Mi nona se quedó a mi lado cogiendo mi mano, haciéndome a entender que estaba más nerviosa que yo,

el médico me puso el gel frío en mi vientre, pasando por encima después el pequeño aparato, poniendo el sonido, palpitando cada vez más fuerte mi corazón, cuando escuche los latidos del corazón de mi pequeño

— Mira Alice, hay puedes ver a tu niña, está bien de peso y las medidas son perfectas para el estado de gestación en la que estas

— ¿Son cuatro meses ya, doctor? Nona es una niña, no me lo puedo creer— pregunté ilusionada

— Si cariño una niña, y yo tengo que cuidar a dos niñas, mi vida — me dijo mi nona

— Si Alice, estás de dieciocho semanas, pero espero que vuelvas para la próxima revisión, por favor — dijo el doctor

— No te preocupes, que yo me encargare de que venga hasta que llegue el día del parto — contestó mi nona

Me limpie el vientre con una toalla que dio la enfermera, levantándome luego de la camilla despacio para no marearme, me arregle la ropa volviendo después a la cons