Llegar a mi apartamento y no ver ni un rastro de Dahlia, no verla jugando con mis sobrinos, no escucharla hacer sus chistes, no verla mirando sus series coreanas aguantando las ganas de llorar, no burlarme de ella, todo eso me tenía mal, realmente mal. Me estaba obligando a ser fuerte, pero era bastante difícil cuando los niños sobre todo se encargaban de recordarme lo mucho que la echaban en falta, además llevaban ya unos días enojados, se habían encargado de dejarme en claro que el que se hubiera ido era mi culpa. Por otra parte, le había pedido a mi padre el contrato, le dije que quería que mi abogado pudiera revisarlo y que luego se lo entregaría de regreso ya firmado, tenía todas las intenciones de que él pudiera añadir alguna cláusula que lo hiciera inválido de alguna manera. Por supuesto que esas eran mis intenciones, había una cláusula en especial que harían posible que ese contrato se disolviera, estaba seguro de que mi padre estaría en contra, mucho más de lo que estaría W
Los días no habían sido fáciles de sobrellevar, mucho menos después de aquella conversación, de saber que mi madre había sido capaz de llegar tan lejos, me había quedado un vacío en mi interior.Era un enorme recordatorio de cuanto echaba en falta a mi padre, si él hubiera estado con vida, si él me hubiera podido acompañar en todo este proceso, jamás hubiera permitido todo esto. Hay días en los que, aunque no lo mencione, lo recuerdo demasiado, era un hombre con los pies sobre la tierra, razonable, que tenía la costumbre de afrontar los problemas con tanta paz, era un fiel creyente de que si algo debía de ser tuyo, nadie te lo podría quitar, eso incluía los logros.Fui criada de una forma humilde, mi padre me enseñó de valores, de amor, era un gran ser humano, a diferencia de lo que mi madre dice de él, porque la realidad detrás de todo eso es que mi madre esperaba una gran vida y mi padre vivir sin tantas complicaciones.Mientras mi madre se preguntaba que iba a ser del futuro, mi pa
Las palabras de la madre de Dahlia me continuaban rondando en la cabeza, era demasiado malo para ser cierto, si eso era real, entonces había grandes probabilidades de que todo esto no saliera bien, pero tenía que continuar con el plan, al menos para averiguar un poco más al respecto, para poder saber a qué nos estamos enfrentado.—Esto rebasó los límites —dijo Dahlia de repente haciendo que volviera a la realidad.Estaba devastada, podía notarlo, sabía que esto estaba siendo demasiado, todo demasiado rápido, como si la vida se hubiera desmoronado a nuestro alrededor en cuestión de horas, de minutos, de simples segundos.Quizá solamente habíamos vivido engañados, o nos habían colocado una venda en los ojos, y ahora que podíamos verlo todo como en realidad era, se volvía insoportable. No había mucho que pudiéramos hacer para cambiar la situación, ni siquiera había una fórmula mágica para cambiar todo esto, pero sí había algo que se podía hacer para calmar, para buscar un poco de paz.—D
Mi madre era consciente, ella sabía quién era el hombre con el cual pensaba formar un futuro, sabía que me imaginaba teniendo una familia feliz con ese hombre, sabía que deseaba tanto hacerme vieja al lado de ese hombre y sabía su verdadera cara, sabía que iba a destruirme.Era consciente de que en el mundo había demasiada maldad, pero se supone que una madre siempre va a desear proteger a la vida que vio crecer en su vientre, yo misma como madre jamás me imaginaría destruyendo a la vida que cree dentro de mí, que le alimenté.Me quedaba en claro que ella carecía de ese amor por mí, no era necesario que hiciera nada más para notarlo, pero el dolor era tan inmenso, yo sí la quería y hasta la noche anterior me había costado demasiadas lágrimas aceptar que era momento de soltarle.Isaac me había hecho olvidarme de todo lo malo por momentos, hasta me había quedado dormida con la imagen en la mente de lo que verdaderamente quería para nosotros, desde que lo conocí tenía el peor de los conc
Después del mal momento que nos hizo pasar tan temprano en la mañana la madre de Dahlia, tuvimos que esperar a que sacara las cosas del apartamento, ella me pidió que me quedara vigilando todo mientras entraba a darse una ducha.Personalmente, me pareció que era una excusa para poder tener un momento a solas y llorar sin que yo estuviera viéndola, porque realmente la situación se le estaba haciendo demasiado dolorosa, algo que entendía perfectamente.Al quedarme allí a solas con la madre de Dahlia lo único que esperaba era que se marchara lo más pronto posible, no me daba una buena sensación esa mujer, había algo en ella que realmente no terminaba por convencerme.—Quiero tener una pequeña conversación contigo Isaac —me dijo por primera vez de una manera amable, parada desde la puerta.Salimos del apartamento, respiré profundo tratando de encontrar la paciencia donde no la tenía, porque realmente ni siquiera con mis padres me caracterizaba por ser una persona demasiado paciente, pero
Nos sentamos todos a la mesa, vi que los niños llevaban anchas sonrisas llenas de diversión, que mi suegra tenía un gesto de confusión y que la empleada se sentía un poco tensa al estar sentada a la mesa.uObservé a Isaac que pasó por el umbral con aquel traje que le quedaba monísimo, con un gesto amargado y los brazos llenos de platos, como un mesero experto. Mi suegra le hizo un recorrido con un gesto divertido, como si nunca hubiera imaginado el ver a su hijo de ese modo.—Ni siquiera abras la boca para comentar nada —dijo entre dientes Isaac, colocando el plato frente a su madre.Creo que todos estábamos de acuerdo en que era demasiado gracioso, pero nadie dijo nada, solamente nos quedamos observando mientras colocaba los platos y Fanny hizo el esfuerzo en levantarse para tomar su plato, pero yo negué.—No te levantes, no debes de ayudarle, este es su castigo Fanny —dije con severidad a lo que él me fulminó con la mirada.Vi en su gesto la preocupación, probablemente pensaba que
El ambiente a pesar del malentendido que hubo mientras estábamos comiendo se volvió bueno cuando hablamos de la idea de pasar un momento agradable en familia, realmente me hacía ilusión luego de tanto tiempo pasar un tiempo de calidad en familia.Pero cuando tocaron el timbre a la puerta y Dahlia se fue con una ancha sonrisa a atender, escuché una voz fuera de lo normal, una bastante familiar, que me hizo ir hacia la entrada del apartamento, entonces la escuché.Mi piel se erizó, no había cambiado en absolutamente nada, seguía siendo una mujer vil, una mujer sin corazón, como era posible que luego de haber conseguido exactamente lo que quería, viniera a perturbar a una mujer embarazada con un tema tan delicado.Sabe perfectamente qué palabras tiene que utilizar, que es lo que tiene que hacer para causar daño y esto no es algo nuevo, sino algo que viene desde hace mucho tiempo atrás. Quise mantener la calma, pero escucharla como hacía que ese pequeño que ella ni siquiera quería como a
Llegó noche buena, me sentía un poco ansiosa luego de que el abogado Brown me confirmara que podría pasar la navidad con Itan, sería el primer año que realmente recordaría como feliz estando en familia, porque sí, por primera vez podía decir que me sentía en familia. Había algo que me había hecho mucha ilusión, por primera vez pude ir a elegir los obsequios de navidad de mi hijo, fue maravilloso, lo recordaría siempre, sobre todo por el hecho de que Isaac me había ayudado a elegirlo. Por supuesto que también elegimos obsequios para todos, los más importantes fueron para los niños, ya que Isaac no tenía la menor idea de que debería de regalarles. Yo decidí que a Lucius sería buena idea darle de regalo algo que le ayudara a alimentar la curiosidad que tiene todo el tiempo por saberlo todo, le elegí un pack de ciencia y algunos libros relacionados con lo mismo. Por su parte, a Abbie era un poco más complicado saber que darle como obsequiarle, porque no era tan obvia como Lucius, ella s