El Boss de la mafia americana recibía a sus queridos nietos, ellos eran tan pequeños, no pudo evitar recordar cuando sus gemelos tenían esa edad, como eran tan apegados a él, pasaban todo el tiempo posible juntos

Los Gemelos lo admiraban y seguían cada paso que él daba, a excepción de cuando habían de las suyas en travesuras que lo hacían enfadar, era ahí cuando su esposa intervenía y defendía a sus dos bodoques, para ella eran adorables aunque en realidad eran unos demonios, ella estaba algo ciega

— Vaya, Nathanael, al ver a tus nietos mi mente viaja al pasado, creo estar viendo a tus gemelos cuando tenía la misma edad, ambos son idénticos a sus padres, así que parecen gemelos también — Jael, quien había visto crecer a los hijos de su amigo, estaba impresionado

— Si, son idénticos, recuerdo esos tiempos como si hubiera sido ayer, es por eso mismo que estaré muy atento, sé de lo que son capaces ese psr de ternuras, pero procuraré estar preparado

En la mansión Castrioli, Vanessa ya espe