Obviamente que el joven mafioso no iba a decir el porque tan fácilmente a menos que fuera necesario, pero por otro lado le apremiaba aclarar su situación también

— Papá, Daniela ya no es una niña, tarde o temprano tenía que enamorarse de alguien, menos mal que fué un conocido nuestro, de buena familia y con un futuro prometedor, no un malviviente que haya conocido en la universidad, o algunos de nuestros guardaespaldas que suelen drogarse a escondidas con la coca que traficamos, ¿no te lo parece?

— Es lo mismo que pienso yo, conocen a mi hijo desde que era un niño, sabes que se ha dedicado a su preparación, no es un picaflor, trabaja mucho cada día para hacerse de un patrimonio propio, eso sin mencionar que es el próximo heredero de la compañía Black, ¿qué más quieres, Nathaniel? Lucien, hoy por hoy, es un príncipe empresarial

— Negociamos, papá, si la familia Black, te está quitando a una de tus hijas, creo que lo más justo sería que te ofreciera a una de sus hijas también, ?