Mi madre era consciente, ella sabía quién era el hombre con el cual pensaba formar un futuro, sabía que me imaginaba teniendo una familia feliz con ese hombre, sabía que deseaba tanto hacerme vieja al lado de ese hombre y sabía su verdadera cara, sabía que iba a destruirme.Era consciente de que en el mundo había demasiada maldad, pero se supone que una madre siempre va a desear proteger a la vida que vio crecer en su vientre, yo misma como madre jamás me imaginaría destruyendo a la vida que cree dentro de mí, que le alimenté.Me quedaba en claro que ella carecía de ese amor por mí, no era necesario que hiciera nada más para notarlo, pero el dolor era tan inmenso, yo sí la quería y hasta la noche anterior me había costado demasiadas lágrimas aceptar que era momento de soltarle.Isaac me había hecho olvidarme de todo lo malo por momentos, hasta me había quedado dormida con la imagen en la mente de lo que verdaderamente quería para nosotros, desde que lo conocí tenía el peor de los conc
Después del mal momento que nos hizo pasar tan temprano en la mañana la madre de Dahlia, tuvimos que esperar a que sacara las cosas del apartamento, ella me pidió que me quedara vigilando todo mientras entraba a darse una ducha.Personalmente, me pareció que era una excusa para poder tener un momento a solas y llorar sin que yo estuviera viéndola, porque realmente la situación se le estaba haciendo demasiado dolorosa, algo que entendía perfectamente.Al quedarme allí a solas con la madre de Dahlia lo único que esperaba era que se marchara lo más pronto posible, no me daba una buena sensación esa mujer, había algo en ella que realmente no terminaba por convencerme.—Quiero tener una pequeña conversación contigo Isaac —me dijo por primera vez de una manera amable, parada desde la puerta.Salimos del apartamento, respiré profundo tratando de encontrar la paciencia donde no la tenía, porque realmente ni siquiera con mis padres me caracterizaba por ser una persona demasiado paciente, pero
Nos sentamos todos a la mesa, vi que los niños llevaban anchas sonrisas llenas de diversión, que mi suegra tenía un gesto de confusión y que la empleada se sentía un poco tensa al estar sentada a la mesa.uObservé a Isaac que pasó por el umbral con aquel traje que le quedaba monísimo, con un gesto amargado y los brazos llenos de platos, como un mesero experto. Mi suegra le hizo un recorrido con un gesto divertido, como si nunca hubiera imaginado el ver a su hijo de ese modo.—Ni siquiera abras la boca para comentar nada —dijo entre dientes Isaac, colocando el plato frente a su madre.Creo que todos estábamos de acuerdo en que era demasiado gracioso, pero nadie dijo nada, solamente nos quedamos observando mientras colocaba los platos y Fanny hizo el esfuerzo en levantarse para tomar su plato, pero yo negué.—No te levantes, no debes de ayudarle, este es su castigo Fanny —dije con severidad a lo que él me fulminó con la mirada.Vi en su gesto la preocupación, probablemente pensaba que
El ambiente a pesar del malentendido que hubo mientras estábamos comiendo se volvió bueno cuando hablamos de la idea de pasar un momento agradable en familia, realmente me hacía ilusión luego de tanto tiempo pasar un tiempo de calidad en familia.Pero cuando tocaron el timbre a la puerta y Dahlia se fue con una ancha sonrisa a atender, escuché una voz fuera de lo normal, una bastante familiar, que me hizo ir hacia la entrada del apartamento, entonces la escuché.Mi piel se erizó, no había cambiado en absolutamente nada, seguía siendo una mujer vil, una mujer sin corazón, como era posible que luego de haber conseguido exactamente lo que quería, viniera a perturbar a una mujer embarazada con un tema tan delicado.Sabe perfectamente qué palabras tiene que utilizar, que es lo que tiene que hacer para causar daño y esto no es algo nuevo, sino algo que viene desde hace mucho tiempo atrás. Quise mantener la calma, pero escucharla como hacía que ese pequeño que ella ni siquiera quería como a
Llegó noche buena, me sentía un poco ansiosa luego de que el abogado Brown me confirmara que podría pasar la navidad con Itan, sería el primer año que realmente recordaría como feliz estando en familia, porque sí, por primera vez podía decir que me sentía en familia. Había algo que me había hecho mucha ilusión, por primera vez pude ir a elegir los obsequios de navidad de mi hijo, fue maravilloso, lo recordaría siempre, sobre todo por el hecho de que Isaac me había ayudado a elegirlo. Por supuesto que también elegimos obsequios para todos, los más importantes fueron para los niños, ya que Isaac no tenía la menor idea de que debería de regalarles. Yo decidí que a Lucius sería buena idea darle de regalo algo que le ayudara a alimentar la curiosidad que tiene todo el tiempo por saberlo todo, le elegí un pack de ciencia y algunos libros relacionados con lo mismo. Por su parte, a Abbie era un poco más complicado saber que darle como obsequiarle, porque no era tan obvia como Lucius, ella s
Me desperté y lo primero que me encontré fue a Dahlia, su rostro hermoso, aún seguía dormida e Itan estaba entre sus brazos, se había quedado a dormir con nosotros, algo que realmente no me pareció mal porque después de tanto tiempo soñando con tenerlo cerca esto era algo que debía suceder.Sabía que cuando consiguiera la custodia así sería por un par de semanas, al menos hasta que él pudiera adaptarse a ella por completo, pero ahora había algo que me preocupaba un poco más, ya que la noche anterior mi hermana había dicho que había algo de lo que quería hablar con nosotros, pero que prefería esperar.Me desperté con cuidado de no despertarlos, el objetivo era preparar un buen desayuno para todos, puesto que mi hermana también se había quedado. La noche anterior, luego de entregar los regalos, hubo uno en particular que no entregué, fue el de mi madre, es decir, le había entregado a mi madre uno que habíamos elegido con Dahlia, pero había algo más especial que no le había dado.Hoy era
Me desperté a causa de los gritos que provenían de la sala, pude ver como Itan seguía profundamente dormido entre mis brazos, no me extrañaba, para ser tan pequeño había estado despierto por demasiado tiempo.Lo que me pareció verdaderamente extraño es con la facilidad que se había dormido, como si acostumbrara a dormir en cualquier lugar, normalmente los niños tan pequeños cuando están con personas que son desconocidas tienen dificultades para quedarse dormidos, en ocasiones resulta imposible.Quería pensar que se trataba de una conexión entre ambos, porque de lo contrario, eso significaba que él suele pasar mucho tiempo con personas que no son de su entorno y eso me provoca un profundo miedo.Le coloqué cojines a los lados para que no fuera a caerse por si se movía mientras estaba dormido, quería saber que era lo que estaba sucediendo, pero cuando logré terminar de acomodarlo los gritos cesaron.Tuve dudas de si debía de levantarme y salir de la habitación, ya que la conversación pa
Dahlia estaba tardando demasiado, quería que ese idiota se marchara cuanto antes y tenía realmente mucho miedo de que pudiera hacerle algo o mejor dicho, que Dahlia fuera capaz de decirle algo con respecto a lo que habíamos estado hablando.Me bastaba con saber que en el pasado la había maltratado, que le había hecho de su vida una miseria, por esa razón y al saber que él pertenece a esa organización, me parecía realmente riesgoso que ella estuviera a solas con él.Cuando salí noté que Dahlia estaba un poco pálida, me hizo preguntarme que tipo de conversación habían mantenido y los nervios comenzaron a apoderarse de mí. Le entregué a Itan, vi su sonrisa forzada, el cómo se contuvo para despedirse de su hijo y entonces cuando ellos salieron de nuestro campo de visión, ella se desplomó.Apenas pude sostenerla entre mis brazos, la llevé dentro de prisa, mi madre se aproximó preocupada.—¿¡Qué le sucedió!? —me preguntó con prisa.—No lo sé, se desmayó, creo que ese idiota le hizo algo —re