Emily.- El olor de esa tortilla me dejó muy mal, dejé todo mi estómago en el inodoro, limpio el sudor frío de mi frente, doy un último suspiro antes de salir, cuando abro la puerta Leandro estaba parado justo en el umbral, pegué un brinco del susto poniendo la mano en mi pecho.— Lina me dijo que te sentiste mal ¿Todo bien?— Sí, llevo días sin comer bien, además el estrés no ayuda –Le paso por un lado aun limpiando las comisuras de mi boca.— Uhm… en dos días contraeremos matrimonio –Me giró rápidamente con la sorpresa adornando mi rostro –Vendrá un equipo para te alisten, tengo un vestido precioso, lo saqué del vestier de Vanessa, creo que nunca se lo colocó, aún tiene la etiqueta, a ti te quedará mejor. –Suelta un sonrisa cínica.— ¿Cómo se supone que nos casaremos si tú y Vanessa siguen casados? Le pregunto tratando de dilatar ese momento. –Además yo también estoy casada.— ¡Ah! no te preocupes por eso, las uniones en esta organización son más simbólicas, con lo que somos nadie s
Emily.-— ¡Vaya, vaya! Pero que escena tan hermosa –Me paro en el umbral de la puerta, ambos se sobresaltan, me da algo de risa cortarles la inspiración sus expresiones son de frustración total. – ¡Oh, sigan no se detengan por mí! Creo que la niñera estaba a punto de tener un orgasmo— Emily –Leandro menciona mi nombre con la respiración agitada, se quitó a la niñera de su regazo y su miembro saltó antes mis ojos, él sonreía descaradamente. – ¿Te nos quieres unir?— ¡Ja! Por favo,r no soy de las que me gusta compartir y veo que eres un gran cínico, llamar a Daniel infiel cuando tú haces lo mismo ¿Este es el respeto que vas a darme como tu esposa? Un romance con la niñera ¡Es tan cliché! Venía a buscarte tenía ganas de… pero veo que ya saciaste las ganas, así que ya no me apetece –Cuando me doy la vuelta Leandro pega un grito.— ¡Espera! –Me giro mostrando una expresión llena de decepción, Leandro mira a la niñera. –Vete— Pero…— ¡Que te vayas! –La mujer sale de la oficina sosteniendo
Emily.-Si bien ahora no quiero saber nada de Daniel, enviarle el mensaje que quiere Leandro me parte el corazón decirle que no lo amo, aunque estoy enojada por su engaño no puedo rebajarme al mismo nivel que él, por más que intenté convencerlo no pude.Han pasado tres semanas, en las que he tenido algo de tranquilidad por lo menos no ha estado aquí, con el lanzamiento de su nueva droga ha estado eufórico, la única victoria que he tenido es conseguir que retrasara la dichosa boda, pero no me dejó sola, el degenerado del padre ha estado aquí vigilándome como halcón al igual que la zorra de la niñera.Mi malestar físico no ha disminuido y ya comienzo a sentir miedo aunque por momentos se me pasa, pero no quiero avisar nada.De inmediato siento de nuevo las náuseas y voy directo al baño.(…)— ¿Cuándo le vas a decir a Leandro que estás embarazada? –Me detengo en seco al escuchar la voz de la zorra, mi mente rápidamente comienza a sacar cuentas y caigo en que mi menstruación está retrasad
Leandro.-Observo como almacenan el Provo este cargamento es el primero el más importante nuestros primeros clientes fueron los americanos, viajaron a Bari en busca de algo nuevo y yo se los di ¡Boom! Un gran pedido que ha comenzado a llenar el arca de los miembros de la Sacra Corona afianzando mi poder dentro de la organización, nada puede fallar.Ha llegado el momento de deshacerme de mi padre y de Vanessa, ya quiero comenzar mi vida junto a Emily y a Diogo, no necesito estorbos que desvíen mi atención de lo que realmente tiene que importarme.La Sacra Corona es una organización familiar si demuestro que soy estable en ese ámbito, seguiré convenciéndolos de que soy el líder más apto para ocupar el cargo ya después me encargaré de eliminar al consejo, esos viejos no tienen doliente, una nueva Sacra Corona Unita debe surgir.— Listo el embarque señor –Uno de mis hombres da el aviso.— Bien sabes lo que tienen que hacer no hay nada más importante que proteger el cargamento ni siquiera
Emily.- Mi pequeño siguió jugando con sus juguetes con una naturalidad que me dejó sorprendida, después de decirle a Leandro lo que hice con Tania sentí como se venía sobre mí, fue en ese momento que Jacob aprovechó saliendo de su escondite y tomando por sorpresa al mafioso.Ellos comenzaron a pelear tomé a Diogo en mis brazos y salí corriendo de la habitación, no quise mirar hacia atrás solo deseaba encontrarme con Derek o con Stella que me ayudara a salir de ese lugar con mi hijo, escuchaba la madera y los muebles de la habitación de Diogo crujiendo mientras él y yo corríamos por el pasillo, justo cuando estamos cerca de la escalera sentí unas uñas enterrándose en mi cuero cabelludo, mi cabeza se fue hacia atrás.— ¿A dónde crees que vas? ¡maledetto traditore! (Maldita traidora) ¡Ti ucciderò! (Te voy a matar)— ¡Suelta a mi mamá! –Le gritó mi pequeño.— Ella no es tu madre, tu padre soy yo y te vas a quedar aquí conmigo, despídete de ella –Expresó Leandro con tanta crueldad, no pue
Emily.- Desperté exaltada de la cama sintiendo una punzada de dolor en mi cabeza, un quejido salió de mis labios, mi vista se aclara y la primera imagen que veo es a Derek sentado en una silla en un rincón leyendo una revista, sentí decepción al no ver a… Daniel.— ¿Cómo te sientes? –Derek me saca de mis pensamientos.— ¿Dónde está Diogo?— Con Jacob, te trajimos al hospital porque te desmayaste seguramente fue producto del estrés y el shock –Asentí en silencio cuando recordé las fotos que me había mostrado Leandro.— ¡Tú, maldito bastardo! –Solté mirándolo enojada, los ojos de Derek se movieron por toda la habitación, estaba confundido y sorprendido al mismo tiempo. – ¡Me juraste que todas mis fotos habían desaparecido y Leandro logró conseguirlas! –Por su expresión noté que ya sabía de lo que hablaba.— Emily hay personas en el bajo mundo que tienen más talento que yo, no es justificación, pero yo no tengo la culpa que hayas marcado la vida de unos tus ex clientes tanto como para g
Daniel.- — ¿Citarla aquí en tu casa? –Reprocha mi hermana sentada con las piernas cruzadas moviendo con ansiedad su pierna.— No lo sé Tamy, como puedo andar libremente como quisiera –Le señalo el yeso que está en mi pierna.Decidí citar a nuestra madre aquí en mi casa, tampoco me agrada la idea, pero no puedo moverme mucho en esta puta silla de ruedas, además en una semana Emily y mi hijo estará de regreso y quiero tener todo resuelto.— ¿Qué se supone que le diremos Daniel? ¿Perdonarla? No la quiero cerca— Tamy esto lo hacemos por nosotros recuérdalo, debemos cerrar ese capítulo pronto serás madre ¿No crees que sería mejor llegar a eso sin tener tanta carga sobre tus hombros?— Odio cuando tienes razón –Justo en ese momento el timbre sonó, Chris salió de la cocina comiéndose un sándwich tal parece que los antojos del embarazo los está teniendo él, lo que me hizo pensar en mi bebé, aún no le he dado la noticia a Tamy quiero que salgamos de esto para continuar con nuestras vidas.De
Emily.- Observo desde la ventana a Diogo jugando a las carreras con Jacob y Derek, sonrío ante la imagen, aunque está incompleta, solo falta él… Daniel.— ¿Cómo te sientes amiga? No deberías estar levantada Emily –Entra mi amiga Anna con una enorme bandeja.— Solo tenía curiosidad ¿Ya viste a esos dos?— Si se ven adorables ¿No? aunque Natalia está histérica quiere que Jacob vuelva lo más pronto posible, se asustó mucho con lo del secuestro y la entiendo, me sorprende la fortaleza de Diogo, es un niño muy valiente –Mi sonrisa se desvanece. –Amiga ¿Qué pasa?Tenía que desahogarme con alguien y agradecía que fuera con Anna porque hace semanas he llevado un miedo en mi interior que me tiene la cabeza hecha un lío.— Me asusta que Diogo… recuerde lo que sucedió Anna, hasta yo quiero olvidarlo, cuando Leandro me amenazaba vi una mirada de mi pequeño que… me asustó, él es hijo de Leandro, lleva en su sangre el ADN de mafiosos y gente que se ha dedicado a hacerle daño a los demás y…— Emily