Cuando le dio al boton del mando del televisor y esta se encendió, mi hija se sentó, en su pequeño y cómodo sofá cerca de la televisión, sentandome en el sofá al lado de mi pequeña, me quede pensando y preguntandome en, que si quería que mi matrimonio con Mark fuera bien y conseguir que me amara como yo le amaba a él, o sería mejor olvidarme de que era su esposa y que fuera él solamente mi jefe como legalmente ponía en nuestro contrato, complacerlo cuando buscara mi cuerpo en la cama y dejar que el se complaciera cuando me deseaba. Aunque no quería convencerme de que eso sería lo único que habría entre los dos. cerré los ojos pensando en los preciosos ojos de mi marido, en los suave de sus manos cuando me acariciaban mi cuerpo haciendo que sintiera unas sensaciones que jamás pensé en que alguien me las hicieran sentir, abriendo mis ojos de golpe cuando la imagen de Melissa se agolparon en mi cabeza. Recordando en, cómo lo miraba ella, como le rozaba su antebrazo y como ella me sonre