"Me enfrentaré al mundo entero si tengo que hacerlo, solo por apoyarte, pero por favor dime la verdad." Me rogó Devin. Pensé que eso sería pedirle demasiado, ya que ir en contra de todos significaría perder su estatus de Alfa, su buen nombre y tal vez, hasta su vida. No podía permitir que eso ocurriera. "No hay ninguna necesidad de que me defiendas, Devin. No quiero que pierdas tu puesto de Alfa." Dije, él se quedó en silencio. "Te juro que no tengo nada que ver con esto, y no sé nada sobre mis padres." Continué.Pero en sus ojos pude ver que aun dudaba de mí. Estaba pensando en si debía confiar en lo que le decía o no y me pregunté qué pasaría si me llevaban ante el consejo. Era una Sullivan y por lo que había hecho mi familia, no se sorprenderían si yo también fuera una traidora. Me quedé sentada en la cama en silencio, tratando de pensar en qué hacer para no poner a Devin en una situación tan complicada por mí culpa. Pensé que había regresado a su vida para quedarme y ser fel
~ Devin ~Todo lo que Andrew nos dijo me dejó pensando; no podía ignorar el hecho de que los Sullivan estaban involucrados, y tampoco podía ignorar que Susan llegó a mí casa la misma noche en la que atacaron Pridewood. ¿Cuáles eran las probabilidades de que tuviera tanta suerte? Estaba dividido entre creerle e investigarla. Cuando le pregunté si estaba involucrada, me hizo sentir que no, pero eso no sería suficiente cuando el consejo la interrogara. Antes de quedarme dormido, decidí que la protegería a toda costa, aún no estábamos vinculados, pero yo la trataba como si ya fuera mi Luna. Le creía y haría todo lo necesario para defenderla. La mañana siguiente desperté en una cama vacía y me pregunté dónde estaba, porque no se escuchaba ningún sonido en el baño, entonces toqué su lado de la cama y estaba frío. Me pregunté si había vuelto a la habitación después de haber ido por el vaso de leche. Aun pensando en dónde podría estar, vi una nota en la mesita de noche, la tomé y reco
Leo les explicó lo que había pasado y les ordenó que me ayudaran."¿Como puedo reconocer su olor?" Preguntó Casper, así sería más fácil rastrearla."Espera voy por algo." Le dije.De inmediato corrí a nuestra habitación, encontré un vestido que había usado y volví corriendo, se lo di a Casper, él lo olió antes de pasárselo a los otros dos hombres. Por la forma en que tomaron y manejaron la tela, supe que no eran guerreros, sino rastreadores, eso me alegro mucho. Le agradecí a Leo por dejar que sus rastreadores me ayudaran, eran los únicos que podrían encontrarla con facilidad. Cuando terminaron de organizarse, nos pusimos en marcha para encontrarla. Los rastreadores se transformaron en lobos, para poder correr y no perder el rastro, mientras que Casper y yo nos quedamos en forma humana. Los dos olfateábamos, tratando de ver en qué dirección se había ido, mientras caminábamos me enojé conmigo mismo por haber sido tan duro con ella, debí haberme quedado callado. Sabiendo como era Susan
~ Leo ~Devin era un estúpido. ¿Cómo pudo acusar a la mujer que tanto decía que amaba de ser una traidora? Si yo fuera ella, también habría huido. Susan tuvo una muy buena razón para huir porque, aunque yo fuera el jefe del consejo, no era mucho lo que podría hacer para salvarla. Los otros miembros no se habrían molestado en investigar el asunto, así que se votaría para ver qué haríamos con ella. Los Sullivan no tenían una buena reputación, por lo que no había forma de que la perdonaran. Además, había presenciado la ejecución de su familia, y eso era algo terrible y traumatizante para cualquier persona. Devin fue un estúpido al haberla acusado sin siquiera haber investigado antes. Pensé que el estado mental de Susan no soportaría tanta presión, era demasiado frágil y no merecía que la bombardearan con preguntas y acusaciones. Devin tenía mucho que aprender sobre las relaciones y los sentimientos de las mujeres."¿Por qué fue tan estúpido? No sé qué le dijeron mis hermanos y mi pr
"Yo soy Clay Newton Ivanov." Se presentó, Amelia le sonrió."Nos parecemos mucho, Leo." Me dijo por el vínculo, así que le sonreí. Clay la acercó para darle un abrazo."Me encanta la idea de poder hablar contigo, por fin. La última vez que te vi, estabas en Gad e ibas de camino al Este" Le contó, ella se apartó para mirarlo."¿Entonces eras tú?" Preguntó, él sonrió y asintió. Ella lo abrazó con más fuerza, así que me pregunté qué había pasado en ese encuentro."Me salvaste la vida." Dijo Amelia, él le acarició la espalda mientras sonreía."Sabiendo que nuestro padre dio su vida para protegerte, sería una estupidez de nuestra parte dejar que ellos ganaran." Le dijo, por lo que sentí curiosidad."Luego de eso, ¿qué paso cuando venias hacia el Este?" Pregunté, quise saber porque Amelia nunca me había contado algo sobre eso y Clay me miró mientras aún abrazaba a su hermana."Los tres hemos vigilado y protegido a Amelia en secreto. Andrew fue quien lo hizo la mayor parte del tiempo, pero
~ Devin ~No sabíamos que tanto había herido la plata a Susan, así que íbamos corriendo lo más rápido posible por el bosque, los rastreadores nos ayudaron a encontrar la ruta más corta y yo esperaba que llegáramos a la Manada de la Montaña a tiempo. El hecho de que Susan estuviera inconsciente era un gran problema. No podía dejar de pensar en que había estado tirada por un buen rato en un charco de sangre. Sin embargo, recé para que la diosa santísima la mantuviera con vida. Aullé para pedirles a los rastreadores que se apresurara, y continuaron avanzando, el tiempo era lo más importante.Llegamos a un punto donde Casper los hizo detenerse, él cambió a su forma humana y le gruñí, pero parecía que quería hablar conmigo. No pertenecíamos a la misma manada, así que no podíamos vincularnos mentalmente, por lo que la única forma de comunicarse conmigo era hablando en su forma humana. Rex comenzó a gruñirle porque creíamos que estaba perdiendo el tiempo, que en ese caso era tan valioso pa
"Tuvo mucha suerte de que llegaran a tiempo, estaba muy grave. La plata había envenenado su cuerpo, pero ahora está estable, sin embargo, se va a demorar dos días para que este lo suficientemente sana y puedan trasladarla." Me informó y exhalé aliviado. Era mucho mejor que escuchar sobre su muerte, tuve mucho miedo de que no pudieran salvarla. Le agradecí al médico y fui a ver a Susan. Entré a la habitación para verla. Estaba conectada a un electrocardiograma y canalizada con un líquido amarillo que entraba a sus venas, se veía muy débil y frágil, así que tuve que aferrarme a las palabras positivas del médico. Me acerqué y vi su cara, estaba tranquila, parecía que estaba durmiendo, y casi se me salen las lágrimas. En el fondo, me sentía culpable por haberla acusado, nunca pensé que mis preguntas iban a hacer que saliera corriendo, incluso habíamos hecho el amor esa noche y pensé que todo estaba bien. No sabía que en realidad se estaba despidiendo, por lo que sentí que mis ojos se
"Está bien, si necesitas algo, solo dímelo. Alexei va a llegar allá pronto, él se fue después del desayuno y estoy seguro de que te va a tratar bien allá." Dijo Leo, listo para terminar la llamada.Me alegró saber que Alexei estaría cerca, luego colgué y le devolví el celular a Casper. "¿Entonces te vas a quedar?" Le pregunté, sabiendo que era el Beta de Leo y el segundo hombre más importante del Este. Dijo que si y sonrió. "El Alfa nos pidió que te acompañáramos y regresáramos en dos días." Respondió, e internamente le agradecí el gesto de Leo. También le di las gracias a Casper. "¿Los rastreadores recogieron alguna de las flechas que nos dispararon?" Le pregunté, ahora que me sentía más tranquilo al saber que Susan estaba fuera de peligro. "Sí, Alfa Corrigan. De hecho, a uno de ellos le dieron y se la sacó, agarrándosela con la boca, pero no era de plata, sino de hierro." Dijo Casper.Me sorprendió no haber notado que lo habían herido. Sabiendo que el hierro no nos afecta