Alejandra se quedó helada y clavada en su sitio, se había excedido demás está vez, ahora estaba en serios problemas con su aterrador esposo, al que no le había parecido que le respondiera de esa manera, tomó un poco de valor y habló — Tú no me contaste nada cuando pregunté por la madre de Emill, te enfureciste y me gritaste que no preguntara nada, ¿recuerdas? ¿por qué debería contarte yo algo de mi vida? — ¡Eso es diferente, yo debo saber todo sobre tí! ¿de dónde vienes? ¿qué es lo que hacías en la universidad? ¿con quién tenías una relación? soy tu esposo, que no se te olvide— ¡Quisiera que se me olvidara, pero cuando estoy a punto de hacerlo, tú te encargas de recordarmelo! ¿por qué no haces como si no me conocieras? ¡no te entiendo maldita sea, no quieres que nos involucremos como un marido y mujer normal, pero si quieres que te rinda cuentas! ¡deberías medicarte! ¿sabes?— Lo que me hace falta es follarte hasta que no me queden fuerzas, y que a ti no te queden energías para lev
Deeguel, ayudado por su bastón, subió las escaleras en busca de su esposa, no era que no le importara del todo como decía, quería que ella volviera a acercarse a él, pero eso se estaba complicando bastante, él era de mal carácter y ella era... era diferente al resto de las mujeres que había conocido — Alejandra, soy yo — el CEO, tocó con los nudillos — necesito que me ayudes a darme una ducha, quedé lleno de tierra cuando salí a buscarte, sabes que no puedo hacerlo solo, y no me.gusta sentirme sucio — Deeguel, quería que Ale, lo ayudara a bañarse, y a buscar un atuendo que vestir — ¡Yo no te envié a qué fueras a buscarme, pídele a Jhonatan, que te ayude! — !Alejandra, es mejor que abras está puerta por la buenas o la voy a tirar! ven a la habitación, te voy a esperar allá, si me haces venir de nuevo a llamarte, tú te lo habrás buscado — ¡¿Me estás amenazando?!— Te lo estoy adviertiendo — el hombre se regresó a su habitación, sus movimientos no eran tan rápidos como el quisera, pe
Alejandra, hacía todo para resistirse al toque y la cercanía de su esposo, pero era tan endemoniadamente atractivo y es que a pesar de lo aterrador que le parecía, Deeguel Rodríguez, le gustaba como hombre, su ex novio Ulises, era también muy apuesto, pero el que la habia hecho mujer era su perverso esposo Las caricias del CEO, subieron la temperatura de la ducha, los besos y una lengua experta que se quedó en los rosados pezones de la rubia, se llevaron su cordura y el hombre la tomó ahí mismo Está vez a Alejandra, le dolió menos, y disfrutaba más de las embestidas profundas que su marido le daba, la tenía presa entre su cuerpo y las baldosas, ella tenía sus piernas cruzadas en la cintura del CEO, Deeguel, no dejaba de besarla de tal manera que le dejó marcas en el cuello y en los senos que Ale, vería mas tarde— Ahh... tan apretada, cálida y húmeda, para mí...— Deeguel... me llevas a la locura, ahh, ahh, sigue, no pares, quiero sentirte así dentro de mí — Quien dijo que voy a pa
Estaba muy jodido que la mujer que había hecho su esposa era la novia de un futuro heredero de una familia de mafiosos muy importante, el CEO maldijo al tío de su mujer por no haberles andado esa importante información, ahora ya estaban en una posición muy delicada— El mafioso quiere que le regreses a su novia, según tengo entendido son novios desde que comenzaron la carrera, Madrigal, estaba esperando que terminarán la universidad para casarse con ella, el mayordomo de la mansión Rodríguez, fue quien lo recibió cuando fue a buscarte, así fue que se enteró que ustedes dos se casaron, — ¡Carajo..! ¿cómo pudo suceder esto? — Dicen que Ulises está más que furioso, que si no le devuelves a Alejandra, arrasará con todo a su paso para recuperarla, eso es muy peligroso, todo se dañaría, el negocio, las empresas, la familia, ella me cae muy bien, es muy hermosa y risueña, pero... creo que deberíamos devolverla, con suerte y Madrigal, no se de cuenta que entre ustedes... ¡qué consumaron el
Jhonatan, no se fue a dormir, estaba al teléfono con su gente en Sinaloa, la orden de su jefe fué que recuperaran los perdido, independientemente de todo, no iba a dejarse quitar la merca por los sapos del cartel de Tijuana— Haremos las cosas tal cual nos ordena — fue la respuesta de los valientes, peligrosos y sanguinarios hombres que trabajaban para Deeguel Rodríguez Mientras tanto el CEO, se dirigió a su recamara, al entrar, Alejandra ya estaba despierta— ¿Dónde estabas? andas por la casa en solo una bata de dormír?— ¿Qué tiene de malo, está bien cerrada y es larga, no es como si anduviera en baby doll, además hay muy pocas personas dentro de la casa — Están las cocineras y las mucamas, eres muy llamativo ya de por sí vestido apropiadamente Deeguel, se quedó callado unos momentos, se preguntaba si su esposa lo estaba velando por bajar en bata de dormír, si era así, estaba exagerando un poco— ¿Tienes hambre? ordené que prepararán un platillo con carne, ¿te gusta la carne, cie
La bella chica, estaba que no creía lo que su esposo le decía, para él esa relación que significó tanto para ella, era totalmente irrelevante para su marido — ¿Cómo puedes hablar así de algo que no conoces? esa fue la relación más importante que había tenido antes de conocerte, ¿cómo puedes decir que fuí irrelevante en la vida de Ulises? ¿tan poco crees que valgo? ¿creés que nadie puede amarme? pues entérate que Ulises Madrigal, me amaba, él me lo dijo, y me lo dijo muchas veces, que nos casaríamos cuándo terminaramos la carrera, solo era cuestión de tiempo, pero esto pasó, un día me llevaron y terminé aquí contigo, soy... soy una traidora, traicioné al único hombre que me ha amado con un hombre que nunca me va a querer siquiera! Alejandra, se puso a llorar, se sentía mal consigo misma por haber sido infiel y por traicionar a su novio, pero es que Emill, se robó su corazón, acepto casarse con su padre para ser la madre de ese adorable niño que necesitaba de una mamá, aceptó ser la e
A la hermosa rubia, parecía que le habían vertido un balde de agua helada, el CEO Rodríguez, ese hombre aterrador, elegante y con aura oscura, era un mafioso, pensándolo bien, su profesión no estaba nada alejada de su rudo aspecto, pero aún así le parecía difícil de creer— ¿Entonces lo de ser CEO, es solamente una fachada? ¿es falso que tienes una compañía y empresas? no puedo creer que Ulises y tú... hayan resultado ser dos peligrosos mafiosos, ¿es que acaso tengo un problema? ¿no puedo atraer a un maestro, un licenciado, un ingeniero? ¡¿Qué demonios sucede conmigo?! yo no... no soy para esta vida...Al escuchar que su esposa dijo esto último en un susurro y que la situación la tenía mal, Deeguel quería abrazarla— Ven aquí, acércate a mí, tranquilízate y respira, esto no es tan malo— ¿Qué no es tan malo? ¡todo el mundo te persigue, ahora entiendo por qué los invitados a nuestra boda se veían tan mal encarados, tan peligrosos! ¿cómo te atreviste a ponerme en esa situación tan pelig
Deeguel, se quedó unos momentos en las palabras que su asistente acababa de decir, a decir verdad, después de la madre de su hijo, y lo mal que le fué en esa relación, creyó que nunca nadie podría despertar sentimientos en él, mucho menos de amor, se había convertido en un CEO amargado, uno que el dolor le había quitado la alegría y le había dado oscuridad a su existencia — ¿Qué tiene de malo que esté enamorado de mi esposa? somos una pareja ahora, es lo más normal del mundo que los esposos tengan sentimientos por el otro ¿no? — el CEO trataba de sonar natural y no sorprendido como estaba después de analizar su situación, amaba a Alejandra, aún sin haberla visto una sola vez, porque la había sentido con su piel, con su alma cruel y despiadada— No lo niegas, ¿eh? Aaahh... el padre resultó igual que el hijo, ambos perdidos por la señora Rodríguez , no por nada llevan la misma sangre, ¿pero... has pensado jefe, si algún día Kara, regresa a reclamar su lugar como la madre de Emill, y co