—¿Cómo te sientes?— Cuestiona Darién preocupado, al ver a Marcos pareciendo una momia cubierto por vendas en la cama de la clínica.

—Como si me hubiesen golpeado entre diez hombre.— Balbucea Marcos con dificultad

—Lo siento acabo de hacer una pregunta estúpida.— Le responde Darién apenado.

—No, gracias por salvarme la vida, si tu no intervienes me matan ash.— Jadea del dolor Marcos.

—Era lo menos que podía hacer después de lo que hiciste por mi.— Suelta Darién.

—No fue por tiiii.— Responde Marco poniendo cara de dolor, esas palabras se clavan en el pecho de Darién.

El hombre frente a él es su rival, y de cierta forma piensa que se merece más a Miranda que el mismo, ya que el no ha podido protegerla de todo lo que le ha hecho Alma.

—Con la confesión que conseguiste, podemos sacar a Miranda el día de la apelación.— Le responde Darién, de pie frente a la cama.

—No te confíes, debes encontrar lo necesario para que Alma, no pueda seguir haciéndole daño a Miranda, debes protegerla estoy s