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El Alfa despiadado y su conejo
El Alfa despiadado y su conejo
Por: Hotori
Capítulo 1. Emprendiendo el vuelo

"Me gusta tanto que no me gusta que les guste a otras personas. Es un amor así celoso..."

Jorge Luis Borges.

- Pasajeros del vuelo 422 con destino a Berlín favor de dirigirse a la sala de abordaje--- Pasajeros del vuelo 422 con destino a Berlín favor de dirigirse a la sala de abordaje-

-Ese es mi vuelo, mommy es hora de irme- digo mientras me paro del asiento y abrazo fuertemente a mi madre, una parte siente una gran emoción, pero no puedo dejar de sentir esa sensación de pesar, como si nunca más fuera a volver a verla. 

-Cuídate mucho bebé, recuerda que tus abuelos y yo te amamos y que estamos muy orgullosos de ti- dice con voz un poco llorosa, sin dejar de abrazarme

- Jamás lo olvido, apenas llegue les marcaré- beso en la frente a mi madre-Por favor mamá, no te excedas, y trata de descansar.

-Hay hija, sabes que no puedo estar sin hacer nada, me gusta mantenerme entretenida, y ahora mucho más porque ya no estarás con nosotros…

-Lo se mamá, bueno, es hora de irme, te amo, no me extrañes mucho - tomo mi mochila, la vuelvo a abrazar y camino hacia la sala de abordaje. 

Mi nombre es Noah, cumpliré 24 años el próximo 06 de septiembre, mi vida siempre ha sido muy tranquila, y a pesar de que mi padre falleció antes de que pudiera caminar, he tenido una vida feliz con mis abuelos y mi madre, vivimos en un lugar llamado San Cristóbal de las Casas en México, mi familia se ha dedicado a trabajar el campo, gracias a sus esfuerzos y dedicación soy una antropóloga.

La razón por la que estoy dejando mi familia y a mi tierra durante los próximos seis meses es porque recibí una invitación para formar parte de un proyecto en Alemania que busca la preservación de lenguas indígenas en toda América, sé que suena muy complejo, pero es la primera vez que me voy tan lejos y por tanto tiempo, sin embargo, guardo en mi corazón la emoción de regresar lo antes posible con mi querida familia. 

(***)

El tiempo en el avión paso tan rápido, aun no lo logro procesar que estoy en Alemania, me asomo por la ventana de mi asiento, y lo único que puedo pensar es que estoy en un mundo diferente, estoy tan meditada en mis pensamientos, que no me doy cuenta que la gente ya empezó a bajar, así que me apresuro a tomar mi mochila para seguir a los pasajeros que compartieron el vuelo conmigo.

Paso por el área de migración, y estoy a punto de dirigirme a buscar mi equipaje, cuando me llama la atención un chico rubio y alto sosteniendo una pizarra blanca con mi nombre escrito en el, sin embargo, antes de que pudiera reaccionar, el joven se acerca a mí y me sonríe como si me conociera…

-Hola, usted debe ser la antropóloga Noah Cirian- levanta una ceja y entrecierra los ojos como si estuviera analizándome- mucho gusto soy Andreas Scheck, y he venido a recibirla. 

-Mucho gusto Andreas, wau no pensé que en realidad se tomaran la molestia de enviar a alguien a recogerme- no puedo evitar ponerme nerviosa- antes de que muchas gracias- extiendo mi mano- espero que podamos ser buenos compañeros- sonrío y el me devuelve la sonrisa mientras nos damos un apretón de manos. 

-Claro Noah, bueno es hora de irnos un auto espera por nosotros para ir a tu departamento a instalarte- Toma mi maleta y yo lo sigo hasta la salida.

(**)

Miro un tanto abobada el departamento en el que viviré los próximos seis meses, parece sacado de catálogo, las paredes están pintadas de blanco y mezcladas con tonos grises, los muebles se parecen como si jamás hubieran sido utilizados, y hasta cierto punto es muy excesivo para mi gusto, pero tampoco me quejo, ya que es una oportunidad valiosísima. 

-Bueno Noah, ésta será tu casa, siéntete libre de hacer lo que gustes en ella, antes que nada, en la mesa hay unas carpetas y un manual en donde se explica tus funciones y en que consiste el proyecto- dice caminando hacia la puerta mientras se pone su gabardina café.  

- Muchas gracias otra vez Andy, nunca imagine que la Universidad se tomara tantas molestias- digo un poco apenada. 

-Ahh bien, es que no es la Universidad, el proyecto se está realizando por conducto de ella, pero en si es el benefactor o más bien su compañía la que está financiando no solo el proyecto sino también que todo el personal se encuentre cómodo durante su estancia en el mismo, es algo bastante complejo, pero a medida que avance el tiempo te darás cuenta de cómo funciona esto-

-Ya veo, aun así, gracias Andy, estoy segura que vamos a lograr muchísimas cosas con este proyecto, la verdad si me gustaría tener la oportunidad de conocer al patrocinador, he leído que apoyo muchísimo al ámbito de investigación, imagino que es una persona muy culta. - digo sonriendo.

-Por supuesto que lo harás, tendremos una fiesta de gala para hacer público el proyecto- Es lo último que dice antes de guiñarme el ojo e irse.

Me acerco a la mesa de vidrio para ver toda la documentación, pero me topo con una carpeta con un emblema de algo que parece el perfil de un lobo, así que la abro y me topo con toda la información de la empresa que está financiando el proyecto, parte de la información contenida en dicha carpeta ya era de mi conocimiento, pero jamás imaginé las dimensiones ni el alcance de este proyecto. 

La curiosidad me ganó, así que googleo el nombre de la empresa del benefactor, sin embargo, no puedo evitar quedarme estupefacta. 

Decir que una empresa se queda corto, esto es un conglomerado llamado Volkan.Inc que no solo se dedica a la extracción y refinamiento de hidrocarburos, sino que también, a la producción de alimentos, vinos y autos de lujo; su presidente y accionista mayoritario se llama Demian Alexandrei de Volkan y en su mini reseña menciona que tiene 34 años.

 Suspiro, sé que esto es un gran proyecto, y tengo que dar todo de mí, pero por alguna razón, la fotografía de esta persona me causa una rara sensación en el estómago. Siento como si lo hubiera visto en algún lugar, probablemente, tal vez lo abre visto en la televisión o periódico, pero aun así tengo ese extraño presentimiento. 

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