CAPITULO 40

El amanecer llegó, Jhon dormía al igual que Rania enredada entre sus brazos, abrió los ojos y vio la salida del sol, se zafó del agarre de Jhon y se fue al pequeño puerto miró lo claro del agua que la invitaba a sumergirse en ella y así lo hizo.

Se lanzó al agua y Jhon la siguió lanzándose tras de ella.

—Te atrapé. —dijo Jhon tomando la por la cintura y pegando la a su regazo, Rania rodeó sus brazos en su cuello y lo besó tiernamente.

Rania enredó sus piernas al rededor de las caderas de Jhon, y poco a poco él se fue adentrando en su caliente interior y nuevamente se entregaron a su amor viviendo y experimentando los más exitantes y placenteros orgasmos.

Así pasaron cuatro días entregándose a su amor y regresaron a la hacienda, Rania sentía que habían pasado mil años lejos de su hijo nuevamente, disfrutó de su pequeña luna de miel y ahora estaban ahí en el jardín junto a Arielle y Dora.

—Me alegra mucho saber que estás más tranquila, te sentó bien esas pequeñas vacaciones. —habló Arie
Sigue leyendo en Buenovela
Escanea el código para descargar la APP

Capítulos relacionados

Último capítulo

Escanea el código para leer en la APP