En la salida, Dinora estaba esperándolo en su viejo coche. Al verlo se acercó a él. “¿Qué es eso tan importante que tienes que hacer, deje un trabajo por venir aquí?”. David camino hacia ella, detrás venía la niña cargando su vieja mochila mirando a Dinora. Cuando Dinora la vio abrió mucho sus ojos y estaba a punto de decir algo cuando David la detuvo. “Cierra la boca, es solo una conocida”. Dinora se cubrió la boca para no preguntar, subieron al auto, David le dijo a Dinora a donde ir. En el coche Dinora miraba a la linda parejita. Al llegar Dinora y los dos niños se bajaron, Gloria camino hasta una vieja casa que estaba por derrumbarse. Dinora observó alrededor, la mayoría de los vecinos se habían marchado dejando las casas abandonadas. Ella miró a David que entró a la pequeña casa. “Abuela ya vine”. Gloria se acercó a un viejo sillón frente a una ventana. La mujer en el sillón poco a poco se enderezo levantando sus manos, tocó la carita de la niña y sonrió. “Mi Gloria ha ll
Alonso seguía con Dinora besándose en el pórtico de la casa de Marina. David salió de la casa ignorando a la pareja y camino hacia la casa donde estaba su padre, al llegar con las personas Erick lo presentó. “El es mi hijo David”. Dante observó al chico que también lo miraba extrañamente. “Hola”. Le dio la mano. David solo lo observó en silencio. Este hombre nunca antes lo había visto junto con su padre, era un completo desconocido al que no había investigado. Miranda le dijo. “No le gusta que lo toquen”. Dante entendió y se rasco la nuca. Carlos llegó en su coche junto con Marina al bajar lo primero que hizo fue encontrarse con la mirada de Erick, al instante todos se quedaron todos en silencio y se pusieron incómodos a todos por la extraña fijación entre ellos. Por su parte Marina no podía dejar de verlo sin que su corazón se emocionara y pensaba que sería difícil este camino largo de encontrarse con él muy seguido. Erick solo observaba a la mujer pensando en lo que David le
Marina sonrió tristemente. “¿Crees que quería ocultarlo? Cuando tuviste ese accidente casi mueres, rece y rece pidiendo a Dios que te dejara vivir y estaba feliz de que salieras de peligro, pero nunca imagine que la despertar nunca me recordarías, cuando trate de decirte quien era y sobre nosotros te daban dolores de cabeza”. Ella miró por la ventana recordando. “El doctor dijo que no podíamos presionarte y que era mejor que tu recordaras con el tiempo…” Ella sonrió y se agacho antes de mirarlo y decirle. “Pero eso nunca paso…” Marina siguió. “Cuando tu padre apareció me di cuenta de la gran farsa a la que me sometiste… te hacías llamar Daniel Montoya, tenías familia algo que habías negado y eras rico, nunca me lo dijiste, llegaste a esta ciudad con algunos cambios de ropa y sin dinero, te dimos asilo en nuestra casa, nunca me imaginé que serías alguien tan importante en USA”. Ella apretó la silla de la mesa. “Aun así no me importo que me engañaras, siempre te justifique pensando
Erick se quedó de pie en la sala de estar pensando en todo. Era evidente que él no la recordaba, tenia sentimientos encontrados y muchos problemas sin resolver, su divorcio, su padre, el negocio, era mucho para él en ese momento. Camino hacia la puerta y antes de salir. “Lo único que quería es que supieras la verdad”. David se fue dejando a Erick solo en la sala todo estaba en silencio. El chico entró a la casa, todo estaba en silencio, caminó hacia la habitación de su madre y la puerta estaba entreabierta, ella estaba de pie cerca del armario, observaba un álbum viejo al que le faltaban fotografías, suspiro y lo guardo, al girar observó la silueta de su hijo escondido detrás de la puerta. David abrió poco a poco, Marina le advirtió cansada. “Hoy no quiero hablar de esto, por favor estoy cansada”. David entendió y se fue a su habitación. Más tarde las dos parejas regresaron, encontraron a Erick tomando con una botella en la mano. Alonso se acercó a Erick. “¿Amigo qué pasa?”. E
Alonso tocó a la puerta y entró. Se sentó a un lado de su amigo, observó también las fotos y videos. Alonso le hizo un comentario. “Te veías feliz”. Erick sonrió. “Si, creo que lo era, no había traiciones, no había el peso de llevar la empresa, no tenía que ser el hijo perfecto para que mi padre estuviera contento, en USA no podía equivocarme o me llevaría de encuentro todo el negocio de la familia… Aquí era solo un simple mecánico”. Alonso preguntó. “¿Qué vas a hacer? Ella se va a casar y no habrá vuelta atrás”. Erick se rio. “No la recuerdo, me gusta, pero como ella me lo dijo, no la amo o podría decirse que sí”. El se estiro el cabello. “¡AHHHH! No sé en realidad lo que siento por ella y simplemente no puedo impedir que se case, solo soy el padre de David, ya no tenemos ninguna relación entre sí hace años”. “Y si recuerdas?”. Preguntó Alonso, había una posibilidad de que lo hiciera. Erick negó. “¿Pero Cuándo? Si lo hago será muy tarde y si nunca lo hago le quitaré su oportuni
Después de un tiempo ambos se quedaron dormidos abrazados, el día siguiente sería pesado para todos. Por la mañana Erick se levantó, observó por la ventana la otra casa, todo estaba muy tranquilo, se lavó y se vistió para bajar a desayunar, todos lo esperaban. Alonso le preguntó ya en el desayuno. “¿Estás seguro de no ir?”. Erick asintió mientras comía. “Será lo mejor, no quiero incomodar a Marina el día de su boda”. Estas palabras salieron con un sabor amargo. Alonso suspiro. “Ok”. Más tarde todos se estaban alistando, Erick ayudaba a su hijo con la corbata, se inclinó a su altura para amarrarla, David lo miraba fijamente, hoy su padre y su madre se separarían por completo y cada uno haría su vida. Erick sonrió. “Listo”. David llevaba un traje azul con corbata roja y camisa blanca, se veía muy guapo y tierno. Alonso salió de su habitación ya con su traje puesto y le dijo a David. “Es hora de irnos”. David asintió y caminó por la casa hasta la salida. Erick miró a Alonso y af
Respiro rápidamente para calmarse, las imágenes empezaban a llegar poco a poco. Bajo las escaleras y salió de la casa angustiado, camino por una vereda conocida y llegó al mar, miro alrededor y empezó a recordar cuando estuvo aquí la primera vez…Recuerdo de Erick…Erick conducía un auto a alta velocidad, se brincaba los semáforos y los otros autos le advertían con el sonido de sus bocinas, su pecho dolía no podía creer lo que acababa de ver, su mejor amigo con su prometida, llegó a la mansión, dirigiéndose al despacho, abrió la puerta encontrando a su padre con algunos documentos.El padre de Erick miraba a su hijo. “¿Qué haces Erick? ¿Por qué vienes así?”.Erick lo miro. “Se cancela la boda con Tamara”.El hombre frunció el ceño. “¿Qué? ¿Por qué?”.Erick le dijo a su padre. “La encontré con Alonso en la cama, esa mujer me ha estado engañando con mi mejor amigo y no me casaré con ella”.El señor Raúl suspiro. “¿Es solo eso? Pensé que era algo más grave”.Erick frunció el ceño. “¿No t
Erick caminó hasta ellos y observó el lugar, en la puerta estaba el anuncio. -SE SOLICITA AYUDANTE- Erick se acercó al hombre mayor que le sonrió diciendo. “¿Vienes por lo del trabajo?”. Erick asintió sin hablar, el hombre mayor lo entrevistó necesitaba urgente alguien que lo ayudara. Erick era de pocas palabras, el señor le sonrió y preguntó. “¿Cómo te llamas?”. Erick se quedó callado por unos segundos y después le dijo. “Daniel… Daniel Montoya”. Él no quería saber nada de su familia, lo habían herido mucho y no quería volver. Fin del recuerdo…. A partir de ese momento cada instante, cada risa, cada caricia que disfruto con Marina llegaron a su mente, sus noches de pasión juntos amándose, la muerte del padre de Marina, el accidente… Todo. Después de unos segundos y recobrar el aliento, miró su reloj, se retiró rápidamente regresando a la calle donde estaba la casa, la miro por última vez y subió a su auto. En el camino le llamó a Alonso y le pidió. “Cuida de David por mí”. A