Los gemelos Castrioli, escuchaban atentos a lo que su amigo les contaba sobre como convenció a Romina de ser su mujer, también de como se habían dado las cosas en la cita que tuvo con Borjad Strovoshky, y como se habían disparado a quemarropa

— Hades, Romina está muy asustada, ella piensa que no tienes manera de hacerle frente a un mafioso peligroso como el que te tiene en cama, está muy preocupada por tí, ella te dijo que estuvieras tranquilo por qué nos vió llegar, quiere protegerte

— Mi Romina es muy ingenua, no es que no sea inteligente, lo que pasa es que es ajena a la maldad del mundo, ella va por la vida solo existiendo sin hacerle daño a nadie y piensa que nadie le hará daño a ella

— Ya lo hemos notado, aunque debes alegrarte que le importes de esa manera a pesar de que están casados solo por un contrato matrimonial, si fuera Romina y ese ruso mata por mí, me la pensaría seriamente en irme con él, digo, si con mi esposo no me detiene un sentimiento lo suficientemente fuerte — E