No hablamos en los primeros minutos de trayecto.Finalmente suspiré.-¿De qué querías hablar conmigo?-Dijiste que no querías hablar. - Susurró con su atención puesta en el camino.Se notaba... incómodo. De hecho creo que estaba sudando levemente debido al brillo repentino de su cara.Era de esos chicos que se veían muy atractivos estirando los brazos para manejar. -Y también dije que no te pagaría una mierda de la cuenta médica que enviaste a mi casa. - Dije con un resoplido. - Solo habla y sácame de revivir una y otra vez esta boda. Me encuentro incómoda.Él me miró de reojo antes de hablar.-¿Tienes algo en contra de la demostración pública de afecto?Giré mi cuerpo para poder hablar con su perfil. Su muy bonito perfil.-Si te refieres a ver una orgía en vivo, la respuesta es que no. Siempre y cuando todo fuera consensuado entre adultos, a mí no me podría importar menos. Sin embargo, no quisiera ser partícipe en ese tipo de eventos porque yo soy una firme creyente de la monogamia.
Después de sucumbir al pánico en los siguientes dos o tres kilómetros debido a que Esteban ni siquiera disminuyó la velocidad en las curvas, por fin pude decir algo más coherente que ¡Oh ah oh!-¡Joder! ¡¿Qué mierda sucede contigo?!Los nudillos de sus manos estaban blancos de la fuerza que utilizaba para sujetar el volante. Estaba muy tenso.-Escucha Megan. - Dijo con voz sombría. - Necesito que te tranquilices para que me dejes pensar.-Claro. ¿Quieres que me tranquilice ahora o cuando vuelvas a derrapar el auto en la siguiente curva y vea a la muerte de cerca? - Pregunté con sorna.Él inhaló profundamente y luego gimió como un animal herido.-La historia es larga; prometo explicarte después si solo te tranquilizas. No me ayuda oler el terror que sale de tus poros. Necesito concentrarme para saber a dónde nos puedo llevar y perder a los pumas de afuera.Yo seguí su ejemplo de inhalar, solo que lo hice más lentamente.No entendía mucho, pero la mención de "pumas" me hizo pensar en qu
Él comenzó a correr conmigo en brazos mucho antes de que quitara mis dientes de su cuello. La adrenalina bombeaba fuertemente por mis venas. El tranquilo bosque ahora era iluminado por las llamas del aparatoso "accidente". Él esquivaba raices y ramas bajas a nuestro paso endemoniado por el lugar. Seguía sin saber qué era lo que estaba pasando y eso sumado a la locura de toda esta noche estaba crispando mis nervios. Me aferré a él con ambos brazos y cerré los ojos deseando que ésto fuera una pesadilla. Finalmente me tranquilicé lo suficiente como para decir una frase coherente cuando él nos escondió detrás de el grueso tronco de un árbol. -¿Ya puedes decirme por qué estamos huyendo de algunos pumas? -Puedo, pero preferiría hacerlo cuando estemos en un sitio seguro. - Dijo mirando brevemente hacia atrás de nuestro escondite. - Es una larga historia y, de hecho, no quisiera involucrarte en esto. -Creo que es un poco tarde para "no querer involucrarme". - Murmuré con incredulidad
-Tan bien como se me da volar. - Dije abrazando mi cuerpo. Tenía mucho frío, mis dientes habían comenzado a castañear minutos antes. Él me miró fijamente hasta que le regresé la mirada. -No he escuchado los pasos de nuestros perseguidores en kilómetros, pero eso quizá se deba a que tomamos algunos minutos de ventaja mientras se organizaban para seguir nuestro rastro. Es peligroso no seguirnos moviendo porque el ruido del agua es demasiado fuerte al estar tan cerca de esa cascada y me temo que no podré oir a nuestros enemigos llegar. -Suena encantador. - Murmuré apretando los dientes. - Y me preguntas por mis habilidades de alpinista por qué... -Porque escalaremos la cascada. Mis cejas se elevaron. -¿No sería más rápido y menos peligroso solo rodear la cosa y buscar otro camino para seguir la corriente del agua? -Si, pero eso dejaría tu encantador aroma por todo el lugar. Son pistas que no dudarán en seguir para encontrarnos. Yo fruncí el ceño. -¿Por qué solo mi aroma? ¿Acaso e
-¿A qué te refieres con emparejamiento? - Pregunté acurrucándome aun más profundo en su pecho. Él hizo un sonido parecido a un ronroneo que me sacó una sonrisa.-Bueno, esa parte fue recientemente descubierta. - Dijo después de un suspiro. - El anterior Alfa era adicto a los casinos humanos. Hasta donde sabía, solo les había pedido prestado un montón de dinero a los pumas; sin embargo, al revisar detalladamente los documentos sobre el monto total de la deuda, me percaté de que había una claúsula extraña que seguramente no leyó el idiota: Si no les devolvía el dinero en un año, ellos iban a tomar posesión de sus negocios y además demandarían un emparejamiento para tener el control de mi manada.Yo parpadeé.-Eso suena mal. - Dije sin saber qué más decirle. - ¿Tienen allgún tribunal o algo para llevarlo ante la justicia?-¿Al anterior Alfa?- Yo asentí. - No. Nosotros creemos más en la justicia con nuestras propias garras. Murió hace ya algún tiempo y yo asumí el mando.-Espero que al me
-¿Pasará pronto?-No. Solo pasará después de que tome a una hembra; una sola vez y las hormonas desaparecerán de mi sistema.Me recosté suavemente en la tierra a su lado.-¿Nada de una salvaje noche de luna llena para ti?-Diferente especie. Nuestras hembras solo entran en celo para intentar procrear con cuantos machos pueda si no se encuentra emparejada. El hecho de que las hormonas dejen de afectarnos cuando el acto concluya es para darle oportunidad al siguiente macho y evitar un derramamiento de sangre.-Sin ganas de seguir follando, el chico no peleará contra el siguiente en la fila por tomar otro trozo del pastel, lo tengo. - Dije distraída. - Entonces, ¿Buscarás a alguna chica de tu manada para aliviarte?Por alguna razón, esa posibilidad me hacía sentir extraña. ¿Qué mierda me sucedía? Yo no era de las chicas que ya se sentían dueñas de un hombre después de solo besarlo.-No. Rentaré algún cuarto de hotel y me daré una ducha helada. Pasará en algún punto si yo... uh... me ayud
Emergimos del agua y enseguida me sujeté a él con todas mis fuerzas.Me había preguntado si podía aguantar la respiración, nunca preguntó si es que sabía nadar.No lo hacía, así que el grito aterrado que cubrió con una de sus manos había salido de lo más profundo de mi pecho.Escupí el agua que había tragado mientras él nadaba velozmente hacia un sitio en donde la profundidad del agua no fuera un problema.-Lo siento, no hay tiempo para que te vuelvas a poner tierra encima. Sujétate fuertemente.¿Acaso no sentía mi abrazo de boa constrictor?De alguna forma el hombre comenzó a correr dentro del agua de manera muy rápida. Quizá incluso más rápido que cuando llegamos hasta aquí. pero no presté mucha atención a eso.A pesar de ese baño helado, seguía sintiéndome sofocada. Un extraño calor comenzaba a recorrer mi cuerpo.-Aguanta un poco más, principessa. De pronto se detuvo abruptamente y comenzó a gruñir.-No me extraña que huyeras, "Alfa". - Dijo una voz frente a nosotros.Ni siqui
Él me aseguró que estaba bien y que esa no era su sangre, pero no estaba convencida así que lo mandé a sumergirse en el río mientras yo cerraba los ojos. ¿Cómo m****a había terminado así? Estaba en mi límite y no hablaba de mi cordura. Desgarré el dobladillo de mi vestido y tomé un gran trozo. De todas formas esto iría directamente a la basura. -Vamos, aun hay pumas buscándonos en el bosque. - Dijo a mi lado antes de cargarme y comenzar a correr. -Avísame cuando pueda volver a hablar. - Murmuré antes de apretar los ojos y y morder el trozo de mi vestido con fuerza. A este punto yo solo quería salir de aquí y dejar atrás a los pumas que querían un pedazo de mí y no entendía muy bien el por qué. Pocos minutos después, el dolor se transformó en hipersensibilidad. Hasta el viento tocando mi piel era como sentir mil agujas por todo el cuerpo. Comencé a sudar y a gemir incontrolablemente. Solo quería que parara. -... tu permiso. Abrí mis ojos nublados por el dolor y miré el perfil