Dan se posiciona en la entrada húmeda y palpitante de Alfa, ella cruza sus piernas en su espalda, se deja besar con ternura, mientras el hombre, su hombre, entra lentamente en ella.
Es el pvto cielo, para los dos.
Ninguno de los dos ha sido un santo, aunque Dan lleva un par de meses en sequía por culpa de esa condenada mujer que lo tiene rogando no quedar en ridículo. En cambio, Alfa, hasta hace unos días seguía disfrutando de Matías.
Alfa sabe que esto se le volverá adicción, porque este hombre sabe lo que hace, y lo hace muy bien.
Sus paredes tratan de resistirse, pero ese pedazo de carne se abre paso con delicadeza, eso no quiere decir que no le duela o que no lo esté gozando.
Es como si Dan quisiera que su cuerpo lo recuerde milímetro a milímetro. Así va a ser imposible que quiera estar con otro, porque desde ahora ya no volverá a ser lo mis
-Dan, no…-Déjame ayudarte – insiste Dan, tomando sus manos y hablando muy en serio -, mientras antes salgas de esto, más rápido podremos estar juntos sin tantos obstáculos...-¿También eres de los que quiere sacarme de esto para vivir felices para siempre? – le pregunta ella molesta, hace el intento de pararse, pero él la detiene -.-No, yo no he dicho eso. Pero es evidente que puedo ser una gran distracción a tu propósito, prefiero ser una ayuda en lugar de eso.Alfa se muerde el labio y se queda mirando a Dan a los ojos.Es el primero que se interesa en saber por qué se metió en esa vida, es el primero, luego de Díaz, que quiere ayudarla. Y es el primero en reconocer que es una distracción para sus propósitos.Dan no es tonto, pero es un hombre enamorado.Y un hombre enamorado siempre será una di
Con la insistencia de Dan para ir a almorzar, Keylen se esperaba un restaurante elegante o al menos casual, ya que ninguno de los dos estaba vestido para uno elegante.Pero lo que nunca se esperó fue llegar a Gray’s Papaya.-¿Es una broma? – el tono de Keylen no es de molestia, es de sorpresa dura y concisa -.-No y espero que te gusten. Son mis favoritos.-Pues tienes suerte de que me gusten o tendrías un balazo en el pie – su tono es de alegría, pero Dan sabe que es muy cierto lo que la chica le está diciendo -.-No puedo creer que no te saques esas armas de encima ni para un día casual.-Ni la placa, nunca sabes cuando puedes necesitar alguna de ellas o las dos.-¿Has tenido que mostrar tu placa alguna vez, por algo estúpido?-Sí… - Keylen se ríe de solo recordar -. Una vez necesitaba entrar al baño de un bar,
Despertar con el aroma de la mujer que ama es la gloria misma, por eso cuando su amigo se despereza contra las nalgas de Keylen, él no se mueve ni un poquito.Pero ella… solo pega más sus nalgas contra aquella dureza y es la invitación para despertar como se debe: con un buen orgasmo, con gritos y gemidos de por medio.Se visten con tranquilidad, se beben una taza de café y Dan la lleva hasta su departamento, para que pueda cambiarse de ropa sin problemas. Si se debe decir para quién es más importante esa mañana, sin dudas es para él.Se despide de ella con un tierno beso en los labios que le saca un suspiro a Keylen, algo que no se imaginó por nada del mundo.-Te llamaré si tengo al importante sobre Bowman.-Gracias… - se baja del auto, pero antes de cerrar la puerta le dice con una sonrisa coqueta -. Y si me llamas por cualquier otra cosa, no me voy
-Díaz, tenemos trabajo.Es todo lo que le dice cuando corta la llamada con Dan y los dos salen de la oficina para ir a la sala de recreación de los hombres que se quedan de guardia.En cuanto entra, todos se ponen de pie y se quedan en silencio, esperando a que ella dé las indicaciones.-Hoy, cerca de las nueve cuarenta y cinco de la mañana, tuvimos un accidente, cuatro vehículos involucrados, un camión sin frenos impactó un vehículo menor, donde iba una embarazada y su chofer.“Un camión recolector impactó a dicho camión, provocando que la colisión fuera en la cola del auto, pero de todas maneras generó impacto en la embarazada, además de dejar el vehículo atrapado contra un contenedor de basura.“La policía determinó que fue provocado, porque los frenos fueron cortados limpiamente, un hombre sospechoso e
Los días fueron pasando, Luz despertó, se supo que fue Darcy Pines quien intentó matarla y ya estaba tras las rejas. Esa parte de la historia estaba lista y zanjada para todos, menos para Alfa, que le había seguido el rastro a Joseph, por lo que sabía que Gamma, uno de sus amigos y mejores colaboradores la había traicionado. -¿Qué esperas a exterminarlo? – le pregunta Díaz aburrido de verla pasear de un lado para otro -. -No lo sé… tal vez que se arrepienta o que algún narc0 le dé un tiro por meterse en su territorio. -Eso no va a pasar, porque no es él quien hace las transacciones – Díaz se pone de pie y la sostiene por los hombros -. Pero eso no es lo único que te preocupa, habla. -Méndez me besó… - Díaz la mira con los ojos abiertos, porque creía que lo de Abbot iba en serio -, se supone que al fin iba a terminar con él – deja escapar un bufido de frustración pura -. Pero me pidió la despedida y se lanzó a besarme, sin que pu
Luego de dejar instalados a sus agentes, Alfa se va de allí con un cansancio general. Conduce hasta su departamento para una ducha y luego su cama, pero por alguna razón termina en el departamento de Dan. Mientras sube en el ascensor, apoya la cabeza en la pared y piensa que lo mejor es ir con la verdad, que lo que suceda después de eso ya serán las consecuencias con las que tendrá que lidiar. Una vez se abren las puertas, en lugar de abrir de manera forzada, busca la llave escondida bajo una piedra en la enorme maceta que está en el pasillo. La deja en el mismo lugar y luego entra, deja la pechera con las armas y su chaqueta en el perchero de la entrada, para luego irse a la habitación, que está vacía. Se recoge en cabello, se quita la ropa y se mete a la ducha, seguro que su hombre lo está pasando de lo mejor o está tratando de arreglar el mundo para su amigo. Coge una toalla, se seca y sale a la habitación otra vez, busca una playera de Dan
Como cada día, cuando Alfa llega a la nueva base, pasa directo a la sala donde Joseph está encerrado.Al abrir la puerta, el hombre de ojos azules mentirosos la mira y le sonríe.-Hoy tampoco quiero decirte nada, así que mejor date la vuelta.Pero hoy no es como los otros seis días que lleva allí. Una semana sin que Gamma, Joseph, la Rata, no haya querido decir nada y que Alfa no aplicara sus métodos de “extracción de información forzada", están llevando a murmurar a los pocos leales que le quedan.Así que cuando ella le muestra el bastón eléctrico que lleva en la mano y lo deja en la mesa, él la mira con una mezcla de incredulidad y miedo.-Tú no me harías eso… somos amigos, nos conocimos en la academia… ¡Tenemos una historia juntos!-Lo que yo sé – responde con tranquilidad, sentándos
Cuando Joseph abrió medio ojo cerca de las cuatro de la tarde del día siguiente, le dolía todo, pero no tuvo tiempo de quejarse, porque Alfa ya estaba sentada frente a él, esta vez con una manopla se acero en cada mano.-Bien, mi querido amigo, ayer me diste información incompleta sobre Darcy Pines.-No sé nada más… - un golpe certero en la mandíbula lo hace gemir de dolor y la mira con odio -. Está en una fábrica abandonada.-¿Por qué allí?-Porque es uno de mis escondites, allí estaba reuniendo armamento para mis muchachos… - sí, era mejor cantar antes que lo obligara con otro golpe de aquellos. Esa condenada mujer pegaba realmente duro -. Le dije que nadie iba allí, excepto yo de vez en cuando.-Perfecto, me vas a decir exactamente dónde, porque me temo que voy a tener que ir a arreglar tu desastre.