Siguiendo el consejo de su empleado, Noah se dirigió a casa de Arantza durante la noche. La había llamado al celular para pedirle que lo recibiera en cuanto llegara con la excusa de que extrañaba su amistad con ella.Concluyó que debía tratar de mantenerse cerca de Arantza tanto como fuera posible, pues ella podría decirle lo que necesitaba saber sobre Landon y obtener las piezas que faltaban para armar el rompecabezas.—Tiempo sin vernos —articuló Noah cuando Arantza le abrió la puerta.—Para ser honesta, me sorprendió tu llamada —alegó—. Después de nuestra última charla, creí que estarías molesto conmigo.—No negaré que me enfada que defiendas a Landon Parodi a capa y espada, pero trataré de no perder el control —expresó—. A decir verdad, no me agrada que discutamos, pero me inquieta que confíes tanto en ese hombre.—Sabía que las cosas no iban a ser igual entre tú y yo, pero, sinceramente, me duele que nos hayamos distanciado —declaró—. Sin embargo, no quisiera que mi comportamient
—Oh, vamos. No seas obstinada —insistió Landon.—Debiste consultármelo primero —regañó Arantza.—¿Qué tipo de sorpresa hubiera sido si te lo decía? —Mi jefe no tiene por qué darme sorpresas, ni obsequios —recriminó.—Esto no es un regalo de mi parte. Es un elemento de trabajo. Me encanta llevarte a casa y no tengo ningún problema en hacerlo cada noche, pero no he dejado de pensar en que te hacía falta tu propio medio de transporte. De esa forma, tú serás la que me lleve a las próximas reuniones de negocios. Incluso, podremos viajar en este vehículo y tú conducirás. Y lo del vestido… creo que la explicación sería redundante, ¿no? Quiero que me acompañes a un evento.—¿Buscas hacerme creer que este coche corre por cuenta de la empresa? —arqueó una ceja—. No te esfuerces porque sé que no es así, tú compraste todo esto con tu dinero.—Arantza, solo acéptalo —persistió.—Ni hablar —se mantuvo firme.—Por favor, no lo rechaces —se acercó a ella y ubicó una mano en cada hombro—. Desde este
Landon y Arantza continuaron caminando dentro del salón mientras conversaban.—Esta noche, estás más hermosa que de costumbre —expresó el presidente, sonrojando a la muchacha.—Tienes buen gusto para la ropa. Este vestido que elegiste para mí es precioso —manifestó.—Y tú sabes lucirlo muy bien. Cualquier prenda se vuelve bella cuando lo traes puesto —acotó.Arantza le dedicó una sonrisa tímida. Su corazón se regocijaba siempre que recibía algún halago suyo.—Este evento solo es una reunión social sin ningún fin en particular, pero la gente asiste con su ropa más ostentosa como si estuvieran en un desfile de gala —comentó la joven, observando a su alrededor.—Solo es un encuentro de los que pertenecen a la alta sociedad. Se juntan para alardear sobre sus empresas y sobre el dinero. Incluso invitan a algunos reporteros para que sean testigos de esta aburrida fiesta —señaló—. Me abruma tanta hipocresía, pero debo estar presente, aunque nada de esto me agrade. Como soy un personaje nuevo
Landon se alejó un poco para mirarla de frente.—Si tú lo deseas, puedo llevarte a otro sitio.—Aquí hay mucha gente y siento que las miradas están sobre mí después de lo que pasó. Preferiría ir a otra parte —manifestó.—Arantza, no quisiera que los comentarios de los demás te molesten —expresó, refiriéndose a lo que los invitados comenzaron a murmurar hacía un rato.—No me interesa lo que personas que no conozco piensen acerca de mí, solo me importa lo que pienses tú —replicó.—Entonces, no tienes nada de qué preocuparte, porque a ti te tengo sobre un pedestal y nadie, absolutamente nadie podrá hacer nada para sacarte de allí ni podrá quitarte el lugar que te pertenece —estableció.Arantza bajó el rostro para ocultar una sonrisa de satisfacción. Adoraba la manera en que Landon la trataba, con tanta delicadeza y dulzura.Ambos salieron del salón y subieron al auto para ponerse en marcha. Después de varios minutos de trayecto, Landon estacionó al costado de una acera. Fue el primero en
Siguieron platicando por un rato más, hasta que el vino empezó a afectar el juicio de ambos. Decían cosas sin sentido, por lo cual se echaban a reír, pero se recordaban en cada minuto que debían hacerlo en silencio para evitar que Carla se levantara.—Arantza, ¿ya te he dicho lo hermosa que luces ahora? —articuló de repente.—Me lo has dicho un montón de veces —resaltó—. Pero me gusta. No dejes de decírmelo —sonrió.—Nunca me cansaré de decirte lo preciosa que eres, por dentro y por fuera —aseveró, con los párpados pesados debido a su estado.—Eres todo un galán, Landon —dijo, con una sonrisa pícara—. Espero que no olvides nada de esto en la mañana.—No estoy tan mal, y aun si lo estuviera, no podría olvidarlo —contestó, aproximándose a su rostro para rozar su boca—. Me encanta el sabor de tus labios, jamás me aburriré de sentirlos.—¿Y… te conformarás solo con eso? —cuestionó, colocando la mano en el torso de Landon para jugar con su corbata.—A decir verdad, siempre quiero más. Nunc
Mientras la pareja experimentaba una estupenda mañana, ocurría lo contrario con Noah. Los reporteros que habían asistido al evento de la noche anterior lo aniquilaron con comentarios humillantes en los periódicos y en la televisión."Escándalo en la reunión social que fue realizada anoche, protagonizada por Noah Valenzuela, vicepresidente de la conocida agencia Logotype. No tuvo reparos en manifestar sus reclamos, los cuales fueron dirigidos a Landon Parodi, actual presidente de la prestigiosa empresa de cosméticos Hidden Beauty, y a su novia. Todo indicó que se trató de un triángulo amoroso en el que Noah no pudo triunfar, quedando en la zona de amigos. Tanto fue su resentimiento que terminó confesando que la actual novia de Landon Parodi fue pareja de su media hermana, Lenya Parodi, cuando ésta aún vivía. Además, amenazó al presidente con destruirlo..."Las críticas por parte de los periodistas continuaron, mientras que Noah observaba la pantalla de su laptop con la ira reflejada en
Noah regresó a su casa, aturdido por la revelación de Nicolás. Sacarlo de la cárcel sin tener ninguna garantía de que cumpliría su parte era un riesgo bastante alto, pero empezó a considerarlo. En ese instante, llamó a un abogado para comentarle el caso de Nicolás.Las semanas transcurrieron rápidamente y Arantza obtuvo su licencia de conducir luego de aprobar su examen teórico y práctico. Landon la había ayudado bastante a mejorar como conductora, así que pudo pasar la prueba.Mientras tanto, Noah realizó un trato con el exgerente. Haría todo lo posible por sacarlo de la cárcel a cambio de que le brindara la dichosa información que guardaba con tanto recelo. Fue así que el abogado que contrató para llevar el caso de Nicolás logró conversar con el juez que había dictado su sentencia y le prometió que le pagaría una suma exorbitante de dinero si lo dejaba libre por buen comportamiento. Al principio, el juez no quiso aceptar ya que Carla había movido todos sus hilos para que Nicolás pe
Landon permaneció callado por un instante, entornando los ojos.—¿Haces todo esto solo para alejarme de Arantza? —cuestionó con sorna—. Qué ridículo eres.—¿Quieres ponerme a prueba? —agregó Noah.—De verdad que no te entiendo. ¿Crees que sacándome del camino lograrás que Arantza se fije en ti? —le dedicó una sonrisa burlona—. He estado lejos de esta ciudad durante cinco años y en ese lapso no has podido hacer nada para ganarte su amor. No es mi culpa que hayas fracasado.—Tú sabías que Arantza estaba enamorada de ti, que te amaba, y lo utilizaste a tu favor para reconquistarla siendo Landon. Sin embargo, en cuanto se entere de lo que le ocultas, se sentirá decepcionada, engañada, y una vez más terminará contigo, tal y como lo hizo hace cinco años. ¿Y sabes quién estará a su lado para consolarla? Yo —asumió.—Exacto, tú estarás con ella para consolarla, pero jamás pasarás de ser algo más que eso, un hombro sobre el cual llorar —señaló—. Jamás saldrás de la zona de amigos.—Eso está po