En el coche mientras Mark iba conduciendo nos seguimos hablando, aunque me daba cuenta de que de vez en cuando mi marido me miraba, cuando llegamos a casa, me baje inmediatamente del coche y entré en mi casa dirigiendome hacia el dormitorio ya que estaba muy enfadada y sofocada. Entré en el cuarto de baño, me quité la ropa y entré en la ducha,ya que necesitaba relajarme como fuera y sintiendo el agua golpear mi cuerpo era la única forma. Cuando termine de ducharme, tape mi cuerpo con la toalla volviendo al dormitorio viendo a mi esposo sentado en la cama mirándome fijamente.— No doy crédito a tus acusaciones Mark — le dijeMark se quitó la chaqueta del traje tirándola con fuerza encima del sofá, acercándose a donde yo estaba muy acalorado.— Sofia eres muy ingenua, ese tío está intentando llevarte a la cama, ¿qué es lo que no ves?,--- me dijo— Si estas celoso, me agrada eso , pero no tienes ningún motivo para estarlo Mark y menos ahora que vamos a ser padres — respondí— Mayor razón
Cuando note que mi esposo ya se había quedado dormido, me levanté despacio de la cama para no despertarlo, ya que yo no podía dormir, baje despacio las escaleras acercandome a la cocina para hacerme un vaso de leche caliente intentando calmar mis nervios. Me senté en una de las sillas de la cocina para tomarme la leche, cuando en el silencio de la casa, se escucho la melodía de mi movil, me fui al salon con mi vaso de leche en la mano, cogi mi teléfono que lo tenía encima de la mesa viendo que era Liam quien me llamaba, por unos instantes pensé en no contestar, pero necesitaba hablar con alguien ya que me estaba ahogando por el estado de ansiedad que tenia, asi que conteste la llamada.— Perdona que te llame a estas horas, pero me he quedado antes muy preocupado por ti — me dijo— Hemos discutido mi marido y yo — le dije con mi voz temblorosa— Mark ha interpretado mal, la situación en la que nos ha encontrado esta mañana — respondió— Ya lo sé, pero es su problema, ya que se lo he ex
Esa mañana estaba con mi madre, ya que hacía tiempo que no nos veíamos y me daba lo mismo si Mark se enteraba, ya que estaba harta de que siempre pusiera el contrato que teniamos firmados, como excusa cuando teniamos alguna discusion, asi que por eso me fui a visitar a mi madre, aunque sabía que Mark me lo prohibió cuando nos casamos.— ¿Como estas con ese hombre, hija?¿te trata bien? — me pregunto mi madre— Si, no puedo quejarme mama, pero me duelen sus celos con mi compañero de trabajo, lo que pasa es que Mark, es un hombre orgulloso y obstinado además de que no sabe pedir perdón cuando comprende que se ha equivocado, es como si se imaginara que está amenazado por Liam, mi compañero y no se da cuenta de cuanto lo amo — le dije— Hija no se que teme la verdad, vais a ser padres y eso os debería uniros a los dos aún más — dijo mi madre— Y lo se mama, además es un hombre que tiene dinero, aunque eso la verdad que no me importa, tiene además una empresa millonaria y mucha influencia
Por la noche y después de dejar a nuestra hija dormida en su camita, entramos mi esposo y yo en nuestro dormitorio, me acerque a la cama donde ya tenía preparado mi camisón, me fui quitando la ropa sabiendo que Mark me está mirando aunque por su mirada no se exactamente en qué está pensando y tras unos minutos observando, Mark se abalanzo sobre mi, poniendome contra la pared, bloqueando mi cuerpo con su cuerpo, arrancando mi camisón, comenzando a besar mi cuello, a tocar mi cuerpo con sus manos, agarrándome fuertemente mis nalgas mientras no dejamos de besarnos apasionadamente. La lengua de mi esposo recorrio todo mi cuerpo y lentamente nos fuimos fundiendo nuestros cuerpos, dejándome llevar por ese momento de pasión y dejando que mi esposo lleve las riendas, mientras yo disfrutaba del momento.Al día siguiente, cuando me levanté de la cama, entre en el cuarto de baño para ducharme, cuando terminé, volví al dormitorio para vestirme, acercandome despues a la cocina, acercandome a l
Robert siguió moviendo a aquel pequeño aparato sobre mi vientre, apretando de vez en cuando algunos botones de la máquina, viendo mi esposo y yo que estaba muy serio y no nos decía nada. Cuando ya apagó aquella máquina, el médico se quedó mirándonos, dándome la enfermera una toalla para que me limpiara, volviendo Mark y yo a la consulta junto con el médico, sentandonos en las sillas, esperando a que el médico nos dijera cómo iba mi embarazo— Bueno Sofia, no te voy a engañar, hay que operar ese tumor cuanto antes, desde la última vez que te vi en mi consulta, ha crecido demasiado y el embarazo no va a ir a término si no te operamos primero el tumor, aunque no te puedo dar muchas esperanzas de que no vaya a dañar a vuestro bebe la operación, tendremos mucho cuidado, pero lo veo muy mal, lo siento — nos dijo— ¿Cuándo tiene mi esposa que ingresar? cuanto antes resolvamos el problema, será mejor para ella y para mi —- dijo Mark— La ingresamos a la semana que viene, ese carcinoma hay q
Mark siguio bloqueando mi paso con su cuerpo, aunque yo ya estaba excitada, sintiendo como tenia mis pezones muy duros y un cosquilleo caliente en mi sexo, que se humedecia mas con cada muestra de ardor de Mark. Mi corazón palpitaba a más de mil , mis rodillas me fallaban, mi piel estaba erizada por todo mi cuerpo y el deseo por abrir mis piernas para que mi marido hiciera lo que quisiera conmigo se iba intensificando, deseando que mi esposo me penetrara con fuerza. Me estaba mareando cuando note sus dedos sobre mi espalda, bajando la cremallera de mi vestido, desabrochando después el sujetador, bajando los tirantes por mis brazos dejando desnudos mis pechos, que empezó a morderme y a besarme inclinando su cabeza hacia mi, haciendo que arqueara mi espalda contra la puerta del baño. Mi respiración se entrecortaba, mezclados con los jadeos de mi esposo. Intente luchar, presionando contra sus hombros, respondiendo Mark abrazandome todavia mas fuerte, sus dedos recogieron la falda sobre m
Después de salir del dormitorio de nuestra pequeña, Mark y yo nos marchamos de nuestra casa, acercandonos hasta su coche, abriendo mi esposo la puerta del coche ayudandome a entrar en el, sentandose Mark en el asiento del conductor, arrancando enseguida el coche marchandonos de allí hacia la casa de Alice. Cuando llegamos mi marido aparco el coche, bajando los dos, acercandonos a la entrada de la casa,cogiéndole el brazo a Mark entrando en la casa de nuestra amiga recibiendonos ella con una preciosa sonrisa, abrazándonos las dos. Entramos los tres dándome cuenta de todos los invitados que habían, cruzando mi mirada con Liam, que en cuanto me vio se fue acercando hasta donde estábamos Mark y yo con una sonrisa en sus labios, sin dejar de mirarme— Por favor Mark, recuerda que estamos en la casa de Alice — le dije, al ver muy serio el rostro de mi marido, viendo como se nos iba acercando Liam a nosotros— Buenas noches señor Harris, permítame decirle que está preciosa su esposa — dijo L
Tres días después de estar en la fiesta que hizo en su casa nuestra amiga Alice, estábamos Mark, mi hija y yo desayunando en la cocina, cuando de pronto escuchamos la melodía del móvil de Mark, me quedé mirando a mi esposo, mientras el cogia su telefono para contestar a la llamada, marchandose de la cocinaCuando regresó después de unos minutos, pude darme cuenta en lo serio que estaba sin dejar de mirarme, — Era Roberto, esta tarde tienes que ingresar, la operación es mañana a primera hora — me dijoMe levanté de la silla donde estaba sentada, teniendo que correr para llegar al cuarto de baño cuanto antes ya que notaba que de un momento a otro iba a vomitar y no quería que mi hija me viera, viendo a mi esposo detrás de mí cuando ya me levanté del suelo, después de haber vaciado completamente mi estómago. Después de enjuagar mi boca y lavarme las manos, Mark rodeo mi cintura apretando mi cuerpo al suyo, me apartó el pelo de mi cara, buscando sus labios mis labios– ¿Te ha dicho algo