por eso reafirmo que debemos mantener la calma y hablemos como gente civilizada.—Usted está muy calmada —continuó riñendo Maribel con impotencia, tenía sus rasgos tan irritados que se le notaba que lo único que deseaba era lanzársele encima a Rebeca.—Señora, si me muestro tan calmada como ahora, es porque, aunque le moleste en escuchar esto que les voy a decir, yo conozco mejor que usted a su hijastro.Maribel se le encendió la mirada cuando Rebeca terminó la frase, en segundos sus labios se entreabrieron para escupirle unas cuantas palabras, pero otras frases se atravesaron para que la situación no se tornara más fuerte.—Es mejor que abordemos el problema de la manera más razonable posible —recalcó la directora uniéndose nuevamente a la conversación.Maribel quedó en sil
Emily me contemplaba fijamente sin disimular su asedio, a pesar de la incomodidad de su hostigamiento mi mente se encontraba dividida. No podía quitarme la preocupación de no saber el paradero de Ethan, y tampoco podía disuadir la agonía que me causaba cada vez que veía mis marcas, para más colmo se había sumado otro problema, “el extraño ataque de Margot”. Lucy estaba en el mismo piso donde advertí la presencia de Arturo, ese detalle me tenía muy asustada, me sentía culpable; de cierta forma él me hacía comprender que era parte de mí. Era aterrador percibir con tanta intensidad su energía en este plano cuando eso únicamente sucedía en los momentos en que me encontraba sola o dormida, pero ahora era distinto, ahora él estaba acechando a otra persona; su fuerza crecía y ya no dependía de mí, ahora otra persona podía verlo y sentirlo. Mis sospechas sumadas a la confesión de Lucy me confirmaban que él se estaba alimentando de la fuerza de Margot, de su debilidad, de su odio hacia mí. Er
Me arrodillé ante él para ayudarlo, pero el olor a alcohol me aclaró el porqué de su estado vulnerable.—¡Emily, no te quedes ahí, tiesa! Ayúdame a meterlo al cuarto antes que alguien lo note.Emily, aun con la boca abierta y con la cara transfigurada de la sorpresa, se acercó y me ayudo a adentrarlo en la habitación. †††Hacía frío y el viento incontrolable soplaba con inclemencia las copas de los árboles causando un silbido macabro, mi amiga tenía razón al referirse a esa noche como una noche sombr&iacu
Ethan no pudo evitar lanzar una carcajada, pero al notar mi condición apenada hizo una pausa para calmarse y para mi suerte retomó la narración de su hazaña ignorando de momento las marcas.—Ya que me explicaste el motivo de tus marcas, creo que es justo que yo continué con mi relato.—Estoy de acuerdo.Ethan una vez me miró con esos ojos pícaros tan característicos de él, luego tocó mi mejilla y me dedicó una sonrisa tierna.—Necesitaba alejarme lo más que pudiera, estaba lleno de una cólera incontrolable, y que me vieras tan vulnerable empeoró mi estado.—Eso es lo de menos, lo que no te perdono es que me hallas tenido con el alma pendiendo de un hilo —mis palabras lograron ablandarle el semblante, Ethan me contempló nuevamente, pero esta vez sus ojos brillaban con una dulzura profunda e
Ethan continuaba firme en su proposición, en mi caso yo luchaba por contenerme; él pareció leer mis ojos y volvió a la lucha.—No te permitiré creer que lo que sentimos no está bien, ¿dime que tengo que ser? ¿Qué deseas que haga?Mi memoria se negó a separar las mentiras de la verdad y comenzó a buscar el pasado en mi mente, ¿estaría preparada yo, un ser tan extraño para dar amor?—¡No! No deseo que hagas nada —y con vergüenza caminé apresuradamente para alejarme otra vez de él, cuando iba a cruzar el umbral de la puerta sus palabras me alcanzaron.—En el invernadero de la casa de tus tíos te dije que sería yo quien te diera tu primer beso y lo acabo de cumplir, ahora voy por tu corazón.—¡Acuéstate a dormir, porque considero que sigues borracho!
Victoria, gracias por dejarme pasar la noche en tu habitación, más aún sabiendo que podía causarte problemas muy serios, pero eres la única persona a la que quería ver. Eres la única que podía salvarme de mi infierno personal. Me disculpo por la angustia que te causé, te aseguro que no era mi intensión, realmente necesitaba drenar todo este odio que lastimaba a cualquiera que se me acercaba. No me disculparé por el beso que te di. Fue un bocado de cielo, y me llevó a confirmar que los milagros existen. Sé que mi amor no te es indiferente. Estoy seguro de que este es el recordatorio perfecto para ti: tus labios hicieron posible lo imposible.… Espero no te enfades. El punto es que anteriormente solamente había existido un hombre para mi mundo y se llamaba «soledad e incomprensión», pero eso quedó atrás porque en este preciso momento me he dado cuenta de que tú estás escrita en mi destino, llegaste para arrastrarme a la luz; apareciste en el mejor momento de mi vida. Antes le temía a s
—¡Jenny, espérate, no te vayas! —la tomé por el brazo para impedir su marcha, pude sentir cómo temblaba —¡No puedes dejarme así! Tienes que decirme todo ¿Acaso la actitud de Margot es por causa de sus celos por Ethan? —Ya no sé nada más… Ya ni siquiera entiendo por qué te detesta tanto —luego saco de su bolsillo un sobre y me lo entregó con disimulo —léelo y no se lo muestres a nadie —cuando lo guardaba Allison nos descubrió y se acercó rápidamente al notar que Jenny estaba conmigo. —Te estaba buscando —le dijo con sequedad, luego me miró con gestos sombríos —¿Qué haces hablando con ella? —la interrogó ignorando mi presencia. —Nada malo, solo tomamos el mismo libro. —¡Y por eso tienes que instalarte a hablar con esta! —declaró despectivamente mirándome de arriba abajo. —Creo que estás exagerando, ya te explico. —No estoy hablando contigo, es más como se te ocurre dirigirme la palabra… ¡Asquerosa sangre sucia! —¡No tienes por qué ofenderme! ¿O supones que es un privilegio hablar