Llevo el prisma de tus ojos

En mi casco de astronauta

Y la tímida aurora de tus células

Y todas las noches bajo la vía láctea

Parecen eternas si tú no estás

Todas las noches, desde mi ventana

Conjuro tu nombre inmortal…

Zoe- Via láctea. 

-…pero Alpha- otra vez ese estúpido, ¿acaso es muy difícil darme lo que quiero?

-Ya te dije que no me interesa, no pienso quedar como un Alpha débil por ti. - estoy tan enojado que siento la necesidad de romper o golpear algo- Tienes dos horas para darme una propuesta realista y que me dé resultados inmediatos - cuelgo el teléfono y lo tiró a la mesa, con la toalla comienzo a secarme el sudor.

-Amor- la voz empalagosa de la rubia me estresa también, entra al gimnasio solo con un babydoll

-Ivanka, pensé que ya te habías ido- sin hacer contacto visual miro la hora de mi reloj, al paso que voy, a duras penas llegaré a tiempo para el evento de Eymy, seguro va a gritarme otra vez. La rubia sexy camina hasta a mí y comienza a besar mi cuello.

-No amor, te dije que tenía todo el día para consentirte, en dos semanas me iré a Francia- mete una de sus manos dentro de mi playera.

-Bien, supongo que un desestrés rápido no me caería para nada mal- me quito la playera y ella empieza a quitarse lentamente el babydoll, un polvo de vez en cuando no está mal, me digo a mí mismo antes de empezar a besarla y a penetrarla sobre el suelo del frío gimnasio, no me importa como de sienta, al final yo no siento nada por ella, esto es solo sexo.

(***)

- ¿A dónde vas amor? - dice la rubia somnolienta y con el cabello hecho un lío. 

-Tengo que asistir a un evento de Eymi- me abrocho la camisa blanca, y la rubia sale de la cama desnuda para abrazarme por la espalda. 

-Amor entonces- besa mi espalda- ¿Puedo ir contigo? - suspiro, no tengo ganas de ir, pero al menos será una buena distracción si ella me acompaña. Odio tener que ir a ese tipo de eventos, sino fuera por el perfil que debo mantener por mi familia, jamás me aparecería a alguno. 

-Tienes 20 minutos- sin pensarlo dos veces la rubia entra corriendo al baño, y conociéndola, seguramente llegaré tarde. 

(***)

Todo el camino hasta el salón ha sido aburrido, Ivanka no piensa más allá de los que sus ojos pueden ver. Sino fuera por su cara bonita, definitivamente no estaría con ella. 

-Señor hemos llegado-

-Gracias- abro la puerta del auto y la ráfaga de flashes comienzan su ataque, ayudo a Ivanka a salir del auto y como buen caballero le doy la mano para que ella camine junto a mí. 

-Señor Volkan, últimamente se ha visto en varios eventos con la modelo Ivanka Jordan, ¿Ya es una relación formal? – Otra vez las mismas preguntas, estos humanos son una molestia. Ignoro cada pregunta hasta llegar al salón, es hora del show. Apenas abren las puertas, siento una especie de ráfaga electrónica recorrer cada centímetro de mi piel, el corazón comienza a bombear a mil por hora ¿Qué demonios? Apenas puedo procesar esto cuando un olor peculiar llega hasta a mí, siento como mi lobo interior está a punto de tomar el control, jamás me había pasado algo así.

-Amor ¿Qué te pasa? Los invitados nos están viendo- por alguna razón siento la necesidad estúpida de buscar ese olor, trato de calmarme y comenzamos a caminar hacia el estrado. Las luces de las cámaras y los aplausos de las personas están comenzando a molestarme, siento como la sangre se me sube a los oídos casi como una presión por buscar ese olor.

En ese momento me quedo hecho piedra, mis piernas no me responden, siento como el corazón está a punto de salirme del pecho y la sensación de ansiedad se vuelve descomunal, sino logro tranquilizarme, definitivamente esto va a terminar mal. 

Entre la multitud, mis ojos se enganchan a los de aquella chica morena, siento como si el mundo se hubiera detenido, mi lobo interior está a punto de salir, y dice a gritos ¡ES ELLA!

Aquel contacto de segundos, se rompe cuando llegó al estrado y comienzo mi discurso, a medida que avanzo con él y enfrió mis instintos me doy cuenta de algo. Ella es humana ... M*****a la hora en la que accedí a venir a esta estupidez de Eymi, m*****a la hora en la que tuviste que nacer siendo humana. Una irá irracional me llena, una parte de mi la quiere cerca y otra la desprecia por ser lo que es.

Mi parte lógica reniega totalmente que esa mujer sea mi otra mitad, habiendo tantas mujeres, ¿tuvo que ser ella?

-Agradezco mucho su apoyo en la campaña, los republicanos nos estaban pisando los talones en la contienda- ni siquiera puedo prestar atención a lo que este hombre dice, no puedo dejar a ver a la chica morena, tal vez ella no se dé cuenta pero con ese vestido rojo, llama la atención de todos, mi cabeza no deja de hacer películas mentales sobre todo lo que puede haber debajo de ese vestido. Sale del salón, y por inercia voy detrás de ella. 

Estoy recargado en la pared, esperando que salga del baño, quiero oír el sonido de voz por alguna extraña razón. Al abrir la puerta mi lobo interior me controla, tomo su brazo y la jalo frente a mí.

-Te encontré conejita-no sé en qué demonios estoy pensando- acerco mi cara a su cuello y lo beso, estoy tan perdido en mis instintos que no se qué estoy haciendo- hueles como el cielo- beso su cuello.

-Suélteme por favor- su delicada voz es arte para mis oídos, aún no he probado a esta mujer y ya siento que soy adicto a ella, es como si fuera heroína. Mi instinto se sale de control, muerdo su cuello mientras la chica cae desmayada en mis brazos. En ese momento recuperó la poca conciencia que me queda. Perfecto Demián eres el imbécil número uno, acabas de marcar a una asquerosa humana.