Cuando trabajé para la familia Walker, realmente fue una gran oportunidad para mí. A pesar de ser una simple muchacha de servicio, poco a poco me gané la confianza de la familia y obtuve muchos beneficios para mí y mi familia. Desafortunadamente, todo se fue al diablo en el momento en que puse mis ojos en el heredero de la fortuna Walker, y aquel lugar lleno de beneficios se convirtió en mi infierno personal... salvo por una persona.En realidad, tampoco apoyó mi relación con Logan, pero jamás fue una arpía conmigo, ni me juzgó como lo hicieron los demás. Siempre me trató bien... por eso le tenía un poco de cariño.Olivia Walker.La abuela de Logan.La persona con más poder en esa familia, la mujer que decidió que Logan fuera su sucesor.—Abuela. —Por primera vez, desde que llegamos, Logan suelta mi mano y se apresura a abrazar a su abuela, quien lo recibe con una pequeña sonrisa— Creí que aún seguías de vacaciones. ¿Cuándo llegaste?Ella se encoge de hombros y se separa de su nieto.
—Pienso que podremos organizar todo en un mes. Mi abuela conoce a muchísimas personas, así que no tendrás que preocuparte por nada de la boda. —Logan acariciaba mis nudillos con una delicadeza casi extrema mientras conducía con tranquilidad. Íbamos a buscar a Liv, aunque ya era un poco tarde— Estoy tan emocionado; finalmente podré verte vestida de novia. Estoy seguro de que te verás hermosa, y ni hablar de Liv; ella será una princesa ese día...—Logan...No puedo respirar.Por más que lo intento, no puedo. Todo esto era una locura y ni siquiera se habían molestado en conocer mi opinión. ¡Veinte malditos minutos hablando sobre una boda en la que nadie pidió mi opinión!¿Acaso no importaba?—No te preocupes por lo que dijo mi abuela. Realmente no me importa si se te nota o no el embarazo...—Logan...¿Cómo es posible que no me escuche?—A mí solo me importa el hecho de que nos vamos a casar y que...Suficiente.—¡Logan! —Exclamo con fuerza, tomando por sorpresa al pelinegro, quien tiene
—¿Estas serán suficientes? —El hombre con una enorme sudadera negra, pantalones de deporte del mismo color, zapatos deportivos llenos de lodo y una vieja gorra de los Yankees, mojada con algunas gotas de lluvia, me entrega un sobre con varias fotos dentro.Una sonrisa victoriosa se dibuja en mi rostro al ver el contenido; era justo lo que necesitaba.—Están perfectas. ¿Has encontrado algo más? —Pregunto, recordando lo que le había pedido con anterioridad.Sin embargo, la actitud llena de inseguridad del hombre me hace dudar. ¡Maldición!—Ambos están limpios, no hay nada que los incrimine. —Ruedo los ojos, decepcionada por no haber encontrado algún secreto jugoso. Esa maldita ha sabido cubrir muy bien sus huellas— ¿Quieres que los siga vigilando?—Sí, y recuerda ser sigiloso. Ese bastardo está muy bien resguardado; seguro también la tiene bien vigilada. —Hablo con voz dura, el tono implacable que había cultivado a lo largo de los años. Sabía que esos dos no se separarían ni un solo seg
—Te ves hermosa, Larissa.Mientras me miro en el espejo, siento un extraño sentimiento de nostalgia crecer dentro de mí. Una de las chicas encargadas de arreglarme se acerca con un delicado velo de tul suave, con elegantes aplicaciones florales con lentejuelas y florecitas de tul en la parte final del velo. Se coloca detrás de mí y adorna mi cabello con tan delicada pieza.Cuando finalmente soy capaz de verme vestida por completo, me quedo en shock. Jamás creí estar vestida de esa forma alguna vez. Me sentía como una princesa.—Serás la novia más hermosa, Larissa. —Me giro y le muestro a todos mi vestido de novia por completo. No sabía cómo rayos lo había hecho, pero la señora Olivia había logrado una cita en una distinguida tienda de novias y por ende un hermoso y lujoso vestido color blanco y corte princesa, bordado con miles de cristales y perlas, en tiempo récord.Ahora mismo estábamos en mi última prueba antes de la boda. Dos semanas se habían pasado volando y aunque me encantarí
—¿Estás lista? —Unos suaves toques en la puerta llaman mi atención.Me giro para ver a Logan, perfectamente vestido, y me esfuerzo por sonreírle. Se suponía que ambos iríamos al bautizo de la hija de Yinah, pero yo no estaba muy segura de acompañar al pelinegro.Sí, ella me había invitado, pero eso fue antes de todo el drama con Logan. Se lo había mencionado, pero él me aseguró que no habría problema con mi presencia. Aun así, no estaba demasiado segura.—Sí... ¿Me veo bien? —Me levanto del taburete y él sonríe al verme modelar mi vestido verde salvia tipo corset, sin tirantes, corte A, hasta el tobillo, bordado con flores de ciruelo por todas partes.Era una preciosidad. Me sentía como una princesa. Unos lindos y delicados zapatos de tacón aguja, bajos y puntiagudos, adornaban mis pies. Mi cabello recogido en un moño al descuido, con algunos mechones sueltos, y mi maquillaje al mínimo. En cuanto a la joyería, me había decidido por unos diminutos aretes de brillantes, casi invisibles,
—Vaya, Larissa... —Yinah aplaude con lentitud a la vez me escaneaba de arriba a abajo, siempre con desdén. Es tan diferente a la Yinah que conocía—. Te ves bien... Casi no pareces la roba novios que eres.Suspiro, cansada de este tema.—Yinah, no quiero problemas. Solo vine a la fiesta porque Logan...—Logan, Logan, Logan. —Mi antigua amiga rueda los ojos, harta de escucharme—. La verdad, me sorprende que ahora tomes en consideración a Logan, cuando siempre fuiste tú la que lo excluyó de todo. ¿Ahora sí le haces caso? ¿Por qué será? Creo que tengo una idea... ¿Tantas ganas tienes de quedarte con su dinero?¿Qué?—No tengo tiempo para esto. —Intento pasar a un lado, pero ninguna se mueve, así que me toca regresar a mi posición inicial. Afortunadamente, el espacio era bastante amplio—. Déjenme pasar. Chicas, estoy cansada y no quiero problemas. Ya es suficiente.Hago el mismo intento de salir, pero ninguna parecía querer ceder.Lo sabía.Sabía que venir a esta fiesta solo me traería pro
—Miau. —Casi me atraganto con el jugo de fresas al escuchar a mi mejor amigo maullar frente a todos en el restaurante.¿Será que alguna vez podremos salir sin que me avergüence públicamente?Después de varios días sin verlo, finalmente teníamos unos minutos para reunirnos y ponernos al día. Realmente extrañaba las excentricidades de Evan.—No maúlles, idiota. Lo que te estoy contando es bastante serio. —Intentaba atraerlo de nuevo a la realidad, pero él no parecía querer salir de su mundo lleno de bromas interminables.No sería él si lo hiciera.—¿Me pregunto si debería enviarles un paquete a cada una con unas orejas de gato y una cola peluda? —Hago una mueca de desagrado al escucharlo hablar, lo que lo hace reír—. No pienses en otra cosa, pequeña pervertida. Lo digo porque quieren pelear contigo, no les hagas caso. Solo se sienten frustradas; ya se les pasará.—Yo no pensé en nada malo, idiota. —Me defiendo.—Sí, claro... Por tener la mente tan virginal es que estás en la espera de t
—Larissa, responde. —Logan no me estaba gritando, pero su tono de voz denotaba un profundo disgusto.Demasiado, diría yo.—Oye, hermano, cálmate. Creo que estás imaginando cosas que no son. —Evan interviene, tratando de calmar la situación, pero Logan se mostraba aún más serio.Incluso podía ver cómo apretaba sus puños con fuerza. Esto podría salir muy bien o muy mal.Maldición.—Estoy hablando con Larissa. —Le responde con firmeza, lo que lleva a mi amigo a levantar ambas manos en señal de rendición. Luego, el pelinegro clava sus ojos en mí, pero había algo en su mirada que me hace hervir la sangre—. ¿Larissa?¿En serio?—¿Realmente estás haciendo esto, Logan? ¿Después de todo?—Dímelo tú. Estás aquí, a solas con este hombre. Flores, chocolate... Larissa, no soy ingenuo.Pues yo creo que sí.Un intenso fuego comienza a arder dentro de mí, amenazando con consumirlo todo a su paso.—Entonces, te pregunto lo mismo... ¿Qué haces aquí con Haylee? ¿Ahora te reúnes con tu ex?Aquella pregun