—Ah, y otra cosa —volteé a verlo—, deberías de tener cuidado. Porqué Mork está por aquí cerca. ¿Y no quieres que él venga a mí, cuando te vea en este estado, cierto? —maldije al escucharlo—, adiós. —¿Estás bien? —escuché la voz de Win. Asentí con la cabeza, tratando de calmar mis impulsos, solo que no podía hacerlo—, Flex es un idiota. Pero quiero saber, ¿Qué ha pasado entre ustedes? ¿Y por qué no me has dicho nada? Solo supe que tuviste una relación con él, que después de eso… —Cambié —admití seriamente, suspirando para pasarme una mano por mi cabello—, te la diré, pero primero, vamos al bar. —¿Y las clases? —me preguntó frunciendo el ceño, lo miré divertido. —Si es cierto, iremos a buscar mi mochila, y nos vamos. Aseguré. Pude ver el rostro de desesperación de él, pero, ¿quién era él para acelerar el proceso cuando la historia es interesante? Sé que al final, me va a agradecer de no haberlo contado antes. Respiré hondo cuando volvimos al salón, ahí estaban nuestros amigos. Uno e
CANCIÓN: DELICATE — TAYLOR SWIFT NARRA MORK La clase había concurrido normal. Siempre solía tener alguna cuando me enseñaban algo nuevo, pero literalmente, conocer cada punto del arte me habían resultado siempre fascinante, me motivaba, me gustaba aún más porqué sabía que quizá más adelante, podía vivir de esto. Me gustaba no tener alguna duda, me daba miedo levantar la mano para quedar en ridículo, aunque, sabía bien que se venía a aprender en la universidad. Suspiré estirando mis brazos, meneando un poco la cabeza de un lado a otro, escuchando las voces después de mis amigos. El profesor se despidió de nosotros. Era simpático, tenía mal carácter cuando comenzaba a dar las clases, pero antes de iniciar nos había dado motivación, dónde confirmaba que juntos podíamos seguir adelante. ¿Quién no quisiera tener un profesor que los motive como él? Hasta me había parecido tierno. Salí de mis pensamientos, justament
Miré mi reloj. ¿Había llegado tarde? ¿Temprano? ¿Mi hermano se había cansado de esperar? No. Mikla no era así. Mikla jamás me abandonaría. Jamás pasaría de largo, o se cansaría de esperar si se tratara de mí. ¡No entiendo por qué estoy sintiéndome tan mal conmigo mismo! No sé si me considero mala persona por haber dejado así a Rika. ¡Me está comiendo por dentro toda esta incertidumbre! Sólo quería llorar. Pero me aguanté. No quería hacerlo. No era hora de llorar, ni de perder el control, cómo siempre lo hacía.Respiré hondo. Abrí los ojos cuando escuché el claxon del auto de mi hermano. Sonreí aliviado, llevándome una mano a mi corazón entrando en el coche. Lo abracé cuando el me desordenó el pelo: Los dos éramos iguales, sólo que el tenía el pelo más corto que el mío y era un pelín más alto que yo. Aún así, el cuerpo, los ojos, la nariz y la contextura eran lo mismo. Si era cierto que tardé acostumbrándome en que no fuera él mi espejo personal. Nunca le dije sobre esa cosa divertida.
—Ya sabes que tienes que superarlo en todo lo que puedas, Mikla —jugué con mis dedos nervioso, observando a mi hermano. Él tenía la presión de nuestro padre, siempre tenía que ser el número uno, aunque tenga que trabajar con él. Medio sonreí, terminando de comer—, solo te digo que, aunque estés trabajando en el mismo set que él, y que sea tú pareja de la serie, puedes fingir ser su amigo, llevarse bien, y cuando terminen las promociones o sea lo que sea que hagan, vuelves a odiarlo. Cómo lo has hecho toda la vida. ¿Entendiste?—Si, padre. Siempre lo he entendido —apreté su mano en forma de apoyo. Mikla asintió con una media sonrisa en sus labios—, gracias por su apoyo, los quiero mucho.—Terminé, estoy muy cansado, quiero irme a dormir. Buenas noches papá, y mamá —contesté.Mi madre se levantó acariciándome el cabello, para después dejarme un beso en la mejilla. Luego, mi padre me dio su sonrisa de aprobación. Suspirando, subí las escaleras para llegar a mi habitación. Me acosté en la
Se veían guapo los dos. No lo iba a negar. Mi hermano lucía con el mismo uniforme que yo tenía, y el otro chico, que era Thorn, lucía una chaqueta negra sujetándolo por el cuello al mismo tiempo que este lo apartaba. ‘El mal amor’; era el título de la serie. Toda la nación lo esperaba con ansías, pues era algo único, algo que nadie jamás había visto: Dos chicos como protagonistas. Me sentía orgulloso por mi hermano. Su carrera como actor estaba progresando mucho. ¿Será que el mundo se sorprendería si supieran de mí? ¿Si supieran que tiene un hermano gemelo? La verdad era que a veces si me provocaba salir de la oscuridad, pero, aquellos recuerdos amargos que deseaba olvidar me tenían atrapado entre mis peores pesadillas haciéndome detener en la locura. Salí de mis pensamientos cuando Mikla tronó sus dedos en mi rostro. Me preguntó que me estaba pasando. Observé mi plato que todavía estaba lleno, así que solo dije un ‘nada’. Suspiré comiendo con rapidez, para salir de casa. No quería
NARRA ARTHITHubo varias ocasiones dónde regresaba siempre tarde a casa. Nunca daba alguna explicación o algún motivo porqué en efecto, mis padres nunca se percataban de eso. Siempre me las arreglaba bien. Siempre me salía con la mía cuando ellos estaban en el café azul, hasta que en este momento no me había dado cuenta de que lo había arruinado todo. Bajé del coche con la ayuda de Win, ya que si no había hecho sexo en esta noche, que la salida hacía el bar dónde me reunía siempre valiera para algo.Me sostuvo un poco antes de que abrí la puerta. Tomé una bocanada de aire, sorprendido que mis padres estuvieran en la sala de estar. Mi madre tenía un vestido negro con lentejuelas, y mi padre, tenía un traje con corbata —se veía que venía de trabajar—, maldije. Eran la primera vez que me cachaban con ebriedad. Win, saludó a mis padres, pero con su mirada pude entender que estaba temblando del miedo, ¿y quién no lo harí
Escuché la puerta de mi cuarto abriéndose. Mi madre entró. Se sentó a mi lado con una suave sonrisa de oreja a oreja, nadie había dicho nada. Rápidamente, sequé la lágrima con mi mano.—No tienes que ser fuerte todo el tiempo —me dijo con su tono de amabilidad—, las personas pueden explotar de vez en cuando.—Si lo hago, me veré cómo un imbécil —ella se río, suspiré viendo al techo—, ¿están decepcionados de mí?No le había querido preguntar a ellos. Por eso quería siempre evitar el tema, porque por más que mis padres me dijeran que no, sabía que quizá en el fondo desearía que fuera un hombre ‘normal’; no la miré. Sólo abrazaba a la almohada que tenía en mi pecho, preparado para saber lo que ella pensaba.Habíamos pasado por mucho como familia. Mamá tenía que cuidarse de los prejuicios que decían sobre mí, aunque con su orgullo siempre nos defendía a capa y a espada. En cambio, a papá, era a la persona que más le había afectado sobre mi declaración. ¿Por qué decepcionarse de uno cuando
CAPÍTULO I CANCIÓN: Wish - Boy Sompob AÑO 1989 NARRA MORKParecía increíble que aquello estaba pasando: ¡Me estaba preparando para ir a la universidad! No sabía si i era porqué si era por mí o mis padres que me habían aceptado cuando me postulé hace semanas, pero eso no me había importado. Lo que realmente me importaba es que, por fin, saldré de casa. Hola, soy Mork Sang. Soy el segundo hijo de la familia, debido a que mi hermano gemelo Mikla, fue el primero en nacer, aunque por ciertos minutos de diferencia, cosa que siempre me había resultado gracioso porqué yo era mucho más alto que él.Mi familia está llena de artistas. Mi padre, Fight Sang fue un reconocido actor de dramas.