La cena transcurrió de lo más normal, bebieron y rieron a no más poder recordando viejas anécdotas, luego los tres hermanos llevaron a su consentida a la casa, cuando llegó encontró a su amiga semidormida en el sofá del living, la despertó y la mando a su cuarto, pero la niña como es bien chusma quería saber que tal le fue.Ya en su cuarto bañada y cambiada, se disponía a meterse en la cama, cuando recibió un mensaje que no esperaba y menos a esas horas.Daemon, su jefe le pedía que baje que la está esperando, intrigada se vistió decentemente y cuando se disponía salir en silencio, era observada por su amiga, al llegar a la calle lo encontró como le dijo, estaba apoyado en su coche, vestido casual y sin su habitual peinado de gel, incluso se veía más relajado.Camino unos pasos sin ser vista, pero al solo faltar varios paso, él levantó la mirada y ella se quedó en su lugar inmóvil.—¿Señor? Que lo trae a estas horas a mi casa.—Discúlpame si te molesto, pero no quería dejar que el tie
Daemon se encontraba en el coche concentrado observando algo en su tableta. Al levantar la mirada ya a lo lejos veía cómo su asistente venía caminando de una manera alegre, casi podría decir que venía bailando, fue como un dejavu. Movía los brazos y sonreía a todos aquellos que pasaban por su lado, Era más que evidente que se encontraba feliz y le demostraba a los demás esparciendo buena energía.Sin embargo, él no podría estar del todo feliz, sus padres quieren una cena con su novia, y ya no sabe como evadirle inventando excusas aunque sabe bien que no puede seguir mintiendole y menos arrastrarla a que su familia la lastime con comentarios agresivos, por más que ella sea una chica de buenos sentimientos, ellos ven el sogno de pesos ante todo, la despreciaran por su origen y poco estatus, podría asegurar que su padre estará de su lado, pero no así su madre y el pesado de Daniel que siempre tiene un comentario venenoso y sisañozo.Pero aunque sepa todo eso, no puede evitar que esa ch
Daemon salio de su oficina buscando a su secretaria, pero lo único que encontró fue el lugar vacio, allí mismo Dalma salia con una taza de té y sin tiempo de pensar en una excusa le termina confesando la verdad el porqué la ausencia de Eunice, por un momento lo vio enojarse y penso que metio la pata, pero lo que no sabia el porqué se había enojado, se enfado consigo mismo por ser tan estricto que le teman hasta para pedir permiso. Luego le pidió su ayuda para buscar unos papeles extraviados, mientras ella buscaba en unos estantes en la parte de arriba, él revisaba en el archivero de otro aparador, todo el lugar se encontraba en un silencio que daba miedo, el poco sonido que se oía es de hojas y madera chocarndo entre sí, los minutos pasaban cuando oyó su teléfono que sonaba en la mesa que se encontraba cerca, pensó que podría alcanzarlo sin la necesidad de bajarse del banquillo donde estaba, se inclino un poco pero la distancia era más extensa de lo que se imaginaba en su intento de
Al día siguiente Dalma despertó adolorida justo como le había dicho Daemon la noche anterior, su labio está más sensible y apenas se pudo cepillar, cuando se rozo sin querer rl recurdo de como Daemon se sensibilizo con ella y la ternura conque la veía hizo una sonrisa débil apareciera en su rostro, sus manos sienten la incomodidad en especial la derecha que es cual se había recalcado.Fue al comedor donde se encontró con Mora comiendo dulce del pote en una esquina como una criminal y cuanto la vio hizo una mueca que rápidamente disfrazó en media sonrisa sarcástica. —Santo cielos, Dalma tienes pinta de que alguien te dio una paliza, ¿ahora si me dirás lo que paso anoche?—Si Espera a que me tome mis pastillas.Pasaron unos minutos donde ambas se sentaron a desayunar. —En resumen estaba en el trabajo, buscando unos archivos en un armario y como soy enana me tuve que subir a un banquillo, comenzó a sonar el celular en la mesa, tontamente creí que podría tomarlo...—Te inclinaste y term
Ya como estaba previsto, el fin de semana. Dalma fue a ver a su madre que tanto insistió en que no faltará, pues ella como en años anteriores el día del cumpleaños de su hija siempre le hacia el postre que ella tanto ama, por motivos de salud este año no pudo ser, pero eso no evitaria que el fin de semana pasaran un rato agradable, agradeciendo a la vida por haberla bendecido con tremendo regalo que es su hija.Dalma llegó a la mañana temprano sin avisarle a nadie llego en silencio y se encontró a su madre tratando de ponerse de pie, de inmediato la reto por hacer un esfuerzo que le puede costar caro.El día transcurrió y ninguna deseaba despegar una de la otra, hasta que la visita inoportuna de su amiga, esta llegó para invitarla a salir, su madre que oyó todo, casi la obligó a que salga a divertirse con sus amigos como una chica normal.—Jazmín solo será un rato, ¿ok? No quiero dejar mucho tiempo sola a mamá, después de todo ese es mi propósito de venir los fines de semana y conocie
Daemon se encontraba aburrido, se dirigía hacia la casa de sus padres con la intención de evitar que se vayan en contes de su chica, sabe muy bien que cuando sepan a que se dedica la haran sentir menos todo por la maldita manera de ver el mundo, para ellos si una familia tiene poder sus hijos solo se podran juntar con otras familias con poder, no importa el amor. Solo si pueden acumular mas bienes en especial su madre. Sentado en la parte de atrás del coche se puso a navegar por las redes sociales, viendo solo por ver sin detenerse en ninguna en particular. Hasta que ve un en vivo y el nombre en particular lo hace ponerle atención, hace unos días se puso de fisgón en la cuenta de cierta chica que tiene su corazón y su mente alborotada y ahora le sale como recomendación.Entro en la cuenta, pero quien aparecía en la pantalla no era Dalma, había una chica que no conocía, hablaba y reía al mismo tiempo, dejó de prestarle atención cuando de fondo apareció Dalma, con una copa en la mano,
Una nueva mañana comenzaba, y en un cuarto de hotel dos personas se encontraban en la misma cama, la primera comenzó a despertar pero aun se encontrabaconfundida y el segundo seguía dormido.La joven Dalma no comprendía lo que estaba haciendo allí, junto a Daemon, su jefe. ¿Dónde está su amiga? ¿donde está ella? ¿que es ese lugar? Suena el teléfono y antes que despierte a su jefe sale corriendo a atenderlo.Se metió al baño casi escabulléndose.—Hola —hablo en un susurro —Bueno, Dalma, porque no respondías… me preocupe una banda, chingona.Mientras escuchaba a su amiga recriminarla con su nuevo acento mexicano, seguía inspeccionando el lugar en el que se encontraba.—Estoy bien, aunque ahora no puedo hablar mucho.Se miraba al espejo y también se palpaba el cuerpo buscando indicios de si sucedió algo más anoche.—Que pasó anoche, te fuiste sin dar alguna explicación, pero llame a tu casa y allí dieron a entender que creían que estabas conmigo, algo que decir.—Como te he dicho no pue
Daemon se encontraba en un cumple, nadie entendía por qué tenía ese día en su rostro una sonrisa de oreja a oreja. Los empleados se preguntaban ¿si se venía el apocalipsis? ¿Si estarían despedidos? O tenía una novia? Cuál sería el motivo de dicha alegría nadie la sabia, pero para ellos era más factible las dos primeras opciones, quien en su sano juicio se acercaría a él teniendo ese rostro tan frío, nada más alejado de la realidad, pues nadie sabía que detrás de esa marcará de frialdad se encontraba la persona más cálida que se podían imaginar.Mientras él pasaba por el vestíbulo las personas literal se le quedaban viendo como si fuera otra persona, al subir al ascensor dejaba a toda chica embelesada, si antes ya quedaban cautivadas con su rostro perfecto, es todo un placer poder apreciar tal belleza.Eunice se encontraba en su lugar ya lista y presentable para poder recibir y saludar a su jefe como todos los dias, aunque no pudo hacerlo a la perfección cuando por la puerta de crista