Capítulo 9 — Un Encuentro Inconcluso RECUERDOSNarrador: Kael despertó con el sonido de su teléfono vibrando en la mesita de noche. Aún era temprano, el sol apenas asomaba en el horizonte. Desorientado, entrecerró los ojos al ver el nombre de su padrastro en la pantalla. Contestó, sintiendo que algo estaba mal. —¿Xavier? —Kael… —la voz del otro lado sonaba rota—. Tienes que venir. Es tu madre. No va a pasar de hoy. El mundo de Kael se detuvo por un segundo. Una sensación fría recorrió su espalda. —Voy para allá —respondió rápidamente, levantándose de la cama. De inmediato, empezó a vestirse apresuradamente. El plan que tenía para ese día quedó en segundo plano, borrado de su mente por la gravedad de la situación. Mickaela esperaba verlo en la celebración del campus, pero no había tiempo ni forma de avisarle. Salió del dormitorio con el teléfono en la mano, yendo a bucar el coche para llegar a su casa lo antes posible. Mientras tanto, Mickaela se preparaba para la celebración,
Capítulo 10 —El pasado la alcanzabaNarrador:Mickaela llegó a su casa con el cuerpo tenso y la mente agitada. Cerró la puerta de golpe, como si con ese gesto pudiera sellar todo lo que había ocurrido esa noche. Pero el peso de lo que acababa de pasar seguía aplastándola, negándose a desaparecer. Caminó a tientas por el pasillo en la oscuridad, sus pies descalzos sobre el suelo frío, buscando algún refugio en la tranquilidad familiar de su hogar. Quería alejarse de todo lo que Kael representaba, de esa sensación inquietante que no podía sacudirse. Subió las escaleras hacia su habitación y encendió la luz. El suave resplandor llenó el espacio, pero no la calmó. Arrojó su chaqueta sobre la cama y caminó hasta la ventana, abriéndola para dejar entrar el aire nocturno. Afuera, todo estaba tranquilo, como si el mundo entero hubiera decidido detenerse mientras ella luchaba por respirar normalmente. Apoyó las manos en el borde de la ventana, cerrando los ojos por un momento. Pero incluso así
Capítulo 11 —Entre la rabia y la tentaciónNarrador:Mickaela se despertó sobresaltada, aún con el eco de la noche anterior retumbando en su cabeza. La luz del amanecer se filtraba por las cortinas, pero no era suficiente para borrar la sensación de lo que había ocurrido entre ella y Kael. Su piel aún recordaba su toque, y la culpa se instalaba en su pecho como un peso insoportable. Se levantó con brusquedad, intentando ahogar las imágenes: la pared fría, su mano debajo de su ropa, el peligroso deseo que aún latía en su interior. Bajó las escaleras rápidamente, esperando escapar de su propio caos interno. Pero apenas llegó al recibidor, escuchó voces. Al abrir la puerta, se encontró con Ryan, el amigo más cercano de Kael, que hablaba por teléfono. Estaba apoyado contra el marco con su sonrisa fácil. Al verla, terminó la charla.—¿Ya despierta, Micka? —preguntó Ryan, sus ojos vagando por su cuerpo sin disimulo.—¿Qué haces aquí, en mi casa, Ryan? —replicó ella con brusquedad, cruzándos
Capítulo 12 — La Revelación y la Calma Antes del TorbellinoNarrador:Mickaela se quedó inmóvil, la mano en el pomo de la puerta, mientras trataba de calmar el torbellino de emociones que se arremolinaba en su pecho. Finalmente, giró la llave y abrió con fuerza. Kael estaba allí, apoyado contra el marco, su figura bañada por la luz tenue de la tarde. Llevaba una chaqueta de cuero que acentuaba su actitud despreocupada, pero sus ojos traicionaban algo más: una intensidad que la hizo estremecer.—¿Qué haces aquí? —preguntó ella, cruzándose de brazos para protegerse de lo que sabía que vendría.Kael alzó una ceja y sonrió con ironía.—Lo sabes bien, Mickaela. No puedo quedarme lejos, aunque me esfuerce. Eres como un pu*to imán, aunque trate de alejarme, tu me jalas hacia tí. Y te juro que lo intento...Ella bufó, sin molestarse en disimular su molestia.—¿Intentarlo? ¿Eso es lo que llamas acosarme con mensajes tan… tan...? —Su voz se quebró, pero rápidamente recobró la compostura —¿Tan a
Capítulo 13 — Una Propuesta TentadoraNarrador:Mickaela sintió los labios de Kael sobre los suyos, inicialmente suaves, casi inseguros, pero que pronto ganaron intensidad, consumiéndola con una urgencia que reconocía demasiado bien. Su mente intentó resistirse, pero su cuerpo respondió de inmediato, traicionándola con la misma pasión que había mantenido oculta durante tanto tiempo. Él la sostuvo firmemente, pero sin apretarla, dándole la oportunidad de retroceder si lo deseaba. Pero no lo hizo. En cambio, sus dedos se aferraron a la chaqueta de cuero de Kael mientras el beso se profundizaba. Cuando finalmente se separaron, ambos estaban sin aliento. Kael apoyó su frente contra la de ella, sus ojos buscando los de Mickaela.—No puedo fingir más, Micka —murmuró, su voz ronca y cargada de emoción —Me gustas. Mucho más de lo que debería.Ella lo miró con una mezcla de sorpresa y escepticismo.—¿Ahora te das cuenta? —preguntó, intentando mantener su tono sarcástico, aunque su corazón latí
Capítulo 14 — La Visita InesperadaNarrador:El murmullo de las conversaciones usuales de la galería flotaba en el aire, mezclándose con el sonido de los pasos de Mickaela mientras revisaba los cuadros para la nueva exposición. El espacio estaba casi listo, pero había detalles que no podía ignorar: la iluminación de uno de los lienzos estaba ligeramente descentrada, y un marco parecía necesitar ajustes. Con una libreta en mano y un lápiz detrás de la oreja, Mickaela trabajaba con eficiencia, perdida en su propio mundo. El sonido de pasos firmes y decididos sobre el suelo de mármol la sacó de su concentración. Giró la cabeza justo a tiempo para ver a un hombre entrando con una presencia que no podía ignorarse. Era alto, con el cabello perfectamente peinado hacia atrás, y su traje gris oscuro estaba hecho a medida, ajustándose a su figura con una precisión impecable.Xavier Donovan. Mickaela no lo reconoció, pero algo en la manera en que se movía, con esa combinación de seguridad y cari
Capítulo 15 —Carisma en acciónNarrador:La atmósfera en la galería estaba cargada de algo intangible cuando Xavier regresó al salón principal. La tensión del intercambio previo con Kael aún flotaba en el aire, pero Xavier no parecía afectado. Al contrario, se desplazaba con la misma seguridad serena de siempre, como si llevara el control absoluto de la situación. Kael pasó junto a él, el rostro endurecido por una mezcla de disgusto y frustración, y murmuró algo inaudible antes de desaparecer en su oficina. Xavier no le prestó atención; su enfoque estaba ahora completamente en Mickaela, quien reorganizaba algunos catálogos cerca de una pared llena de pinturas abstractas.—¿Siempre trabajas tan duro? —preguntó Xavier con voz aterciopelada, deteniéndose a pocos pasos de ella.Mickaela levantó la mirada y se encontró con sus ojos oscuros, que parecían observarla con una intensidad casi desconcertante. Respiró hondo, decidida a mantener la conversación estrictamente profesional.—Es parte
Capítulo 16 —Confesiones entre amigasNarrador:El apartamento de Sophia era un refugio cálido, lleno de cojines coloridos y el aroma a té recién preparado, estaba iluminado con luz tenue, y el suave aroma del té de manzanilla flotaba en el aire. Mickaela se dejó caer en el sofá con un suspiro prolongado, abrazando un cojín contra su pecho. Mientras Sophia la miraba con ojos atentos desde el otro extremo, claramente intrigada, sentada frente a ella, tamborileaba los dedos en su taza, impaciente por arrancarle la verdad.—Entonces, ¿me vas a contar ya qué pasó o tengo que sacártelo a la fuerza? —preguntó Sophia, arqueando una ceja con una sonrisa maliciosa. Mickaela suspiró y dejó la taza sobre la mesita de centro. —Mier*da,Micka, ¿vas a hablar ya, o piensas torturarme con tu cara de misterio toda la noche? —soltó Sophia, medio bromeando, pero con el evidente brillo de la curiosidad en sus ojos.Mickaela ladeó la cabeza, indecisa.—No sé ni por dónde empezar.—Pues empieza por lo más j