La vida en la mansión Thornton seguía su curso habitual, marcada por una rutina estricta y ceremoniosa. Cada mañana, Isabel se levantaba al amanecer, asistía a sus lecciones de piano y etiqueta, y pasaba las tardes en la compañía de su madre y las visitas sociales.
Sin embargo, desde su encuentro con Daniel en el jardín, Isabel sentía que algo había cambiado profundamente dentro de ella. Su corazón latía con una nueva esperanza, una chispa de rebeldía que no podía ignorar.
El jardín se había convertido en su refugio. Cada vez que podía, se escabulle entre las plantas y flores, con la esperanza de encontrarse con Daniel. Aunque sus conversaciones eran breves y siempre bajo la amenaza de ser descubiertos, esos momentos robados eran suficientes para llenar su día de alegría y significado.
Una tarde, mientras el sol comenzaba a descender en el horizonte, Isabel se aventuró una vez más al jardín. Caminó lentamente, disfrutando de la tranquilidad que ofrecía el lugar. Escuchó el suave murmullo de una fuente cercana y el canto de los pájaros, creando una sinfonía natural que calmaba su espíritu.
Se detuvo junto a un rosal en flor, inhalando profundamente el dulce aroma de las rosas. En ese instante, escuchó pasos detrás de ella y su corazón dio un vuelco. Giró lentamente y vio a Daniel, quien la observaba con una mezcla de sorpresa y alegría.
Daniel:"Señorita Thornton," dijo él, bajando la cabeza en señal de respeto. "
Daniel: No esperaba verte aquí tan tarde.
Isabel:""Por favor, llámame Isabel sonriendo.
Isabel: yo tampoco esperaba encontrarte a esta hora. ¿Siempre trabajas hasta el atardecer?
Daniel asintió, sus ojos brillando con una calidez que Isabel encontraba reconfortante.
Daniel: a veces, el jardín requiere más atención, especialmente en esta época del año.
Isabel se acercó, sintiendo una oleada de emociones al estar tan cerca de él.
Isabel: el jardín luce hermoso, como siempre. Tu dedicación es evidente.
Daniel:Gracias, bajando la mirada modestamente.
Daniel: es un trabajo que amo."
Hubo un breve silencio, lleno de una tensión palpable. Ambos sabían que su cercanía era peligrosa, pero ninguno podía resistir la atracción que sentían.
Isabel:¿Puedo ayudarte con algo?"
preguntó Isabel de repente, queriendo prolongar el momento.
Daniel levantó la vista, sorprendido pero complacido por su oferta.
Daniel:"Claro, si quieres, podrías ayudarme a regar las plantas de la sección oeste."
Isabel: "Me encantaría."
Juntos, caminaron hacia la sección designada, donde Daniel le entregó una pequeña regadera. Isabel comenzó a trabajar, disfrutando de la sensación del agua fresca y el contacto con la tierra. Mientras tanto, Daniel la observaba, admirando su disposición a ensuciarse las manos, algo que pocas jóvenes de su posición harían.
Isabel:"¿Siempre has trabajado en jardinería?"
preguntó Isabel, rompiendo el silencio.
Daniel: Si, aprendí de mi madre. Ella siempre ha tenido un don para las plantas.
Isabel sonrió, imaginando a una versión más joven de Daniel, aprendiendo de su madre en un jardín parecido a esteIsabel:el : Debe ser agradable trabajar en algo que amas.
Daniel: Lo es, acercándose un poco más.
Daniel "Y tú, Isabel, ¿tienes alguna pasión oculta?
Isabel suavemente, sorprendida por la pregunta.
Isabel: he amado la música y la literatura. Me gusta perderme en las historias y las melodías.
Daniel : Entonces tienes el alma de una artista
Daniel : Es raro encontrar a alguien que aprecie tanto la belleza en el mundo.
"Isabel se sonrojó ligeramente, agradecida por sus palabras.
Isabel: "Y tú, Daniel, tienes el alma de un poeta. Tus palabras siempre parecen tener un significado más profundo.
"Se miraron a los ojos, y por un momento, el mundo exterior desapareció. En esos instantes, no eran la hija de un noble y un humilde jardinero, sino dos almas conectadas por un amor puro y sincero.
De repente, el sonido de pasos acercándose los sacó de su ensoñación. Isabel se giró rápidamente, su corazón latiendo con fuerza. Vio a su madre Lady Eleonor, acercándose con una expresión de desaprobación en su rostro.
Lady Eleanor:"Isabel, dijo con voz firme.
Lady Eleanor: Es hora de cenar. Ven adentro.
Isabel: Sí, madre, bajando la cabeza. a voy.
Antes de irse, Isabel lanzó una última mirada a Daniel, quien le devolvió una sonrisa reconfortante.
Mientras caminaba hacia la mansión, sintió una mezcla de tristeza y esperanza. Sabía que sus encuentros con Daniel eran arriesgados, pero no podía evitar desear más momentos como esos.
Esa noche, durante la cena, Isabel apenas probó bocado. Su mente estaba llena de pensamientos sobre Daniel y su conversación en el jardín. Observó a su familia, cada uno absorto en sus propios asuntos, y se dio cuenta de lo solitaria que se sentía en su propio hogar.
Después de la cena, Isabel se retiró a su habitación, buscando consuelo en su diario. Escribió sobre su encuentro con Daniel, sus sentimientos y sueños. Al cerrar el diario, sintió una nueva determinación. No permitiría que las expectativas y restricciones de su mundo apagaran la chispa de amor y libertad que había encontrado en el jardín.
Al día siguiente, Isabel decidió aprovechar una breve ausencia de su madre para visitar el jardín nuevamente. El sol estaba en su punto más alto, iluminando cada rincón del jardín con una luz dorada. Isabel caminó con pasos decididos, buscando a Daniel. Lo encontró trabajando cerca de la fuente, rodeado de flores de colores vibrantes. Al verla, Daniel dejó de trabajar y sonrió, su expresión iluminando.
Daniel: Isabel," dijo él, acercándose.
Daniel:"Me alegra verte de nuevo.
Isabel: Y a mí,"
su corazón llenándose de alegría.
Isabel: "He estado pensando en nuestra conversación.
Daniel: ¿Sí? preguntó Daniel, intrigado.
Isabel asintió, tomando un respiro profundo.
Isabel: Me doy cuenta de que quiero más momentos como esos. Quiero conocerte mejor, compartir más contigo.
Daniel la miró, conmovido por su sinceridad.
Daniel : "Yo también, Isabel. Pero sabes que es peligroso. Si nos descubren..
Isabel : Lo sé,"
interrumpió Isabel, su voz firme.
Isabel : "Pero estoy dispuesta a correr el riesgo. No quiero vivir una vida de arrepentimientos.
Daniel la miró con una mezcla de admiración y preocupación. Sabía que sus sentimientos eran reales, pero también entendía las consecuencias que podrían enfrentar.
Daniel: Entonces, tendremos que ser cuidadosos," dijo finalmente, tomando su mano. Podemos encontrarnos aquí, en el jardín, cuando sea seguro.
Isabel sonrió, apretando suavemente su mano.
Isabel : "Gracias, Daniel. Prometo ser cuidadosa."
Con esa promesa, continuaron trabajando juntos, compartiendo risas y miradas furtivas. Cada encuentro fortalecía su conexión, haciéndolos sentir más vivos y libres. Aunque sabían que su amor era un desafío constante, estaban dispuestos a enfrentarlo juntos.
Los días pasaron y sus encuentros clandestinos se volvieron más frecuentes. Isabel se convirtió en una maestra del engaño, encontrando excusas para escapar al jardín sin levantar sospechas. Cada vez que veía a Daniel, su corazón latía con fuerza, sabiendo que esos momentos eran preciosos y fugaces.
Un día, mientras trabajaban juntos cerca de la fuente, Isabel sintió la necesidad de compartir algo más profundo con Daniel.
Isabel : "Daniel," comenzó, "Quiero que sepas que significas mucho para mí. Más de lo que las palabras pueden expresar.
"Daniel se detuvo y la miró, su corazón latiendo al unísono con el de ella.
Daniel: "Isabel, tú también significas mucho para mí. Nunca he conocido a alguien como tú.
"Sus miradas se encontraron, llenas de una intensidad que ninguna palabra podría capturar acercándose aún más, sus labios rosando suavemente entre ellos, Daniel la agarro por la cintura quedando sus cuerpos juntos y besandose apasionadamente . Su respiración se agita, el deseo y la pasión los envuelve. En ese momento, supieron que su amor era real y valía la pena luchar por él.
Mientras el sol comenzaba a descender, creando sombras alargadas en el jardín, Isabel y Daniel se despidieron con la promesa de encontrarse de nuevo.
Cada despedida era amarga, pero también estaba llena de esperanza. Sabían que, mientras tuvieran esos momentos juntos, podrían enfrentar cualquier desafío que se les presentara.
Esa noche, mientras Isabel se preparaba para dormir, su mente estaba llena de pensamientos sobre Daniel y su amor prohibido. Cerró los ojos y se dejó llevar por los sueños, donde podían estar juntos sin restricciones, libres de las cadenas de la sociedad.
El tiempo siguió su curso y, con cada encuentro clandestino, su amor se fortalecía. Isabel y Daniel sabían que estaban jugando con fuego, pero no podían evitarlo. Sus corazones habían encontrado un hogar el uno en el otro, y no estaban dispuestos a renunciar a eso.
Una tarde, mientras Isabel se paseaba por la mansión , escuchó una conversación entre su madre y su padre en el salón. Se acercó a la puerta entreabierta y escuchó atentamente.
Lord Henry Thornton : decía Eleanor, "es una decisión import
ante y ya tomada . Debemos pensar en el futuro de Isabel.
lady Eleanor : Lo sé, respondió
Lord Henry Thornton : con su voz grave y autoritaria.
Lord Henry Thornton: Eleonor, es una decisión importante ya tomada debemos pensar en el futuro de Isabel.Lady Eleonor : lo sé Lord Henry Thornton : He considerado cuidadosamente todas las opciones. Dice con su voz autoritaria.Isabel, escondida detrás de la puerta entreabierta, contuvo la respiración. Su corazón latía con fuerza mientras intentaba escuchar cada palabra. La conversación de sus padres parecía tener una seriedad inusual, y su intuición le decía que algo importante estaba a punto de revelarse.Lord James Ashford es un hombre de buena reputación, continuó Lord Henry. Tiene una posición sólida y puede ofrecerle a Isabel una vida de estabilidad y prestigio. Además, esta alianza fortalecerá nuestros lazos con la familia Ashford, lo cual es esencial para nuestros intereses.Lady Eleanor: Estoy de acuerdo, Pero, ¿qué piensa Isabel sobre todo esto? Ella siempre ha sido una joven con carácter fuerte.Lord Henry Thornton : Isabel entenderá que es por su propio bien, Le explicar
La mansión se llenó de invitados, todos ansiosos por celebrar la unión de dos poderosas familias. Isabel se preparó para la fiesta con un nudo en el estómago. Sabía que debía mantener la compostura y actuar como se esperaba de ella, pero cada fibra de su ser quería rebelarse.La noche del anuncio del compromiso entre Isabel y Lord James Ashford llegó, y la mansión Thornton estaba resplandeciente con luces y adornos. Los sirvientes se movían rápidamente, asegurándose de que cada detalle estuviera en su lugar. Los invitados, vestidos con sus mejores galas, comenzaban a llegar, llenando los salones con murmullos de conversación y risas. Isabel, en su habitación, observaba su reflejo en el espejo mientras su doncella ajustaba los últimos detalles de su vestido. La tela de seda azul se deslizaba suavemente sobre su piel, y los intrincados bordados brillaban a la luz de las velas. Pero a pesar de su apariencia impecable, su corazón estaba lleno de inquietud y desesperación."Señorita Isabe
La noche estaba en calma, solo viento entre los árboles rompía el silencio.El carruaje avanzaba lentamente por el camino hacia el pequeño pueblo costero de Ravenswood, donde Isabel y Daniel esperaban encontrar su libertad.La luna llena brillaba intensamente, iluminando su camino y brindándoles una sensación de esperanza.Daniel: Estamos cada vez más cerca, tomando la mano de Isabel.Daniel: Todo saldrá bien, lo prometo.Isabel asintió, aunque no pudo evitar sentir un nudo en el estómago. Habían dejado atrás sus vidas y sus familias, embarcándose en una aventura incierta. Pero lo que le daba fuerza era saber que Daniel estaba a su lado, dispuesto a luchar por su amor tanto como ellaEl Viaje transcurrió en un silencio reflexivo. Isabel observaba el paisaje que pasaba rápidamente a su lado, cada vez más ansiosa por llegar a su destino. El pequeño pueblo de Ravenswood representaba su única esperanza de una vida juntos, lejos de las restricciones y expectativas de la alta sociedad. Fin
La noche de la fiesta del baile del compromiso de Isabel en la mansión Thornton estaba en su apogeo.Los candelabros de cristal brillaban intensamente, reflejando su luz sobre los invitados que reían y conversaban animadamente. La orquesta tocaba una melodía animada y la atmósfera estaba llena de elegancia y esplendor. Sin embargo, en medio de todo el bullicio, una sombra de preocupación comenzaba a cernirse sobre la familia Thornton.Edward Thornton, el hermano mayor de Isabel, había notado su ausencia desde el comienzo de la velada. Inicialmente, pensó que ella simplemente se había retirado a su habitación para descansar, o que estaba conversando con alguien en uno de los salones menos concurridos.Lord James se encontraba buscando también a Isabel, no la veía desde comienzo de la velada. Se acerca a su cuñado para preguntar por Isabel.Lord James: Dónde está mi futuro esposa? Querido cuñado.Edward Thornton : creo que se a retirado a su habitación a descansar, a Sido un largo día.
Lady Eleonor se encontraba sola en su habitación, sumida en una profunda melancolía. La preocupación por Isabel la consumía, pero también le traía recuerdos que había intentado olvidar durante años.La desaparición de su hija había reabierto heridas que nunca habían sanado del todo. Sentada en el sillón junto a la ventana, con la vista fija en el jardín iluminado por la tenue luz de la luna, Lady Eleonor dejó que sus pensamientos vagaran hacia un pasado que la atormentaba.Había sido una joven rebelde y apasionada, muy diferente de la mujer contenida y elegante que ahora era. Su corazón había pertenecido a Alexander, un hombre que no cumplía con las expectativas de su familia, pero cuyo amor ardiente y sincero había conquistado cada fibra de su ser.Alexander era un poeta, un soñador, un hombre de espíritu libre que la había hecho sentir viva y amada como nunca antes.El amor entre Eleanor y Alexander floreció en secreto, lejos de los ojos escrutadores de la alta sociedad. Se encontrab
Edward y Lord Henry estaban en el despacho, discutiendo los próximos pasos con evidente frustración. La tensión en la habitación era palpable, y el rostro de Lord Henry mostraba la severidad de su carácter, mientras que Edward, aunque igualmente preocupado, intentaba mantener la calmaEdward: "Debemos ampliar la búsqueda más allá de los límites de nuestra propiedad,"Edward: "Quizás se hayan dirigido a algún lugar fuera de nuestro alcance inmediato.Lord Henry : No podemos permitir que esto se convierta en un escándalo,"Lord Henry: "La reputación de nuestra familia está en juego. Si la sociedad se entera de que Isabel ha huido, será una deshonra que no podremos superar."Lady Eleonor entró al despacho con pasos decididos, interrumpiendo la conversación. Ambas miradas se volvieron hacia ella, y por un momento, el peso del pasado y del presente se sintió en el aire.Lady Eleanor: "Tenemos que encontrar a Isabel," su voz cargada de una determinación renovada.Lady Eleonor: "Pero debemos
La mansión Thornton, normalmente siempre se encuentra tranquila, pero desde hacía días, estaba en un estado de agitación contenida. La noticia del compromiso de Isabel con Lord James Ashford había sido recibida con una mezcla de sorpresa y aceptación por parte de la alta sociedad.Sin embargo, dentro de las paredes de la mansión, la situación era mucho más complicada. Isabel había pasado los últimos días en un torbellino de emociones.Su compromiso con Lord James se había anunciado públicamente, pero su corazón pertenecía a Daniel. Mientras observaba el jardín al atardecer desde su ventana, se sentía atrapada entre el deber y el amor verdadero.Esa tarde, en la cena especial que había sido organizada en la mansión para anunciar oficialmente la fecha del matrimonio. Los invitados, una mezcla de nobles y figuras influyentes, se reunieron en el gran salón, esperando con ansias el anuncio formal. Lord Henry Thornton, con una expresión severa y autoritaria, se levantó y golpeó su copa de v
Finalmente, la noche del escape llegó. Isabel se encontraba en su habitación, vestida con una simple bata de noche, esperando ansiosamente la señal de Daniel.Laura le avisaría a Isabel cuando Daniel llegara,no podía perder tiempo.Había empacado solo lo esencial, sabiendo que tendrían que viajar ligeros y rápido. El reloj marcaba la medianoche cuando escuchó a Laura tirar una pequeña piedra en su ventana esa era la señal. Se acercó con cautela y vio a Laura,esperándola en el jardín. Su corazón latió con fuerza mientras abría la ventana y se deslizaba hacia abajo con cuidado.Laura: Vamos, señorita Isabel, susurró la están esperando en el jardín.Laura : "Es ahora o nuLaura:ñorita Isabel.Con pasos silenciosos, se dirigieron hacia el lugar acordado, dónde Daniell la esperaba .Daniel: Isabel amor estás bienIsabel: si amorIsabel: gracias Laura por ayudarnos a estar juntosLaura: sean felices y cumplan sus sueños,les deseo lo mejor de este mundo. Dios los bendiga a ambos.Laura: ya deb