Separarse fue realmente un suplicio para ambos. Pero para James lo fue mucho más, nunca supo lo que era sentir miedo y dolor hasta el día en que Sofia desapareció. Y ahora que debía dejarla ir, sentía algo muy parecido a la desolación. Pero se dijo que después de que hablaran, ya eso se terminaría. Al menos que hubiera algo que lo impidiera se casaría con ella inmediatamente, se opusiera quien se opusiera._ Ahora, ¿vives aquí? _ dijo James observando detenidamente el lugar en donde la estaba dejando _ vaya, se ve que tu trabajo ha dado sus frutos... Sofia suspiró sin saber que decir. En realidad, el apartamento era de Aidan, lo había comprado para vivieran allí mientras permanecieran en Nueva York. Pero eso aun Sofia no se lo podía decir.La joven lo miró un instante y le acarició la mejilla._ Prometo que mañana cuando estemos más tranquilos, hablaremos y te contaré todo _ le dio un suave beso en los labios _ ha sido una noche totalmente extraña, emocionante y maravillosa... no
James retrocedió un paso, más sorprendido que herido por el empujón de Aidan. Su mirada se cruzó con la de Sofía, buscando respuestas, pero lo único que encontró fue miedo y desesperación.Aidan no se detuvo. Su rostro estaba encendido por la rabia contenida durante tanto tiempo._ ¿Qué demonios haces aquí, James? ¿A que has regresado? _ su voz era baja, pero afilada como una navaja _ No tienes nada que ver con Sofía ni con su hijo. ¿Lo entiendes?El mundo de James pareció detenerse en seco. "Su hijo". Las palabras resonaron en su mente como un eco interminable. Sus ojos se desviaron automáticamente hacia el niño que estaba abrazado a la pierna de Sofía. Un niño que, ahora que lo veía con más detenimiento, tenía un aire... familiar. Sin importar los esfuerzos de Aidan para detenerlo, James logró llegar cerca de donde estaba la joven._ ¿Qué está diciendo, Sofía? _ la voz de James apenas era un susurro, pero la tensión que emanaba era palpable.Sofía sintió como si el suelo se ab
El cielo se había teñido de un gris plomizo, reflejando la tormenta que se desataba en el interior de James mientras se alejaba de la casa de Sofía. El eco de sus propias palabras, "No me iré sin mi hijo", resonaba en su mente, mezclándose con el rugido de su corazón aún desbocado. A su alrededor, la ciudad parecía seguir adelante, indiferente a la batalla emocional que acababa de librarse en su interior.Cada paso que daba lo acercaba a una encrucijada, una decisión que cambiaría su vida y la de Alex para siempre. ¿Qué haría ahora? ¿Cómo enfrentaría la realidad de que tenía un hijo del que había estado ausente durante años? Las preguntas se arremolinaban en su mente, golpeándolo con una fuerza abrumadora.Se detuvo en seco al llegar a un parque cercano, aquel mismo parque donde, sin saberlo, había conocido a su propio hijo. Las risas lejanas de los niños jugando parecían una cruel burla, un recordatorio de lo que había perdido. Se sentó en un banco, hundiendo el rostro entre sus ma
Patrick y Peter tuvieron que ser testigos del ataque de furia de James. Él jamás había hecho algo así, sin embargo, parecía que situación lo estaba sobrepasando emocionalmente._ James, hermano, deberías calmarte ya... no has dejado un adorno en pie _ le dijo Patrick tomándolo de los hombros _ creo que es hora de que te detengas y comiences a pensar en lo que debes hacer para recuperar a mi sobrino, ¿no crees? Te prometo que estaré a tu lado en todo este proceso, pero es necesario enfocarnos cuanto antes en lo que debemos hacer.James lo miró con sus ojos acuosos. El solo recuerdo del rostro sonriente de su pequeño hijo, hacia que su corazón se encogiera._ Dime Patrick, ¿Por qué me hizo esto? ¡En todo este tiempo no he hecho más que amarla! Y ella, simplemente le entrega mi hijo a ese bastardo que me odia y que no dudará en hacer lo que sea para retener a Alex, de eso estoy seguro _ apretó los labios y se tiró sobre el sillón tratando de calmarse, Patrick se sentó a su lado ponié
La furia de Aidan era aun más palpable que la de James. No solo estaba en peligro el perder a Sofia sin a Alex. Estaba enfadado con Sofia por no haberle dado su lugar en el momento en el que enfrentaba a James. ¿Acaso todos esos año nada s junto a ella no habían significado? _ ¿Dónde estabas? _ le preguntó furioso a Sofia apenas entró al apartamento _ ¿Por qué decidiste irte sola? Sofia lo miró por un instante mientras se sacaba su abrigo, dio un largo suspiro, estaba totalmente acongojada. _ Tenía que intentar hablar con James _ revoleo los ojos _ pero ha sido inútil, no me ha querido escuchar. Literalmente, todo se ha ido al diablo y lo que más temíamos se está haciendo realidad. Él se puso frente a ella y la miró con reproche. _ ¿Y que esperaba Sofi? ¿Qué te dijera que todo iba a estar bien y que formarían una feliz familia? _ resopló con enfado _ te recuerdo que cuando hicimos este acuerdo fue precisamente para cuando llegara este día. De todas maneras, debes quedarte tr
Eleanor tuvo que sentarse, mientras escuchaba lo que Patrick le estaba diciendo. Su cabeza comenzó a darle vueltas, su sien palpitaba descontroladamente, ante la semejante noticia. _ ¡Un hijo! Dios mío…_ balbuceó tratando de asimilar lo que oía _ James tiene un hijo… Como estaban en video llamada Patrick pudo observar que su madre parecía haber entrado en estado de shock. Pero él estaba demasiado enojado con ella como para preocuparse por su estado. _ Sí, un hijo, el pequeño Alex, ¡tu nieto! _ le recalcó con firmeza _ ese pequeño del que hasta ahora no teníamos conocimiento gracias a tu divina intervención aquel fatídico día. Eleanor se tocó el pecho, respirando con dificultad. Un gran sentimiento de culpa la estaba inundando. _ ¿Cómo podría haber sabido yo que esa mucha estaba embarazada? _ trataba de buscar justificarse para sentirse mejor _ si lo hubiese sabido… Patrick arqueó una ceja. _ Si lo hubieses sabido, quizás habrías hecho una tontería peor _ resopló con enoj
James miraba con suma ansiedad al abogado que leía detenidamente toda la información que Peter había logrado recolectar. El hombre echaba un suspiro hondo con cada hoja que pasaba del informe, su rostro no parecía muy auspicioso.Cuando terminó de leer, miró a James con suma seriedad._ ¿Y bien? _ le espetó James ansioso _. ¿Qué puedes decirme de todo esto? _ James, no voy a mentirte. Este caso es mucho más complicado de lo que crees _ dijo el abogado dejando la carpeta en el escritorio _. Alex nació dentro de un matrimonio constituido, el niño lleva el apellido del padre, quien es alguien importante dentro de la comunidad y por los informes, es un excelente padre.James golpeó con fuerza y rabia el escritorio._ ¡Ese hombre no es su padre! _ gritó furioso _ Alex es mi hijo, no sabía de su existencia, no me desentendí de él. ¿Acaso como padre biológico no tengo derechos? _ No dije eso, los tienes. Pero debemos probar que la madre te ocultó su existencia, eso en primera instanc
_ ¿Está seguro de que quiere hacer esto señor Patrick? _ le dijo Peter quien, sentado en el asiento del conductor, esperando frente al edificio de Sofia _. ¿No cree que se arriesga a estropear más toda la situación? Patrick lo miró por un instante. _ ¿Más de lo que ya está? A lo sumo, me sacarán a los empujones o a los golpes. Creeme este hermoso rostro puede soportarlo _ su mirada se volvió firme y segura _ Pero de aquí no me voy sin hablar con Sofia y sin conocer a mi sobrino. Esperame aquí, ante cualquier eventualidad, te llamo. ¿Entendido? Peter asintió. El joven bajó sin un ápice de inseguridad. Parecía algo propio de los Lee Fenton ese aplomo que tenían al momento de enfrentar las situaciones. Y aunque Patrick siempre había sido el subestimado de la familia, era quien más seguridad e inteligencia emocional poseía al momento de tomar decisiones. Sofia se encontraba jugando en la sala con su hijo, cuando la mucama la interrumpió. _ Señora O´ Neill hay un joven que