Narra Olivia.Miércoles, 16, agosto, 2028.Me quedo un buen rato mirando la puerta de mi apartamento a Kai, hacia una semana que no nos habíamos cruzados porque me encontraba más ocupada en los regalos y la fiesta que le hare a mi bebé en la casa de Eli que es Kai, lo que me hace recordar que me he metido con él dos veces y debo trazar una línea a pesar de que en el hotel dije que volviéramos a ser amigos con derecho, sí, yo misma metí la pata, pero claro, como a mí me encanta ser masoquista.Más si el hombre es Kai.Y si, lo odiaba hace unas semanas pero sigo teniendo eso llamado “Deseos”.Lo dejo pasar con sus regalos y entra a la sala en donde deja casi todo, Kaia sale de su cuarto cuando cierro la puerta, miro la cara de mi pequeña cuando salta a los brazos de su padre agradecida con todos los regalos, un regalo por cada año, me siento en el sofá viendo la escena, ambos se sientan en el piso comenzando a abrir cada regalo, quisiera tomarle foto ya que nunca se tomaron una foto y l
Narra Olivia.Jueves, 12, octubre, 2028.Reviso un momento el calendario y noto que han pasado casi 2 meses desde la última vez que me llegó el periodo, lo que significa que se me ha atrasado, miro hacia Kai que hace la última escena de la película en donde ha sido dejado por la protagonista, se le nota muy dentro del papel de protagonista, sigo mirando mi teléfono y lo apago suspirando, regreso la mirada a la escena y luego a la pantalla en donde se ve todo.Pero comienzo a sentirme mal y no hoy sino desde hace unos días, solo quiero que sea un resfriado y no lo que creo que sea, porque si es lo que creo que es, volveremos a pasar por lo mismo y no quiero lo mismo.— ¡Y…! ¡Corte! — grita el director, todos aplauden y me levanto, aunque Kai haya firmado la última escena, aún queda escenas por hacer con otros personajes, pero me alegro saber que estamos a nada de terminar por fin la película para que comience las ediciones. Salgo del estudio y veo a Oliver frente a su camioneta.— ¿Qué
Narra Kai.— Lo que nunca te pude decir… — me mira confundida — He estado enamorado todo estos años de una sola mujer, Olivia — la veo confundida sin saber de qué hablo, está por irse otra vez molesta — ¡Tú eres la mujer de la que he estado enamorado! — se detiene en seco de pronto dejando caer su sombrilla amarilla, no se mueve ni dice nada solo está en shock.Camino hacia ella, empapado por la lluvia me acerco a su presencia, la tomo de la mano haciendo que se voltee a verme, su cara esta mojada, la lluvia apenas y la está comenzando a bañar. No sé si llora o no solo nos miramos a los ojos de esta manera como si el tiempo se congelara que solo quedamos solo los dos.— Dime algo, Olivia — está por hablar se queda en silencio para después desvanecerse entre mis brazos preocupándome — Olivia, despierta… — la mueve pero no despierta lo que hace que la tome de brazos y corro al carro para llevarla a emergencia, con los nervios a mil, entro al carro y conduzco hacia el hospital más cerca
Narra Olivia.10 años después.Koloa, Hawái, Estado Unidos. Sábado, 27, noviembre, 2038.Termino de escribir el último capítulo de mi libro “El amor que pedí”, el segundo libro de “El amor que perdí” solo que este segundo libro, los protagonistas son la pareja secundaria del primer libro. Cierro la laptop y me estiro feliz de haber terminado un libro más, escucho un golpe en la puerta y me volteo a ver a mi pequeña niña de 17 años, Kaia ya era toda una adolescente, cada vez más parecida a su padre aunque sea blanca.— Vamos a cenar — dice y asiento dándome cuenta que se han hecho las 7 de la noche, me levanto y salgo de mi pequeño estudio, bajo las escaleras y me acerco al comedor frente a la cocina en donde veo a Kai poner un plato en la mesa.— Paella, paella, paella — aplaude Kane y a su lado su gemela Lilo, ambos de 10 años, morenos igual a Kai pero con mis ojos ámbar. Me siento, Kaia revisa su teléfono y luego nos mira cuando Kai se sienta en la mesa.— Bien, vamos a agradecer p
Nueva York, Estados Unidos. Miércoles, 5, julio, 2028.Abro mis ojos y me veo reflejada en el espejo mientras terminan de maquillarme para la entrevista en vivo, suspiro y estoy lista para levantarme tomando el papel con las supuestas preguntas que me harán en el programa, siempre estoy lista para lo que sea, no es mi primera entrevista, sé cómo se maneja esto. Un chico entra avisando que salimos al aire en 3, suspiro y salgo del camerino, me guían tras el programa y espero a que me nombre para entrar.— Hoy tenemos una invitada, con ustedes, Olivia García — el público aplaude y me indican que salga, salgo y saludo siendo recibida por el presentador unos años mayor que yo, lo saluda de beso en mejilla, no es primera vez que vengo a su programa, ni es la primera persona que me entrevista, podría decir que mi primera vez en televisión estaba muy nerviosa.Me siento y lo miro esperando que diga algo.— ¿Cómo has estado, Olivia? — pregunta y sonrío con elegancia cruzándome de piernas.— B
Narra Olivia.Koloa, Hawái, Estado Unidos. Jueves, 5, julio, 2018.Miro a mi madre y luego a la carretera junto al mar, no llevo ni una hora que he pisado Hawái y ya me ando arrepintiendo de haber ido a esa fiesta en Valencia, vuelvo a mirar a la castaña con el ceño fruncido, prácticamente mostrándome que está muy enojada.— Mami… — no me responde, suspiro y vuelvo a intentar — No era necesario que me trajeras al otro lado del mundo… te juro que…— Nada, ya estamos aquí, te quedaras aquí a pensar en lo que hiciste en Valencia, tu padre y yo estamos muy molestos — habla enojada sin dejar de mirar a la carretera.— Bien, sé que me porte mal, debí hacerle caso y no haberme escapado al punto de parar en la estación de policía — admito derrotada, ella asiente — ¿Pero por qué me traes a Hawái? — pregunto curiosa.— Papá es de aquí, tu padre tuvo una gran idea y que mejor que te quedes con los Kiyosaki — frunzo el ceño, se estaciona delante de una casa que reconozco un poco, bajo del carro v
Narra Olivia.— Olivia, despierta… Oli…Siento que alguien me sacude y empiezo a toser sintiendo mi boca salada, abro mis ojos viendo la arena, respiro con dificultad, sigo vivo, gracias a Dios sigo viva.— Dios, Olivia, ¿Por qué no me dijiste que no sabes surfear? — escucho a mi lado, alzo mi mirada mientras me siento bien y veo la cara de preocupación de Kai — Por poco te mueres ahogada — río un poco y parece molestarse aún más — No es gracioso — dejo de reírme y me abraza.— Estoy bien… — siento mis mejillas calentarse, se separa y me mira a la cara.— Tienes que decirme todo, si no sabes manejar, si te da miedo las alturas, si eres alérgica a algo, todo, Olivia, entre en pánico cuando te caíste de la tabla y no saliste a la superficie al minuto — asiento a lo que dice suspira levantándose y ayudándome a levantar — ¿Puedes caminar? — asiento sin decir nada, entramos a la casa y cada quien se va a su cuarto, me baño.Duro un buen rato ahí hasta que escucho la voz de Kai llamarme par
Narra Olivia. Miro la noche estrellada mientras escucho como cuentan una historia en hawaiano, puedo sentir la emoción y el suspenso pero no entendiendo lo que dice porque no entendiendo el idioma del todo, todos están sentado frente a la fogata escuchando al chico hablar, tomo de mi lata de cerveza mirando la llama, Kai está sentado a un lado de la morena y sí que es bonita, es de su propia nacionalidad y ambiente.Puedo notar que todos se conocen entre todo y siento que no encajo aquí, no entiendo el idioma, todos se conocen y estoy sola, me levanto sintiendo frio a pesar de tener la camisa de Jared quien se alejó de mí sin motivo alguno, tomo mis converses y me alejo de ahí, quien podría darse cuenta de que falto. Ahora puedo decir que haber venido aquí si se siente como castigo.Estoy alejada de mis amigos, de mi cultura y mi ambiente a pesar de que es el mismo cielo y el mismo mar, sigo caminando hasta que por fin logro llegar a la casa, me siento en la arena mirando el mar, sin