*—Sienna:No podía creer que había pasado una semana desde aquella cita que terminó con ellos peleados y desde ese entonces, Sienna no tenía idea que pasaba con Diego. Luego de que él la dejara en su puerta, Sienna subió llorando a su habitación y había ignorado las llamadas que vinieron después, Diego se percató del error cometido y trató de remediarlo, sin embargo, Sienna no quiso tratar con él esa noche.No obstante, aunque pensó que todo se resolvería al día siguiente, no fue así. No hubo más llamadas y tampoco recibió mensajes de este pidiéndole perdón. Diego tampoco fue a visitarla en la panadería o volvió a su casa para hablar con ella. Sienna no quería pensar en que todo se había terminado de esa forma, pero este parecía ser el caso.Una parte de ella quería ser la primera en buscar el contacto, pero no había sido la del error y era bastante orgullosa como para dar su brazo a torcer. Decía que era Diego quien tenía que buscar la manera de volver a su lado para excusarse, por
*—Sienna:Había llegado temprano de la panadería, pues dejó a Joseph, quien era la segunda mano de su padre, a cargo para que cerrara el lugar. Cenó con sus padres en el comedor y ayudó a su madre a lavar los trastes de la cena. Le explicó a su madre que iba a hablar con su padre sobre el viaje y que era mejor que los dejara solos. Cuando terminaron, su madre se excusó para ir a leer un libro, dejando a su padre en la sala mientras este veía un poco de televisión.Sienna aspiró aire y salió para encontrarse con su padre. Este veía una serie en Netflix, por lo cual, Sienna la pausó y se interpuso entre la televisión y este. Vio como su padre arqueaba las cejas ante su interrupción.—¿Podemos hablar? —preguntó Sienna con educación.Su padre, quien era bastante alto, pero un poco obeso, ladeó la cabeza, mirándola con los mismos ojos mieles que Sienna había heredado de él. Era obvio que este sabía que era lo que Sienna quería hablar con él, pero se hacía el tonto. Si era así, Sienna tambi
*—Sienna:Ahora que había decidido quedarse en Seasons y renunciar a sus sueños.Con esta resolución, Sienna se dijo que iba a dar lo mejor de sí con lo que tenía en frente y que iba a aprovechar. Quizás podría estudiar negocios en la universidad, aún tenía tiempo y esto le ayudaría con la panadería. Investigaría para el próximo semestre ver si podía comenzar la carrera de negocios.Estaba planeado regresar a casa cuando sintió su teléfono volver a vibrar con una llamada, ya que tenía las notificaciones de los mensajes apagadas. Seguramente era Layla otra vez y debería tomarle la llamada para tranquilizarla. No quería agobiar a su hermana con sus problemas.Sacó su teléfono otra vez de sus vaqueros, pero se quedó sorprendida al verificar quién llamaba, pues no era ni Layla ni otra gente que la había llamado antes después de su escapada, era Diego.Sienna sintió ganas de llorar al ver su nombre en el identificador de llamadas. Habían pasado varios días desde que se vieron y hablaron qu
*—Sienna:Se movió y llevó la mano hacia el pomo de la puerta.Diego le había dicho que pintaba, dibujaba y que hacía otras cosas, por ello, Sienna tenía curiosidad por ver lo que hacía.Sienna hizo una mueca.No, no debería entrar sin su permiso, así que pasó por la habitación dejando su curiosidad atrás y se unió a Diego en la cocina en el momento que este terminaba la llamada. Vio cómo Diego le daba una larga mirada, pasándola por todo su cuerpo, seguro viendo que vestía su ropa y que la misma no le quedaba tan mal a Sienna.—Puse tu ropa a lavar —anunció Diego volviéndose hacia la encimera para luego tomar una humeante taza de lo que parecía ser chocolate instantáneo y pasársela—. Hable con Thiago y Layla para decirle que estás bien, ¿sí?—¡Gracias! —le agradeció Sienna tomando la taza que Diego le pasó. Olió el rico chocolate y le dio un suave trago. Estaba tibio y sabía muy bien—. ¿Quién te llamó para informarte sobre mi escapada? —quiso saber Sienna.—Thiago fue quien me llamó
*—Sienna:Se había dicho que no iba a dejarse llevar esa noche, pero luego de la conversación que tuvo con las chicas después de decirles rápidamente a estas todo lo que pasó y que iba a quedarse con Diego dicha noche, le hizo ser un poco traviesa. Rosé le incitaba a pecar y a jugar, mientras que Esmeralda le decía que no se dejara llevar de la mala influencia que era Rosé. Sin embargo, Sienna no era una niña y sabía hasta dónde podía detenerse y era por eso que fue un poco traviesa.Sienna se deshizo de los bóxers que Diego le había cedido antes y se quedó tan solo con la sudadera. Diego volvió poco después y notó que tan solo tenía unos shorts para dormir. ¿Acaso no tenía frío?, se preguntó, puesto que Sienna estaba congelándose allí y no había ni un ventilador o un aire acondicionado, quizás era el haber caminado mientras llovía que le estaba pasando la factura.Diego se unió en la cama poco después de apagar las luces del techo y encender una lámpara a su lado. Sienna sintió su cá
*—Diego:Su noviazgo iba bien, sus clases en la universidad iban bien, su trabajo con su padre iba bastante bien. Todo estaba marchando bien, tanto que Diego se sentía un poco incómodo, porque sentía que algo iba a pasar.Con su noviazgo, todo volvía a ser como antes. Cada vez que tenía tiempo libre, Diego iba a visitar a Sienna como antes. De vez en cuando se veían en la noche cuando esta iba a cerrar la panadería, pasaban un rato de calidad como pareja, hablando o besándose antes de que Diego la dejara en casa. Otras veces almorzaban juntos y los días, cuando no podían verse, se la pasaban hablando por mensajes o llamadas.Tenían planes para su próxima cita, la cual sería el día de su cumpleaños dentro de dos semanas. Sienna había descubierto que su cumpleaños venía por ahí y que aprovecharán el momento para celebrarlo en pareja. Diego estaba emocionado por ello, puesto que era la primera vez que pasaba dicho día con alguien que no fuera sus amigos o su familia. Así que se imaginaba
*—Diego:Cansado, Diego cerró su portátil y lo colocó a un lado. Era algo que siempre hacía cuando su padre se enfadaba con él, pues temía que le diera por lanzar cosas y que tirara su portátil que le había costado su dinero. Lo había comprado con el dinero que ganó vendiendo su arte en internet y este era muy preciado para él.—No arruine la reunión y al final todo resultó como querías que fuera —respondió Diego con tranquilidad mientras lo miraba—. El cliente decidió comprar más de la cuenta y contrató servicios extras, ¿y dices que arruine la reunión por no responder una pregunta de la cual no tenía idea? —Diego movió la cabeza—. ¿Qué más querías que hiciera?—Quería que estuvieras al 100 en la reunión, pero eres tan idiota que ni siquiera un 10 de tu capacidad estaba en la misma —espetó su padre siendo bastante grosero con él.Era siempre lo mismo, la misma cantaleta de la mayoría de los días. Su padre se quejaba de que había arruinado cosas, de que no prestaba la atención necesar
*—Diego:Estaba perdido entre el dolor y el mareo que el golpe le provocó.Diego trató de enfocar su vista, pero el mareo estaba haciendo mella en él. Sin embargo, sintió como su padre lo movía y luego lo sentaba en uno de los sofás. La gran mano de su padre le acunó la mejilla afectada y Diego siseó de dolor. Estaba lastimado tanto por fuera como por dentro y maldijo en su mente.—Diego, yo… —lo escuchó hablar y Diego abrió los ojos para enfocarlos en su padre ante él, quien tenía una mirada preocupada y parecía que el haberlo golpeado le había afectado.Diego empujó su mano y se puso de pie. Aún se sentía mareado, pero no quería estar más tiempo en este lugar. Era increíble que su padre le golpeara por haberle dicho la verdad. Sí, quizás le faltó un poco al respeto al hacerlo, pero no había dicho ni una sola mentira. Lo que más le molestaba era que se viera ahora como si el golpearlo le rompió el corazón. Quizás era la primera vez que le ponía la mano encima, pero con sus palabras y